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miércoles, 31 de agosto de 2011
Las listas de libros.
Es tiempo de listas. Ahora tocan los más vendidos este verano, de los que nos iremos recuperando poco a poco mientras van saliendo las listas de novedades para el otoño y, según las veamos, nos prepararemos para los regalos de fin de año. Es inevitable, pero vivimos así. Y, si no miramos las ventas, hacemos caso del cannon de turno, o de los diez o veinte o cien mejores libros de todos los tiempos, siglo, mes o año. Sólo hay que poner en google algo similar a "Los mejores .." y pareciera que el buscador se vuelve loco encontrando resultados. Vamos, que ya les gustaría a muchos actores o actrices tener tantos resultados si pusieran su nombre en el famoso buscador.
Lo que yo me pregunto es lo que realmente ponemos cuando nos preguntan por los mejores 5 libros de nuestra vida, o lo que nos han cambiado la vida o como queráis llamarlo. Porque, seamos sinceros, todos pasamos demasiado tiempo pensando en los libros que vamos a puntuar, no sea que se nos escape un best-seller que nos haga quedar mal, y no se nos olvide poner El Quijote que, leído o no, siempre sale. Y, tan pendientes estamos de todos esos libros y de hacer memoria sobre los que vimos anteriormente en otra lista similar, que se nos olvidan los libros que realmente nos gustaron y nos iniciaron a la lectura. Que son, casi con seguridad, los que nadie dice. Porque residen Los cinco y las novelas de Julio Verne en ese terreno de nuestra mente. Fueron ellos, entre otros muchos, los encargados de divertirnos y abrirnos los ojos a un mundo nuevo lleno de personajes por el cual fuimos avanzando poco a poco hasta llegar a Murakami, pasando o no por Cervantes. Y la novela fantástica, que tampoco reconocemos, salvo los cuatro títulos que todos sabemos, que leemos y disfrutamos. Y tantos otros que nos dejamos en el olvido ya sea de forma consciente o inconsciente.
Sin embargo, y por si sirve de consuelo, no somos los únicos.Cuando le plantean este mismo dilema a escritores, se complica más la cosa. Tienden a ser aún más sesudos y a intentar meter obras completas o recopilatorios de este u otro autor. Y, en muchos casos, pensando en las obras que habrán puesto los demás. Al final sacan sus listas y vemos que no difieren tanto de las que podemos exponer los lectores. Y, después de pensar sobre esto, me pregunto una cosa... ¿Estas navidades volveremos a comprar el éxito del otoño?
Gracias
Mundo de tinta. Cornelia Funke
Empezaré como su autora, con una cita de otro libro:
"Para aquel que roba, o pide prestado un libro y a su dueño no lo devuelve, que se le mude en sierpe en la mano y lo desgarre. Que quede paralizado y condenados todos sus miembros. Que desfallezca de dolor, suplicando a gritos misericordia, y que nada alivie sus sufrimientos hasta que perezca. Que los gusanos de los libros le roan las entrañas como lo hace el remordimiento que nunca cesa. Y cuando, finalmente, descienda al castigo eterno, que las llamas del infierno lo consuman para siempre.."
Inscripción en la biblioteca del monasterio de San Pedro en Barcelona, (citada por Aberto Manguel)
"Aquella noche llovía. Era una lluvia fina, murmuradora. Incluso años y años después, a Meggie le bastaba cerrar los ojos para oír sus dedos diminutos tamborileando contra el cristal. En algún lugar de la oscuridad ladraba un perro y Meggie no podía conciliar el sueño, por más vueltas que diera en la cama.
Guardaba debajo de la almohada el libro que había estado leyendo. La tapa presionaba su oreja, como si quisiera volver a atraparla entre las páginas impresas.
–Vaya, seguro que es comodísimo tener una cosa tan angulosa y dura debajo de la cabeza –le dijo su padre la primera vez que descubrió un libro debajo de su almohada–. Admítelo, por las noches te susurra su historia al oído.
–A veces –contestó Meggie–. Pero sólo funciona con los niños pequeños –como premio Mo le pellizcó la nariz.
Mo. Meggie siempre había llamado así a su padre.
Aquella noche –en la que tantas cosas comenzaron y cambiaron para siempre– Meggie guardaba debajo de la almohada uno de sus libros predilectos, y cuando la lluvia le impidió dormir, se incorporó, se despabiló frotándose los ojos y sacó el libro de debajo de la almohada."
