Páginas
▼
viernes, 29 de mayo de 2015
Cómo se hace una chica. Caitlin Moran
"Estoy tumbada en la cama, al lado de mi hermano Lupin.
Él tiene seis años y está dormido.
Yo tengo catorce. Estoy despierta. Me estoy masturbando.
Miro a mi hermano y pienso, con dignidad. "Esto es lo que querría él. Querría que yo fuera feliz."
Porque mi hermano me quiere. A él no le gusta que esté estresada. Y yo también lo quiero; pero no debo de pensar en él mientras me masturbo. Eso no está bien. No puedo permitir que mis hermanos se paseen por mi territorio sexual. "
Como título me pareció atractivo. Estaba claro que no se trataba de un manual para señoritas, así que me picó la curiosidad, además ya conocía otro libro de la autora, Cómo ser mujer, que me había parecido una estupenda lectura. Por eso, hoy traigo a mi estantería virtual, Cómo se hace una chica.
Conocemos a Johanna cuando tiene 14 años. Vive en Wolverhanpton, una zona inglesa con un vecindario lleno de familias con recursos reducidos. Su familia está formada por un padre pensionado con sueños de rock, una madre casi ausente aunque esté en la habitación, un hermano mayor, otro más pequeño y unos gemelos a los que aún no han puesto nombre. Es una chica llena de sueños que la sacan de una vida pelando patatas y recibiendo asistentes sociales, pero no un plan para salir de allí... hasta que gana un concurso. Cuando recibe el premio cometerá un error que la lleven a las prisas por convertirse en otra persona, y así moldeará a Dolly Wilde a su antojo. Entraremos entonces con ella en el mundo de la música mientras Wilde escribe críticas en una revista y prueba las fiestas, el tabaco, el sexo y el alcohol inmersa en esa etapa de la vida llena de hormonas y rebeldía.
Hay muchas novelas que hablan del paso al pensamiento adulto de sus protagonistas. De hecho, es un tema bastante recurrente. Sin embargo no encontramos mucho de repetición en el libro de Moran. Ella da voz a su heroína, porque nunca dudamos que lo sea, y la deja contar una historia en la que la autocrítica y la frescura de la inocencia se abren paso para llenar el libro de un humor sarcástico con el que no podemos evitar soltar alguna carcajada. El recorrido por estos años de la joven Johanna, que será durante finales de los años 80 y los años 90, visto por el lector, tiene también mucho de drama. No porque la autora busque el melodrama en absoluto, sino porque determinadas situaciones, contadas con la naturalidad de quien las vive día a día, son muchas veces más dramáticas precisamente porque sus protagonistas lo han normalizado. Una casa con televisor de alquiler y en la que sus residentes son definidos como básicamente patatólogos, juegos de niños, costumbres de padres... y sueños de una adolescente que vivirá un momento humillante cuando está en esas edad en la que las hormonas y las inseguridades luchan batallas campales dentro de cuerpos que aún no tienen claro si sin niños o adultos. Esa es la situación de Johanna antes de decidir crear a Wilde, de usarla para salir de su vida y que sea un trampolín para mejorar; de vestirla de negro ocultando quien está realmente debajo y lanzarla a comerse el mundo, a probar el sexo, a experimentar. Johanna se convierte en Dolly Wilde la mayor parte del tiempo, como dice ella misma cuando la preguntan, sin darse cuenta de que puede ser engullida por un personaje que se escapa poco a poco a su control. El libro se convierte de este modo en la huida de su vida hacia otra que cree será mejor, como crítica musical y codeándose con estrellas. Nace así uno de los personajes juveniles femeninos más irreverentes con los que me he topado, provocadora aunque inocente, no tiene problemas a la hora de relatar sus experiencias durmiendo en bañeras en fiestas improvisadas, ni tampoco sus prisas por ser sexualmente activa; la heroína que lucha con la vida que le toca y con la que se inventa, que es obligada a mirarse a si misma y que nos deja ver sus inseguridades y necesidades con la misma claridad como si nos las estuviera describiendo. Aunque ella no las sepa, o no las quiera ver, o se las oculte, quién sabe.
