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viernes, 28 de diciembre de 2012
Anecdotarios
Como buen día de los inocentes seguro que muchos venís de leer alguna de esas bromas que nos colocan los periodistas en las noticias. de verdad, debo de tener poco sentido del humor pero le veo poca gracia a que me cuenten que Burger King ha sacado una Whopper para zurdos, igual que la normal pero con los ingredientes girados ciento ochenta grados. De hecho, si me tengo que remontar a alguna broma divertida en los medios... seguramente acabaría una vez más en la emisión radiofónica de La guerra de los mundos, aunque me temo que eso no sería exactamente una inocentada. He visto bromas de todo tipo, graciosas, crueles, olvidables e incluso alguna que ha sentado tradición, como la de las carreras de bañeras en Estados Unidos. Sin embargo no veía ninguna que me convenciera.
Estaba claro, la tenía que idear yo. Inicialmente era fácil, os podía contar que leer perjudica la salud, porque los libros cogen polvo, pesan... y son armas mortales con esas páginas afiladas como cuchillos de teletienda. Pero no he podido, sólo de pensar en decir que no me gustan los libros empecé a sentirme mal. Así que opté por cambiar de tercio y hablar de mi relectura de Ray Bradbury y de como decidí seguir la sugerencia de su libro más famoso. Y acabé así haciendo una improvisada pira con mi biblioteca en el pasillo... ¿el primero para la quema? Los libros arden mal, por supuesto, el título lo merece. Pero me sucedía lo mismo, ya no era malestar sino una especie de vértigo el que se iba apoderando de mi cuerpo. Pareciera que todos los libros de la habitación me hablasen al unísono provocando que me pitaran los oídos. En fin, que no podía ser, me tenía que buscar otra cosa que elevase el sentido del humor para homenajear una fecha que todos conocemos por las bromas que se gastan y no por si nació o murió tal o cual persona.
Al final, y por una de esas raras asociaciones, acabé pensando el nos "Anecdotarios" tan de moda hace un par de años. Parecía que todo aquel que tuviera un trabajo estaba en el derecho, qué digo derecho, tenía el deber de compartir con todos sus peripecias. Y así nos enteramos que había médicos, enfermeras, profesores... que iban a su trabajo sabiendo que en algún momento se iban a reír. Y por ende y un módico precio, lo haríamos nosotros pasado el tiempo de rigor. Reconozco que me leí un par, tres tal vez, pero pronto entendí que la diferencia entre una anécdota y un libro que las recopila es la ausencia de ambiente. No hay amigos, ni cañas, ni codazos y eso le resta encanto. Me distrajeron, sí, pero también se me mezclaron hasta el punto de no recordar la profesión de sus protagonistas. Son libros de consumo rápido que dejan alguna sonrisa y poco poso.
Porque a ver, digo yo que todos tenemos una anécdota que contar, ¿no? Yo recuerdo una vez que se descolgó un estante en el que tengo libros, por la noche claro. Se posó encima del que estaba debajo dejando una inclinación perfecta para que fueran cayendo los libros retumbando contra el suelo. Como si fueran pasos, uno tras otro... Ni que decir tiene que no lo descubrí hasta la mañana siguiente, la noche la pasé quieta y callada. Como corresponde.
Y vosotros, ¿compartís alguna anécdota relacionada con libros?, ¿habéis comprado alguno de estos "Anecdotarios"?
Gracias
Yo creo que todo mi blog son anécdotas...con poco poso, sin codazos de compañeros....pero me lo paso bien recordándolas...y si saco alguna sonrisilla entre los pocos fieles que me leen...pues mejor
ResponderEliminar;-)
@Kikas
ResponderEliminarAh no, eso es diferente. Verás... en un blog si se interactúa, tu cuentas yo veo y comento, me dices... eso es un codazo en toda regla. Por eso no los incluí.
Y sonrisas... muchas por tu casa.
Besos
Hola, cuidado con que las bromas sean pesadas o de mal gusto.
ResponderEliminarNo conocía estos libros "Anecdotarios".
Una anécdota relacionada con libros... Te puedo contar que hace ya algunos años, cuando era tan pequeña que no sabía leer, martirizaba a mi hermana mayor si la veía con algún libro entre manos porque siempre quería que me leyera lo que estaba escrito.
