Llevo muchos años leyendo a Carrère. viviendo su ficción, su autoficción, sus desnudos literarios... y sigo volviendo a él. Hoy traigo a mi estantería virtual, "Una novela rusa".
En esta novela Carrère explora la historia prohibida de su abuelo materno. Un hombre de origen ruso al que no llego a conocer, pero del que sabe que su pobreza fue tal, que abandonó a su familia con unos amigos porque él no podía mantenerlos. Sabe que pasó por París y Burdeos y que fue arrestado casi con seguridad debido a su ideología. Y también que en 1944, desaparece pasando a formar parte de los que están muertos sin estarlo o tal vez de los que ya lo estaban y quedan pendientes de certificar. Aún así, su familia queda marcada por la ausencia de este hombre del que no se habla y Emmanuel, decide investigar. Así es como en Kotelnicht aparece la duda: si allí hay un hombre vivo, superviviente de guerra, que estuvo prisionero, ¿quién puede decir que su abuelo no lo está? Va y viene al pueblo ruso y allí bebe y se junta con no siempre buenas compañías. Y luego está Sophie, el presente, la chica de la que se enamora, tan distinta, tan hermosa... A ella es a quien escribe una declaración de amor, un relato decididamente dirigido a ella. Sabe que Sophie coge el tren, la imagina en él, leyendo... Y su relato es publicado, muchos de sus lectores aún lo recuerdan. Pero ella no lo llega a leer, no sube al tren, la historia cambia.
En esta novela Carrére vuelve a su tema favorito: él. A lo largo de la novela veremos como se traslada a Kotelnicht, un pueblo perdido en el que el autor bebe mucho e intenta grabar una suerte de documental. Bien, la realidad dice que Carrère viaja a Rusia durante algo menos de una semana para reunirse con un agente del FSB y dejar preparada una actuación de su pareja. Tras ese viaje regresa el Carère documentalista y ocurre una parte de la catástrofe que muchos ya conocéis y a otros no os descubro porque el autor tiende a contarse a sí mismo. Es la época de Una novela rusa. Pero habrá otra visita y ciertamente habrá incluso un documental, Return to Kotelnicht, que resulta un complemento perfecto de este libro, o tal vez sea justo lo contrario y es el libro quien complementa al documental. En cualquier caso, hay toda una historia ahí metida.
Una novela rusa es la vida del autor centrada en tres historias principalmente. El viaje y el lugar, lo que allí descubre y su relación con su pareja, en esta novela, Sophie. Historias que se superponen y que dejan ver a un hombre que quiere escapar de lo que vive, que busca en su pasado una historia prohibida y que pretende convertir su historia de amor en literatura.... y fracasa estrepitósamente o tal vez logra el mayor de los éxitos si nos atenemos a la definición formal de lo que suele ser un éxito en este tipo de historias. Todo parece torcerse, algo a lo que estamos acostumbrados en este autor, para tornarse un tanto oscuro y denso mientras que el lector, que ya ha decidido cuál es la historia que le ha atrapado de las que relata, se dirige al final incierto en el que, por una vez, Carrère deja buen sabor.
Y es que Carrère es un escritor con el que uno contacta o no, pero que no admite medias tintas ni medios vuelos. Desde la extraordinaria Limonov hasta su última sesión de terapia escrita titulada Yoga, es un autor que se desnuda poco a poco, que se convierte en el tema, personaje y leit motiv de sus propias historias. Por eso en esta reseña he mezclado ficción con la realidad que existió más allá de la novela: por eso hablo del artículo publicado en el periódico, por eso explico más el fuera que el dentro... Porque es importante contextualizar las historias que uno lee para saber lo que tiene delante, para completar el puzzle. Para disfrutarlo todo.
Una novela rusa no es la mejor de las obras del autor, pero es un buen punto de partida para adentrarse en él.
Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
Gracias.
Hola, Mientras Leo :-)
ResponderEliminarNo he leído al autor, pero tiene otras novelas que me tientan más. Yo estoy con "Los viajes de Tuf" :-)
Un beso, y feliz semana lectora.
Pues no he leido nada del autor y si, pese a no ser lo mejor del autor, lo consideras un buen inicio, tomo buena nota de esta novela.
ResponderEliminarBesotes!!!
Suena muy interesante como para dar el primer paso con él.
ResponderEliminarGracias por compartirlo.Abrazobuho 😀
Esta no la conocía. ME gusta Carrère, y aunque no sea la mejor de sus obras sí me gustaría leerla.
ResponderEliminarBEsos.