Johanna/ Dolly es entrañable, no podemos evitar coger cariño a esta niña en su camino a ser mujer pese a que no aprobemos su comportamiento durante una gran parte del tiempo. Porque, pese a todo, pese a su rebeldía diaria, a su sobreexcitación frente a la vida, a su exageración de adolescente en prácticas, se sincera y nos dice "yo lo que verdaderamente quiero, es ser hermosa" y se nos parte el corazón un poquito porque vamos comprendiendo lo que busca en muchas de sus decisiones. Porque sigue siendo una niña insegura, pese a todo, como todas las niñas inseguras de la misma edad en cualquier lugar del mundo. Y a partir de ahí estamos perdidamente enamorados de su protagonista.
Caitlin Moran deja también un retrato de una clase social, nos habla de las desigualdades, de clases, de sexos, de complejos... sin abandonar en absoluto un humor corrosivo que marca toda la novela. Dota al libro de un contexto que no usa tampoco para justificar las actitudes de sus pobladores, pero que al lector le sirve para fijarse en un par de cosas sobre la vida de otras personas.
Cómo se hace una chica es una novela especial, para reír, para disfrutar, y también para dejarnos conmover por el corazón de esta chica grandota, heroína de su propia vida. Un libro francamente recomendable, para reír... y también para emocionarse.
Leer por la calle es una costumbre sana a ratos, porque nos hace tropezar con bordillos o farolas (no pienso profundizar en esta afirmación), pero que, en mi caso, suele acabar por llevarme a mi banco, porque es mío aunque nadie lo sepa, bajo un árbol a disfrutar de las letras. En este caso, diré que he levantado la vista del libro alguna vez al darme cuenta de que me estaba riendo sola, y he tropezado con un par de miradas de extrañeza al hacerlo. Supongo que es otra forma de compartir lecturas, porque os aseguro que todos bajaron luego la vista hacia el título del libro. En fin, cosas que pasan cuando sacamos las lecturas a la calle.
Así que decidme, ¿vosotros sois de los que sacan las lecturas a pasear o preferís leer en la comodidad del hogar?
Gracias
Me gusta lo que dices en tu reseña y estoy seguro que disfrutaría mucho del libro, así que voy a hacerme con el. Además me gustan las historias de paso de la adolescencia a la madure.
ResponderEliminarA mi me encanta leer en el tren e ir con la nariz en el libro desde la estación hasta el trabajo... Aunque algún tropezón me he llevado XD
HOLA:
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu reseña sobre un libro que parece fresco, sincero, divertido... Me lo apunto para la Feria del Libro que hoy comienza (la de Madrid, se entiende). De Caitlin Moran no he leído nada (ni siquiera la conocía) pero pienso que éste puede ser una magnífica puerta de entrada.
Sí, es cierto que hay muchas novelas sobre el paso a la vida adulta (paso difícil donde los haya) pero no por eso deja de ser un momento interesantísimo de la vida.
Sobre si saco a mis libros de paseo. Te diré que suelo subirlos al metro porque he visto que les gusta y que así el trayecto se hace más breve. Al parque los llevo poco porque no suelo pasear solo por allí y, claro, sería feo no charlar con la/s persona/s que me acompaña/n.
Un beso
El primer párrafo de la reseña me ha desconcertado y el último me ha dibujado una sonrisa... :) Saludos.
ResponderEliminarNo conocía el libro pero parece interesante lo que cuentas tanto por el planteamiento como por la época en la que transcurre, no me importaría leerlo
ResponderEliminarBesos
Hola!! No conocía a la autora hasta que hace poco hablaron de ella en la radio y me apunté este libro. Gracias por la reseña, pinta muy bien. Besos
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarMe ha llamado mucho la atención. Nunca he leído nada sobre una protagonista que viva ese cambio de niña a mujer, el fragmento que pusiste es un poco... extraño, pero me ha picado la curiosidad. Seguramente también acabaré enamorada de ella.
Suelo sacar los libros a la calle, sobretodo porque leo mucho en el metro. Y me he visto en esa situación de estar riendo o llorando con un libro y que la gente me mire.
Un beso!
Tiene pinta de ser divertido!
ResponderEliminarBesos!