El martirio de mi hermana terminó cuando aprendí a leer.
Un gran beso y cien ojos para las bromas!!
No, no he comprado ningún anecdotario.
ResponderEliminarEso si, donde trabajé unos años teníamos uno bien surtido.
Saludos.
Me encantan las anecdotas porque le dan color a la vida amiga mia UN besote (imaginarte a ti no gustándote los libros ....es imposible) otro beso
ResponderEliminarTómate algo, Silvia, lo dejé todo pagado...
ResponderEliminarSubidón de adrenalina....
;-)
ummmm, pues no. Ahora bien, alguna anécdota relacionada con un libro y encima reciente, sí. Pues en eso que entraron en el despacho y se llevaron un libro de esos antiguos (además un coñazo: tablas), el caso es que yo no entendía para qué porque eso es sólo un objeto de recuerdo y vale.
ResponderEliminarAhora bien, ese libro tenía dibus en los márgenes, sí, sí, de cuando estudiante. Pues bien, después de ver trasegar el libro arriba y abajo, para mi mosqueo y encima perplejidad, acabé sabiendo para qué lo querían. Y NO ME HIZO NINGUNA GRACIA, jajajajajaja (bueeeno, quizá un poco, va)
Un beso
¿las respuestas hilarantes de exámenes son anecdotarios? esos me encantan! :)
ResponderEliminarPues no, no he comprado ninguno. Aunque ahora que pienso..... ¡¡ si !!.
ResponderEliminarMi periódico cotidiano, es bastante tragicómico.
Un beso.
No, la verdad es que no tengo ninguna anécdota graciosa/interesante/memorable, y es raro porque leo mucho y antes me llevaba los libros al tte. público. Tampoco me interesan mucho los anecdotarios. Me gusta escuchar anécdotas pero no leerlas.
ResponderEliminarHoy he intentado gastar una broma en el trabajo pero no ha salido bien :/ jejeje
Un beso.
Me encantaría este libro! besos
ResponderEliminarSon muy divertidos los anecdotarios.
ResponderEliminardeseo pases unas felices fiestas
y que el nuevo año te llenen de felicidad.
¡feliz 2013!
un abrazo.
La verdad es que los anecdotarios los dejo para la mesa con amigos, donde siempre se repite lo mismo. Mejor no invierto en ese tipo de libros.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo si he leido algun libro como Anecdotas de emfermeras que más que risas me sacó los colores.Pero si me gustan los libros que hablan de curiosidades sobre todo las relacionadas con la literatura.
ResponderEliminarSería bueno leer un libro de anécdotas, pero pienso que me cansaría...lo de tú aventura con la estantería me ha gustado, jajajaja.
ResponderEliminarBueno, a mí también me ha pasado algo parecido a lo tuyo, cosas que se caen a media noche, pero que no le haces caso hasta el día siguiente...
Un abrazo
Uffff mira si soy despistada que ni siquiera me acordaba que hoy era el dia de los inocentes, y es que para bien o para mal siempre he sido bastante inocente, más bien para mal creo yo, ya que te tienes que ir esforzando aunque sea inconscientemente para que no te tomen el pelo, algo que la gente con más malicia o picardia le sale innato y no le supone dicho sobre esfuerzo jejejej. Pero no es que me esté tirando flores eh? es solo un dato que aporto ya te digo que más se debería considerar defecto. Madre mía como me he enrollao jejej. Besos
ResponderEliminarUffff mira si soy despistada que ni siquiera me acordaba que hoy era el dia de los inocentes, y es que para bien o para mal siempre he sido bastante inocente, más bien para mal creo yo, ya que te tienes que ir esforzando aunque sea inconscientemente para que no te tomen el pelo, algo que la gente con más malicia o picardia le sale innato y no le supone dicho sobre esfuerzo jejejej. Pero no es que me esté tirando flores eh? es solo un dato que aporto ya te digo que más se debería considerar defecto. Madre mía como me he enrollao jejej. Besos
ResponderEliminarYo creo que el único genero literario que no me interesa es el de las anecdotas, chistes, o desvarios varios... quizá me gusten los contenidos más intensos que me aporten algo más que unas risas por desgracias ajenas... Soy rara lo reconozco! Tampoco me gusta hacer bromas en los santos inocentes, ni nada de nada. Ah habla la sosa de la blogosfera! jajajajaja
ResponderEliminarMe encantó leer tu entrada!
