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martes, 22 de mayo de 2018
El último samurái. Helen DeWitt
"El padre de mi padre era pastor metodista".
Vista la sinopsis tengo que reconocer que me sentí atraída por este libro desde el primer momento. Hoy traigo a mi estantería virtual, El último samurái.
Conocemos a Sibylla, una mujer con una inteligencia extraordinaria, un trabajo precario y una vida un tanto disfuncional. Acude a una fiesta y conoce a un escritor famoso, no solo lo conoce, además tienen sexo y, el resultado de este sexo, es un niño llamado Ludo. Ludo posee una inteligencia extraordinaria y con 5 años es capaz de leer y manejarse en otros idiomas, siempre alentado por su madre, que cree poder aportar al niño mucho más que el sistema educativo, fomentando su curiosidad y su necesidad de saber. Sin embargo, hay un tema en el que la madre se muestra inflexible, Ludo carece de una figura paterna, ni siquiera conoce el nombre de su padre. En lugar de eso, intenta sustituir esta laguna poniéndole la película Los siete samuráis consiguiendo que marque el desarrollo de su hijo, un niño que, tarde o temprano, comienza la búsqueda de su padre..
El último samurái fue publicada allá por el año 2001 bajo el título El séptimo samurái, ahora una editorial ha decidido darle vida de nuevo a esta novela. Una novela que la autora abandonó tras diecisiete meses de escritura y con una oferta sobre la mesa y que luego retomó, escribiéndola bajo el título El séptimo samurái pese a que cambió el título por el actual antes de que la novela viera la luz. Está claro que todo esto no es particularmente relevante para el libro, pero siempre me ha gustado conocer un poco la otra historia de las novelas, esa que no vemos en sus páginas.
Estamos ante una novela de las llamadas Bildunsroman en la que somos testigos del crecimiento y desarrollo de un niño superdotado. La novela, que comienza mirando atrás en el tiempo y la familia de Sibylla, nos va dejando ver esa suerte de angustia que tiene una madre que descubre que la inteligencia de su hijo va más allá de lo normal, incluso de lo excepcional, y la responsabilidad que eso la echa sobre los hombros. La necesidad de proporcionar a ese niño las herramientas suficientes para que su desarrollo sea el adecuado y también cómo deja de lado el tema de la paternidad. Y sin embargo, el niño y su voraz necesidad de saber, van creciendo a lo largo de una novela que comienza con el foco centrado en la madre y que poco a poco va desplazando el centro de atención hasta que Ludo es el protagonista total y absoluto. Apenas nos damos cuenta del momento en el que el niño que aparece interrumpiendo a su madre se va adueñando de la historia, pero lo hace. Su desarrollo personal trasciende así al papel y nos involucra en su búsqueda de una figura paterna. Y si esto ya hubiera convertido a la novela en algo diferente, hay que añadir que somos testigos del avance del niño a través de sus logros, de la comprensión de idiomas, lecturas y de la siempre presente película de Kurosawa. DeWitt integra todo ello en la novela y además consigue que la lectura sea ágil y no se vea anclada en un mundo de referencias y traducciones que frenen la trama. Y eso en un libro que se llena de citas, idiomas, cambios de tipografía y de forma que, no solo aceptamos, sino comprendemos como necesarios para formarnos una opinión completa del mundo en el que vive y se desarrolla el personaje principal.
Ludo, ese niño que, inspirado por la película, emprende con 11 años la búsqueda de su padre a través de siete padres potenciales. Hombres a los que se acerca y que resultan ser atractivos, peculiares o excéntricos pero que siempre están dotados de la fuerza suficiente en el conjunto del relato como para que sus historias vayan dejando alguna impronta en el niño. Y también una pequeña enseñanza sobre la paternidad o lo que debe de serlo.
En El último samurái Helen DeWitt ha construido una novela excepcional. Y no es azar que haya utilizado la palabra construido ya que trasciende el argumento a las formas de este libro consiguiendo de este modo un "todo" que lo convierte en una novela redonda. No dejéis de leer a Helen DeWitt.
Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
Gracias.
No conocía el libro, pero pinta muy bien :)
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarEl libro pinta muy interesante: no he leído muchos que compartan la premisa del niño superdotado y la búsqueda del padre, y me gusta cómo dices que se desarrolla, así que me lo voy a apuntar.
¡Gracias por la reseña!
Pues me intriga y me place lo que nos cuentas, y además no he leído nada de Helen DeWitt, así que me llevo esta novela. Te dejo recomendada la que estoy leyendo ahora mismo: "La torre", de Daniel O'Malley (Nocturna ediciones), si te gusta Jasper Fforde y las lunáticas y frikis aventuras de su Thursday Next. Besos.
ResponderEliminarNo he visto los samurais de Kurosawa pero que se la ponga al niño para que entienda que no tiene padre, pues no sé. La verdad es que creo que es una de esas novelas que exigen toda tu materia gris a rendimiento completo y no es mi situación actual así que creo que sería incapaz de enterarme bien con esta novela.
ResponderEliminarBesos
Pues ni idea de este libro. Qué interesante! Me ha atraído mucho también su argumento. Y conocer esos detalles de la construcción de la novela. Me la llevo bien apuntada.
ResponderEliminarBesotes!!
No sé si me llama demasiado. De momento, voy a dejarlo pasar. Un besote!!!
ResponderEliminarPues es una novela curiosa e interesante, me llama especialmente la atención cómo se trata el tema de la superdotación. Me la llevo ;)
ResponderEliminarBesitos
Muy buena reseña aunque no me lo apunto ya que no puedo con tanto libro pues tendría que dejar de hacer otras actividades que me llenan mucho.Besicos
ResponderEliminarHola! No lo veo un libro para mí pero sé que a mi padre puede llegar a gustarle así que se lo regalaré.
ResponderEliminarEmpiezo la semana terminando una razón para vivir y La ciudad de la lluvia.
Besos!
No me llama así que dudo que lo lea, pero me alegra que te haya gustado tanto tanto :D
ResponderEliminarYo voy a empezar Cazados =)
Besitos ^^
Yo la conseguí de segunda mano hace tres años (no esperaba que la reeditaran).
ResponderEliminarEs una novela extraña y fascinante (en Estados Unidos es una novela de culto). Recuerdo un artículo en que la definía como knowlege porn y es verdad que es increible la cantidad de conceptos e intereses que maneja la autora, como esas lecciones de japonés.
Me alegro mucho de que la hayan reeditado, esta vez con su título original (anteriormente la habían titulado El séptimo samurái)
Pues no lo conocía, asociaba el título a una película y en todo caso a una historia poco apetecible, nada que ver con lo que nos cuentas que ha hecho que me apunte el título. Besos.
ResponderEliminarSe ve interesante, tal vez lo lea. Te mando un beso
ResponderEliminarNo me había parado ante él en la librería, la verdad, de hecho no me he fijado hasta que no he visto tu reseña. Me atrae lo que cuentas, igual me animo
ResponderEliminarBesos
Pues no conocía este título y me intriga muchísimo tras leer tus impresiones, así que me lo voy a llevar.
ResponderEliminarUn besito
Uhh qué super pintaza, ¿no?
ResponderEliminarMe parece genial la historia, un superdotado.. seguro que tiene unas reflexiones brutales.
Anoto.
Besos.
La hice mia en cuanto la enseñaste y leí la sinopsis. Tengo muchas ganas de entrar en el mundo de Ludo, y explorar en esa búsqueda con el .
ResponderEliminarBesos
Oye pues pinta fenomenal!
ResponderEliminarMe lo apunto, no lo conocía.
Besotes
Un libro que no aconsejaré a nadie, me sobran el 80 % de las palabras.
ResponderEliminarUn libro que no conseguiré a nadie, me sobran el 80% de las palabras.
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