Pues no sé, me la apunto con reservas, aunque tengo una hija justamente de esta edad, no se si me terminaría de convencer :)
ResponderEliminarBesos!
Estoy empezando a ver este libro por todas partes. Y lo que has contado me ha gustado. Así que no descarto su lectura.
ResponderEliminarUno de los lugares donde "paseo" el libro que estoy leyendo es en la sala de espera del médico. ¡Qué soledad! a veces es el único libro entre un montón de teléfonos móviles.
Un abrazo
Me ha encantado tu reseña así que me lo apunto :)
ResponderEliminarPues me lo apunto. Tiene buena pinta!!!
ResponderEliminarAntes sí que solía ir leyendo en el metro pero ahora tengo muy poquito trayecto (como cinco minutos), así que leo algún blog. Jajajaja. Besotes!!!
No me convence este libro, no estoy muy segura de que llegara a disfrutarlo. Y sí, yo me llevo la lectura de paseo, pero procuro no leer mientras camino porque bastante despistada soy sin libro en la mano, no quiero ni pensar qué sería de mí si encima fuera leyendo.
ResponderEliminarBesos.
Tengo Cómo ser mujer pendiente, así que no sé qué hacer, porque tengo la sensación de que son lecturas similares...
ResponderEliminarSiempre, siempre, siempre, llevo un libro conmigo, vaya donde vaya y tenga oportunidad de leerlo o no.
Un abrazo
Sólo cuando estoy de paso por una ciudad grande como Buenos Aires y los recorridos largos y anodinos me obligan a intentar usar ese tiempo perdida en lectura. Sin dudas me llevaría este libro, sin dudas lo tendré apenas caiga a mi pequeño pueblo, donde no hay tanto por recorrer ... un abrazo.
ResponderEliminarFíjate si las saco a pasear que la mayor parte del tiempo leo en el transporte público o esperándolo (es lo que tienen recorridos al trabajo de hora y media). Me ha gustado mucho tu reseña y lo que cuentas en ella. Tomo nota. Besos.
ResponderEliminarMe encantan las historias de transición entre adolescencia y madurez, así que me apunto sin duda la recomendación, tiene pinta de ser de esas novelas que me gustan.
ResponderEliminarBesooss!!
Yo solo llevo mi lectura cuando voy de vacaciones, me gusta leer en casa y también me suelo reir sola, mi marido siempre me pregunta los motivos de mis risas.Besicos
ResponderEliminarNo lo conocía; es más, la autora no me resulta familiar, pero este título me tienta, trata un tema interesante y al parecer lo hace muy bien, así que lo voy a tener en cuenta. Respecto a tu duda, me encanta leer en casa, pero llevo siempre un libro en el bolso que me acompaña a todas partes, en especial en el viaje de ida y vuelta al trabajo, como le ocurre a De Lector a Lector; qué aburrido sería todo sin ellos ;)
ResponderEliminarBesos.
Pues yo solo suelo leer libros en casa. :-)
ResponderEliminarBesos
Es la primera vez que oigo hablar del libro y me ha parecido muy interesante, ya por la sinopsis no parece el típico libro sobre la adolescencia. Me gustaría darle una oportunidad^^
ResponderEliminarSaludos.
Hola preciosa!
ResponderEliminarA mí no termina de llamarme y en cuanto a sacar a pasear la lectura, me pasa como a ti, yo tengo también mi banco en el parque que hay junto a mí casa y más de una vez me han mirado con miradas extrañas cuando me han visto reírme con alguna de mis lecturas jajajaja yo creo que pensaría que estoy un poco loca jajajaj. Feliz fin de semana. Besotes
¡Hola!
ResponderEliminarMe ha gustado muchísimo tu reseña, y el libro que recomiendas todavía más. Este lo leo segurísimo.
Nunca he leído nada parecido, pero creo que puedo disfrutar y al mismo tiempo aprender un poquito más sobre el ser humano. Eso es lo que más me gusta de leer :)
¡Un beso! :)
No suelo sacar los libros a pasear pero no puedo evitar cuando veo a alguien con un libro cotillear qué está leyendo. Acabo con cada tortículis a veces...
ResponderEliminarTenía curiosidad por leer alguna reseña de este libro que por una parte me atrae y por otra le falta un poquito para que me lance a su lectura. La dejo ahí, a la expectativa. A ver qué pasa con ella.