Aprovecho para felicitarte las fiestas y desearte una buena entrada de año, que este mes en mi trabajo es de lokos y pasarme a comentar por los blogs me está resultando complicadisimo, así que feliz año guapa! muacckkk
No he leído ni comprado ninguno de estos tipos de libros. No em parecen demasiado interesantes, no sé.
ResponderEliminarRecuerdo aquellos profesores, que todos tuvimos, que tenían intención de escribir un libro con las burradas que se decían en o examenes. No sé si alguno lo ha hecho o no... pero creo que hay lecturas mejores.
Saludos.
Buenas!! pues para ser sincera es la 1º vez que veo este tipo de libros >.< pero deben de ser bastante graciosos y entretenidos!
ResponderEliminarUn beso y felices fiestas =)
Hace tiempo me hice con un Libro de Tip y Coll que era basado en anecdotarios y cosas populares y otro de Vizcaíno Casas que se trataba de los 7 pecados capitales de los españoles.
ResponderEliminarUn abrazo.
¡¡¡Felices Fiestas y Próspero Año 2013, en compañía de tus Familiares y Amigos.
Un abrazo.
Yo tampoco conocía los "anecdotarios" aunque está bien saber que existen.
ResponderEliminarUn abrazo y felices fiestas
Pues yo no lo conocía, pero la verdad tampoco es el tipo de lectura con la que disfruto. No terminan de convencerme aunque cogeré alguno por probar.
ResponderEliminarSobre las anécdotas... puf, no sabría decirte. Pero sí que he tenido problemas con las estanterías de vez en cuando jajaja. Es más, tengo una sobre el marco de la puerta, y cada vez que paso por debajo la miro con recelo.
Besos
No he leído nunca un anecdotario, pero también creo que acabaría cansándome tras las primeras páginas. Las prefiero en un ambiente de camaradería e intercambio donde se mezclen las de unos y otros, aunque ahora mismo no se me ocurre ninguna en torno a los libros. Si se me ocurre alguna interesante, vuelvo para compartirla.
ResponderEliminarBesos
P.D. Por cierto no me gustan mucho las "inocentadas"
No, nunca he comprado uno de esos anecdotarios, pero tengo algo que contar...Conservo mi amistad con mis compañeros de colegio de la infancia, hemos creado un grupo de lectura: entre todos decidimos un libro, lo leeemos y quedamos para tomar café y comentarlo. La última elección fue Moby Dick. No tenía lector todavía, asi que fui a una libreria de segunda mano....Y allí que me lo llevé por 4 €, con ilustraciones y todo. Pensé que en un finde semana lo acababa...
ResponderEliminarOtro amigo del grupo comentó que se había comprado la edición de bolsillo, que casi rondaba las 1.000 páginas, lo cual no me cuadraba, porque el mío era pequeñito y con ilustraciones...Lo comprobé y ví que había comprado una edición juvenil :-P
Un beso!!
Ni siquiera sabía lo que era exactamente uno de estos anecdotarios, pero creo que me gustaría ir por alguno.
ResponderEliminarBesos.
ahora estoy pensando que... si esos anecdot;arios no tenemos ya necesidad de comprarlos... los leemos en blogs¡¡¡¡
ResponderEliminarjaja
... tengo varias relacionadas con libros me he vuelto muy quisquillosa pero las mejores son cusndo te tienesque llevar montones para mudarte y no sabes por donde empezar
cuando alguien te lo pide prestado y se le olvida con tal desfacjatez que es tuyo cuando a veces te lo presume...
mi *arbol* de navidad
es de libros.
y seguro te enojar;as conmigo
besos
Tampoco he leído anecdotarios, no me terminan de llamar y mira que el humor me gusta encontrarlo en los libros también pero no es de los que más me llama.