Hoy os acerco Mundo de tinta.
A través de Corazón de tinta, Sangre de tinta y Muerte de tinta, Cornelia Funke nos descubrirá quienes son Mo, Dedo Polvoriento, Meggie, Eleanor y Lengua de Brujo, además de Capricornio, Orfeo y la Sombra entre otros.
Cuenta la historia de una niña, Meggie, que descubre que su padre, un encuadernador, guarda un secreto y es que, cuando lee un libro en voz alta, un personaje del libro sale al mundo intercambiándose con uno del mundo real. Suena muy romántico y divertido pensar que puede leer Peter Pan y traerse a Campanilla cambiada por una simple mosca que pasas por allí. Pero, ¿qué pasa si en una de esas lecturas la que entra en el libro es la madre de Meggie? ¿Y si para intentar salvarla van saliendo más personajes del libro que, además, son los villanos?
Llega un momento en el que hay que salvar a la madre de Meggie, o salvar al mundo de los villanos salidos del libro, y, sobre todo, llega un momento en que lo que hay que hacer es encontrar el libro del que todos entraron y salieron en algún momento. Y además de eso, alguien tiene que leer, con el riesgo que eso supone. Y más ahora que ya sabemos que el padre de Meggie no es el único que posee ese valioso don.
Es una trilogía de libros bastante predecible, con personajes que no nos dejan dudas, los buenos son muy buenos y los malos muy malos. La historia nos lleva a través de una lucha entre el bien y el mal y no busca sorprendernos en su desarrollo, ya lo hace bastante en su concepción, desde el primer libro en que vamos conociendo a los personajes, pasando por el segundo y la búsqueda del autor para encontrar un volumen del libro en que puede estar la madre de Meggie y terminando en un libro que se encargará de cerrar perfectamente esta historia plagada de tributos a la imaginación de cualquier lector.
Cornelia Funke no presume de ser una gran escritora pero si que puede hacerlo de tener una prosa ágil que nos permite deslizarnos por las páginas de estos tres libros sin esfuerzo alguno. La acción que vamos siguiendo no decae en casi ningún momento y su originalidad hace que vayamos buscando el siguiente volumen hasta terminar la historia. Poco a poco vamos encariñándonos con los habituales, buenos o malos, y tenemos curiosidad por saber cómo va a salir de el lío en el que lo ha metido la autora. Pero tranquilos, Funke siempre encuentra la forma de calmar nuestra curiosidad. Incluso, diría yo, de excitar nuestra imaginación, al menos si os pasa como mí que ya tengo una edad en la cual la imaginación empieza a ser un bien escaso, a través de visitas por parajes plagados de voces graves que nos trasladan a bosques o graneros llenos de misterios.
Nos permitimos, pues, volver a ratos a la infancia en que leímos una Historia interminable en la que los personajes estaban vivos para meternos de lleno en el que los personajes hablan con lectores y los grajos solo traen malos augurio.
Si tuviera que quedarme con algo es con los fragmentos que dan pie a cada capítulo y las contínuas referencias a títulos que hoy son clásicos. Me quedé con la impresión de estar ante una autora que adora los libros. O tal vez fue fruto de mi imaginación.
Gracias
PD. De la película mejor ni hablamos.
"Para aquel que roba, o pide prestado un libro y a su dueño no lo devuelve, que se le mude en sierpe en la mano y lo desgarre. Que quede paralizado y condenados todos sus miembros. Que desfallezca de dolor, suplicando a gritos misericordia, y que nada alivie sus sufrimientos hasta que perezca. Que los gusanos de los libros le roan las entrañas como lo hace el remordimiento que nunca cesa. Y cuando, finalmente, descienda al castigo eterno, que las llamas del infierno lo consuman para siempre.."
Inscripción en la biblioteca del monasterio de San Pedro en Barcelona, (citada por Aberto Manguel)
"Aquella noche llovía. Era una lluvia fina, murmuradora. Incluso años y años después, a Meggie le bastaba cerrar los ojos para oír sus dedos diminutos tamborileando contra el cristal. En algún lugar de la oscuridad ladraba un perro y Meggie no podía conciliar el sueño, por más vueltas que diera en la cama.
Guardaba debajo de la almohada el libro que había estado leyendo. La tapa presionaba su oreja, como si quisiera volver a atraparla entre las páginas impresas.