Besos!!
Pues apuntadísimo queda , no lo conocía y no pinta nada mal lo que cuentas
ResponderEliminarCreo que esta vez no me animo con la novela, que no me atrae lo suficiente en cuanto a trama, creo que tengo el cuerpo para otro tipo de lecturas ahora mismo :P
ResponderEliminarYo siempre prefero leer en casa, por aquello de la zona de confort supongo. Pero también leo fuera a veces. En el bus y en el tren con mi dosis de biodramina, en cualquier sala de espera, y en algún banco también han caído algunas páginas.
Un besote!
No lo conocía pero después de leer tu reseña, no puedo hacer otra cosa que querer leerlo, besotes
ResponderEliminarHola Silvia... Me parece que has tropezado alguna vez con una farola... jajaja
ResponderEliminarSi esta historia hace reír y emociona, me encantará leerla, y conocer a esta niña
Suelo leer en casa o en una terraza
Besos
Tengo la novela ya apuntada, aunque no se para cuando. Eso de reírte sola y que la gente te miré raro me ha pasado también a mi y es que en realidad no te ríes sola, estas compartiendo un rato con los personajes de una historia, aunque solo tu lo sepas.bESINOS.
ResponderEliminarPues si con la reseña ya le cogí cariño a Dolly/Johanna imagina cuando lo lea. Muchas gracias por la recomendación. Yo también soy de las que lee donde me pille el tiempo y el lugar.
ResponderEliminarAbrazos.
Me gusta lo que cuenta y como lo cuentas. Debería ser mi próxima adquisición, lo más seguro. Un abrazo
ResponderEliminarMe gusta mucho lo que cuenta y como lo cuentas. Debería ser mi próxima adquisición, seguramente así será.
ResponderEliminarApuntado :) anagrama rara vez me decepciona :P
ResponderEliminarPues yo también me he sorprendido al principio de tu reseña, después ya me hiciste interesar más.
ResponderEliminarTe diré que no leo por la calle ni voy con el móvil!Dios me libre! Ya tienes que andar vigilando que no te atropelle una bicicleta. Leo tranquila en el horario que tengo establecido para hacer todas las cosas.
Gracias por todo.
Un gran abrazo.
Sor. Cecilia
No me convence mucho asi que lo dejo pasar.
ResponderEliminarSaludos
Que buena pinta. Pues no leo fuera de casa sobre todo porque siempre con los niños y me abstraigo tanto que una vez casi la pierdo en el parque. Un peligro.
ResponderEliminarUn libro que puede hacer reír? Jo, con el argumento la verdad es que no me lo imaginaba.
ResponderEliminarNo descarto su lectura.
Yo los libros los saco de paseo sobre todo para el tren y cosas así, pero no mucho más XD
Besos!
Hola!, me gusta mucho tu reseña, además creo que el libro tiene buena pinta, me lo apunto para leer en un futuro muy pronto.
ResponderEliminarTe deseo un Finde genial ♥
Me quedo con dudas, no se si sería para mi... Yo es que prácticamente no salgo a la calle así que poco puedo pasear jajajaja
ResponderEliminarBesos
Tu reseña me ha encantado pero el libro no me llama mucho, quizás porque tengo una hija de diecisiete años y estoy un poco saturada de adolescencia. Respecto a la pregunta, siempre leo en casa o en el metro. No más.
ResponderEliminarEsta vez dejaré pasar el libro, pues aunque lo pones muy bien y lo que comentas de él es bastante interesante, hay ciertas temáticas que no son de mi interés o de mi agrado.
ResponderEliminarY, sobre tu pregunta, hago ambas cosas: algunas las saco a pasear, pero otras prefiero mantenerlas en casa.
¡Un abrazo!
No conocía este libro. Y me gusta lo que cuentas de él. No tanto como para lanzarme a por él pero sí le daré su oportunidad si me lo encuentro. Y soy de las que se lleva los libros a pasear. Nunca se sabe cuando se va a tener un ratito para disfrutar de su lectura.
ResponderEliminarBesotes!!!
Por lo que dices parece interesante. Tomo nota.