ResponderEliminarAnécdotas con libros no recuerdo ninguna (además de la del dinero que te conté una vez) , lo típico que te regalen el mismo libro hasta por tres veces (como ves, yo dejo claras mis preferencias, jejejeje). Besos
Pues yo no soy muy aficionada a este tipo de libros y no he leído ninguno y respecto a anecdotas con libros pues la verdad es que tampoco recuerdo ninguna
ResponderEliminarbesos
Sera muy divertido leer uno de esos anecdotarios ;)
ResponderEliminarbesotes!
No recuerdo haber leído un anecdoario pero me quedo con tu referencia a Bradbury y la distopía, para mi gusto, más sentimental, por el tono que lleva en general, por la historia de amor y por la del hombre a los libros, me encantó y haré como tú... lo releeré. Un beso :)
ResponderEliminarA mi no me gustan las bromas, ni las inocentadas, ni las novatadas. Si son bromas fresquitas y simpáticas, algún juego de palabras, entonces si. Y del libro, la verdad no lo conocía. Una anécdota pues si mira ahí va. Hubo una temporada que empecé a leer todos los libros de Rosemunde Pilcher, y en una contraportada vi que me faltaba uno editado solo en Argentina. Así que cuando mi amiga Adriana viajó a visitar a su madre se lo encargué corriendo. Ella me lo trajo con todo el cariño del mundo. Yo emocionada empiezo a leer, y voy pasando páginas y al poco reacciono. Pués si es Los buscadores de conchas!!!!!! Claro en Argentina no se puede vender un libro con ese título!!!!!! Uffff
ResponderEliminarvaya anécdota jejejejejjeej
Un abrazo.
No me gustan las bromas pesadas, ni las inocentadas, ni las novatadas. Las pequeñas bromas o juegos de palabras graciosos, eso es otra cosa. Y una anécdota, pues si, hubo una temporada que no paraba de leer todos los libros de Rosemunde Pilcher. Un día vi que me faltaba uno y que solo se editaba en Argentina. Así que cuando mi amiga Adriana fue allí para visitar a su madre se lo encargué. Ella me lo trajo con toda la ilusión del mundo. Me pongo a leerlo emocionada y a las seis o siete páginas me doy cuenta que ya me sonaba.Claro, era Los buscadores de conchas, que por supuesto con este título era impensable que lo publicaran en Argentina jajajajajajaj
ResponderEliminarUn beso Silvia,
tienes razon en lo que has escrito amiga . me intereso mucho en lo que escribiste.saludos amiga
ResponderEliminarMe quedo con las anécdotas contadas alrededor de una mesa, con sus risas, sus codazos y todo lo que ello conlleva, es mas, aunque en ella se incluya el típico cuenta fábulas de rigor al que en esta vida le ha pasado de todo.
ResponderEliminarUn fortísimo abrazo y ¡FELIZ AÑO NUEVO!
Tampoco me gustan las bromas ni las inocentadas Silvia. Otra cosa son bromas simpáticas o algún juego de palabras. Una anécdota, pues mira, tuve una temporada muy aficionada a leer todos los libros de Rosemunde Pilcher, y vi que me faltaba uno que solo se editaba en Argentina. Así que cuando mi amiga Adriana fue a visitar a su madre se lo encargué. Ella me lo trajo muy amablemente y cuando me puse a leerlo emocionada a las seis o siete paginas me doy cuenta de que ya lo había leído era Los buscadores de conchas, pero claro, con otro título. En Argentina no hubiera estado bien visto editar un libro con este título.
ResponderEliminarUn abrazo.
NO CONOZCO LOS ANECDOTARIOS, NO SÉ SI ME GUSTARÍA LEER ALGUNO, NO SÉ QUIZÁ ME ABURRIRÍA UN POCO... NO TENGO MUCHO SENTIDO DEL HUMOR O ME CANSA LO QUE NO ME APORTA MUCHO.
ResponderEliminarCUIDADO CON LAS BROMAS, NO ME GUSTAN MUCHO. NO SOY TAN AMARGA PERO BUENO... JIJII.
BESITOS
FELIZ AÑO QUERIDA AMIGA.
jaja ¿Quieta y callada de miedo? Pues a mi no se me ocurren anécdotas ahora mismo, me has pillado desprevenida... Y tampoco he leído anecdotarios, aunque alguna vez me he planteado hacerlo, pero no terminan de convencerme las historias que no son historias. Besos!