–Vaya, seguro que es comodísimo tener una cosa tan angulosa y dura debajo de la cabeza –le dijo su padre la primera vez que descubrió un libro debajo de su almohada–. Admítelo, por las noches te susurra su historia al oído.
–A veces –contestó Meggie–. Pero sólo funciona con los niños pequeños –como premio Mo le pellizcó la nariz.
Mo. Meggie siempre había llamado así a su padre.
Aquella noche –en la que tantas cosas comenzaron y cambiaron para siempre– Meggie guardaba debajo de la almohada uno de sus libros predilectos, y cuando la lluvia le impidió dormir, se incorporó, se despabiló frotándose los ojos y sacó el libro de debajo de la almohada."
Hoy os acerco Mundo de tinta.
A través de Corazón de tinta, Sangre de tinta y Muerte de tinta, Cornelia Funke nos descubrirá quienes son Mo, Dedo Polvoriento, Meggie, Eleanor y Lengua de Brujo, además de Capricornio, Orfeo y la Sombra entre otros.
Cuenta la historia de una niña, Meggie, que descubre que su padre, un encuadernador, guarda un secreto y es que, cuando lee un libro en voz alta, un personaje del libro sale al mundo intercambiándose con uno del mundo real. Suena muy romántico y divertido pensar que puede leer Peter Pan y traerse a Campanilla cambiada por una simple mosca que pasas por allí. Pero, ¿qué pasa si en una de esas lecturas la que entra en el libro es la madre de Meggie? ¿Y si para intentar salvarla van saliendo más personajes del libro que, además, son los villanos?
Llega un momento en el que hay que salvar a la madre de Meggie, o salvar al mundo de los villanos salidos del libro, y, sobre todo, llega un momento en que lo que hay que hacer es encontrar el libro del que todos entraron y salieron en algún momento. Y además de eso, alguien tiene que leer, con el riesgo que eso supone. Y más ahora que ya sabemos que el padre de Meggie no es el único que posee ese valioso don.
Es una trilogía de libros bastante predecible, con personajes que no nos dejan dudas, los buenos son muy buenos y los malos muy malos. La historia nos lleva a través de una lucha entre el bien y el mal y no busca sorprendernos en su desarrollo, ya lo hace bastante en su concepción, desde el primer libro en que vamos conociendo a los personajes, pasando por el segundo y la búsqueda del autor para encontrar un volumen del libro en que puede estar la madre de Meggie y terminando en un libro que se encargará de cerrar perfectamente esta historia plagada de tributos a la imaginación de cualquier lector.
Cornelia Funke no presume de ser una gran escritora pero si que puede hacerlo de tener una prosa ágil que nos permite deslizarnos por las páginas de estos tres libros sin esfuerzo alguno. La acción que vamos siguiendo no decae en casi ningún momento y su originalidad hace que vayamos buscando el siguiente volumen hasta terminar la historia. Poco a poco vamos encariñándonos con los habituales, buenos o malos, y tenemos curiosidad por saber cómo va a salir de el lío en el que lo ha metido la autora. Pero tranquilos, Funke siempre encuentra la forma de calmar nuestra curiosidad. Incluso, diría yo, de excitar nuestra imaginación, al menos si os pasa como mí que ya tengo una edad en la cual la imaginación empieza a ser un bien escaso, a través de visitas por parajes plagados de voces graves que nos trasladan a bosques o graneros llenos de misterios.
Nos permitimos, pues, volver a ratos a la infancia en que leímos una Historia interminable en la que los personajes estaban vivos para meternos de lleno en el que los personajes hablan con lectores y los grajos solo traen malos augurio.
Si tuviera que quedarme con algo es con los fragmentos que dan pie a cada capítulo y las contínuas referencias a títulos que hoy son clásicos. Me quedé con la impresión de estar ante una autora que adora los libros. O tal vez fue fruto de mi imaginación.
Gracias
PD. De la película mejor ni hablamos.
martes, 30 de agosto de 2011
La Divina Comedia. Dante
"Me hallaba entre las almas suspendidas 52
y me llamó una dama santa y bella, 53
de forma que a sus órdenes me puse. 54
Brillaban sus pupilas más que estrellas;
y a hablarme comenzó, clara y suave,
angélica voz, en este modo: 57
"Alma cortés de Mantua, de la cual
aún en el mundo dura la memoria,
y ha de durar a lo largo del tiempo: 60
mi amigo, pero no de la ventura,
tal obstáculo encuentra en su camino
por la montaña, que asustado vuelve: 63
y temo que se encuentre tan perdido
que tarde me haya dispuesto al socorro,
según lo que escuché de él en el cielo.