ResponderEliminarAbrazo!
Uy gracias por la reseña, me parece un buen libro . Respondiendo a tu pregunta , me gusta leer en donde puedo. Te mando un beso y te me cuidas
ResponderEliminarPues parece un lectura interesante, no me habría fijado en él de normal, lo admito =)
ResponderEliminarBesotes
¡Hola!
ResponderEliminarLa verdad es que no me importaría leer este libro. Me parece que podría disfrutar bastante de su lectura dado que tiene algo que llama poderosamente mi atención. Si me lo encuentro, lo leeré seguro.
Gracias por tu reseña. Es estupenda.
¡Nos leemos! :)
Tiene buena pinta y como a ti, me ha llamado la aatención el título. La verdad es que creo que me puede gustar. Y yo la verdad es que leo en cualquier parte, mientras no se me moleste... Pero como leer en casa no hay nada! Un beso.
ResponderEliminarReseña curiosa lo leere, usualmente leo en el autobus o en momentos de larga espera.. saludos.
ResponderEliminarMe lo apunto porque hay algo en la reseña que me llama mucho de la historia
ResponderEliminarYo suelo sacar mis lecturas a pasear pero con cuidado. Solo lo hago si estoy sentada
Mil besos^^
Buenaas! El libro pinta geniaal!
ResponderEliminarYo siempre llevo el libro que leo encima, vaya a donde vaya, pero como en casa en ningún sitio <3
El fragmento del principio me dejó boquiabierta, pero la descripción que has hecho de Johanna/Dolly me ha dado mucha ternura. Esa clase de libros de paso a la adultez, de personajes que cometen errores humanos y terribles en el camino, me encantan. Seguro voy a adorar leerlo. Me lo apunto.
ResponderEliminar¡Un beso!
Buena pregunta, Mientras leo.
ResponderEliminarA mi me gusta leer en la cama, en el silencio de la noche, abrazada a mi libro, hechizada por los personajes y su autor. Pero sobre todo por el cómo. Qué me va diciendo el autor mientras envuelve su historia.
La mayoría de las veces es lo que más me interesa. La literatura limpia y pura que deja escapar el alma.
Admiro la querencia que sientes por los libros y comprendo tu admiración y tu entusiasmo al hablar de ellos.
Y nuevamente, empezar a leerte sin estar nada convencida y terminar añadiendo a la lista, aunque no estará entre mis prioridades, basta ya :-P
ResponderEliminarParece interesante. Lo apunto.
ResponderEliminarLa verdad es que suelo leer en casa y,normalmente, por la noche .
Un beso y feliz semana.
Y yo que venía predispuesto a que no me voy con un sí porque me has arrastrado con tu lectura personal, me encanta cuando pasa.... me suena muchísimo el nombre de la autora y he visto los títulos que citas pero ahora no sé de qué exactamente, será de alguna revista . besos :)
ResponderEliminarA mí no me llama nada la atención. No lo voy a leer.
ResponderEliminar¡Hola! El otro día vi este libro por la web y me llamó muchísimo la atención así que después de leer tu reseña lo apunto sí o sí.
ResponderEliminarPues muchas veces lo hago. De hecho leo más mientras espero al transporte público y cuando estoy en él que cuando estoy en casa.
Pero la mayoría de veces que me encuentro o riendo o llorando, no sé porqué, pero me pasa cuando estoy en familia. Pero como ya me conocen no tengo que dar explicaciones.
Un beso :)
Llama la atención el párrafo que has destacado, sin duda es brutal. No me suelen gustar los libros que tratan del paso de la adolescencia a la edad adulta, no sé, no lo descarto pero no creo que lo lea.
ResponderEliminarBesos.
Conozco a la autora pero aun no me he estrenado con ninguno de sus libros, este lo tengo apuntado desde que salió, y después de leer tu reseña aun me han entrado más ganas de leerlo! Besos
ResponderEliminarCuando te presentan personajes desde su infancia, suele tener un sabor agradable la lectura. No sé si esta es una novela que podría disfrutar del todo, pero podría darle una oportunidad.
ResponderEliminarTodas mis lecturas salen de viaje, ya que leo de camino al trabajo y de regreso a casa.
Saludos.