ResponderEliminarTe diré que mi anécdota comienza con una excursión a un pueblo cercano con mi marido y una hija, al llegar nos encontramos conque en la plaza había bastantes puestos de libros y nos pusimos a mirar y de pronto veo un título que me hizo mucha gracia: "Cómo c...r en el campo" lo que ocurrió después mejor lo dejo para mi sección de anécdotas de mi blog :-))Besotes navideños
ResponderEliminarPor cierto vaya sueño más profundo que tienes....mira que no enterarte del desastre del estante y la caída de libros.
Hubiera estaro gracioso que soltaras alguna de esas, aunque siempre habría habido alguien que se lo creyera y hubiera cundido el pánico jajaja Yo no soy muy aficionada a las inocentadas, sobre todo las pesadas, pero si es algo evidente o se revela pronto que es broma... Quién no se ríe por lo menos un poquito :)
ResponderEliminarUn besito
No he leído ningún libro de este tipo pero seguro que, pensándolo, se me ocurriría alguna anécdota relacionada con los libros. Ahora no caigo en ninguna pero me ha encantado la tuya con los libros y la estantería.
ResponderEliminarAbrazo!!
Anécdotas como para reír o que sean fuera de lo común... no la verdad es que no =)
ResponderEliminarBesotes
No me gustan mucho este tipo de libros. A veces les he echado un vistazo en la biblio cuando he tropezado con ellos, pero me aburro con las primeras páginas.
ResponderEliminarBesotes!!!
No he leído ninguno, pero le tengo ganas al de la señorita Puri. En comercio hay anecdotas de sobra y tanto da que vendas tornillos que perfumes, suelen coincidir aunque como dices igual pierde gracia al ser leidas de esta forma.
ResponderEliminarDe las inocentadas paso, hay que valer para que no resulten molestas ni ridículas. Solo hice una una vez a dos amigas que intentaron gastarmela a mi. Eso si, me salio redonda jeje
Sobre anecdotas literarias... mas bien tengo el recuerdo de un mal trago. Fui a junto de mi librero a por un conjunto de actividades para niños: La conejita juguetona... con la libreria hasta los topes y yo rezando porque supiera de que le hablaba y no me mandara a la tienda erótica mas proxina.
Besos, genial la entrada.
Yo tengo una anécdota con libros pero es horrible, pesadilla!
ResponderEliminarCon una creciente del río, mi casa se inundó, un metro sesenta de agua dentro...cuando bajó el agua, tuve que tirar gran parte de mi biblioteca y sacaba los libros en carretilla afuera!
Nunca me he comprado uno de esos libros, lo que más cerca he estado de leer anécdotas es la sección que tienen para ellas en las Selecciones del Reader's Digest y la verdad es que muy graciosas no son. La tuya me ha parecido genial jajaja me muero de susto!!!! Ten por seguro que yo también me hubiese quedado bien quieta y callada hasta el otro día!!! Que tengas un excelente Año Nuevo. Mis mejores deseos para ti!!!!
ResponderEliminarA mi tampoco me hace mucha gracia todo lo que se monta alrededor del día de los Inocentes; la mayoría de bromas que me encuentro de internet no tienen mucha gracia. No he leído ninguno de esos Anecdotarios que mencionas, pero recuerdo la época en la que poblaban las estanterías de las librerías... 1beso!
ResponderEliminar¿Carreras de bañeras en EEUU?¡es la primera vez que oigo algo así! Jajaja
ResponderEliminarTe iba a decir que nunca había leído un libro de acécdotas, pero no, de pronto he caído, me gustaba leer las de Vizcaïno Casas y me gustaban mucho, di ertín como dices.
puede ser muy interesante
ResponderEliminarhttp://losviajesysibaritismosdeauroraboreal.blogspot.com.es/
Sería Anecdotarios algunos libros sobre respuestas curiosas en los examenes? Tengo alguno que otro de esos y son muy divertidos si dejas de lado la tristeza que provocan algunas preguntas por las burradas que contestan.
ResponderEliminarY no sé si será una anécdota pero todavía me recuerdan que casi asesino a la persona que utilizó un libro para que no cojeara una mesa y como lo rescaté de debajo de la pata sin preocuparme todo lo que había encima de la mesa y que por supuesto volcó.
Besitos