Ve pues, y con palabras elocuentes,
y cuanto en su remedio necesite,
ayúdale, y consuélame con ello. 69
Yo, Beatriz, soy quien te hace caminar; 70
vengo del sitio al que volver deseo;
amor me mueve, amor me lleva a hablarte.72
Cuando vuelva a presencia de mi Dueño 73
le hablaré bien de ti frecuentemente."
Hoy que vengo con exceso te tiempo y de paciencia he decidido traer un libro que me encantó, que apenas nadie se atreve a leerlo y que, más que intentar incentivar a la lectura lo que voy a tratar es de explicaros el motivo por el cual a mi me causó esa impresión.
Dante tardó en escribirlo veinte años y decidió denominarlo Commedia ya que su final era feliz. Es un extenso libro de cantos que suele venir acompañado de un montón de aclaraciones y explicaciones sobre los personajes, lenguaje o recorridos que lo hacen aún más extenso y menos atractivo para el posible lector.Pero bueno, me voy a dejar de rodeos y voy a empezar con la obra y de lo que trata realmente, que es bastante más interesante que todo esto.
La Divina comedia nos cuenta la travesía de Dante a través del infierno, cielo y purgatorio con la ayuda de diferentes guías que, enviados por la virgen María, le van mostrando cada uno de esos lugares.
El primero de los guías que recibe a Dante es Virgilio, autor de la eneida, que lo acompañará a través del infierno y el purgatorio. Finalmente el cielo se lo enseñará Beatriz, el amor de Dante que no lo corresponde en vida y que él sigue representando como la virtuosa mujer que le robó el corazón.
Dante comienza el viaje en la Selva Negra, donde se encuentra con la respresentación de tres vicios. a partir de ahí empezará un viaje a través de los círculos de los más bajos pecados. Llega al limbo, lugar de residencia de Virgilio, y empieza el recorrido por el infierno. Pasamos por la lujuria, la ira, la gula, la avaricia... y, en este recorrido por los pecados nos vamos encontrando con Cleopatra, Helena, Paris, Atila, Alejandro Magno... siendo destacables, todos y cada uno de los encuentros. Iremos pasando además por los círculos y viendo los castigos impuestos, todos ellos razonados y originales en su concepción.
De ahí pasamos al purgatorio, cuyo guardián es Catón que atraviesa el infierno y el purgatorio en barca. Dicho purgatorio es una montaña con siete círculos en los que se pagan los pecados capitales y Dante y Virgilio, acompañados por Estacio desde el quinto pecado, siguen su camino por el purgatorio hasta llegar a las puertas del cielo. Dante se despide de Virgilio, llorando por la pérdida y se queda con Estacio, que lo acompaña hasta que llega al cielo, donde se encuentra con Beatriz.
Nos descubre un cielo plagado de virtudes en contraposición con todos los pecados que hemos ido viendo por el camino, cada una de las partes del cielo viene representada por un planeta, la luna y el sol.
De este modo tan singular el autor a través de un propio viaje, nos invita a reflexionar sobre nuestros actos y las consecuencias que acarrean así como el concepto de libre albedrío. Me dejo mucho en el tintero, los guías en realidad son cinco y el viaje de Dante muchísimo más extenso, hay que tener en cuenta que culmina con la visión de Dios y, evidentemente, hay que estar preparado y el camino promete ser largo y difícil.
Bien, esto nos cuenta Dante en este libro tan famoso que, espero, os haya gustado conocer un poquito más.
Prometo firmemente no repetir una entrada así.
Amén
Digo.... Gracias
lunes, 29 de agosto de 2011
Mientras escribo. Stephen King
"Cuando empecé Carrie me habían cogido de profesor de lengua en la localidad cercana de Hampden. El sueldo estipulado eran 6.400 dólares anuales, cantidad que parecía inconcebible después de la lavandería y su 1,60 dólares por hora. Si yo hubiera hecho cálculos, incorporando las horas de reuniones y correcciones de exámenes, me habría dado cuenta de que era una suma más que concebible, y de que nuestra situación era más grave que nunca.
A finales del invierno de 1.973 vivíamos en Hermon, pequeña población al oeste de Bangor, y nuestra casa era una caravana doble."
Después de "nosecuantas" entradas me he dado cuenta que he ido recomendando a unos y otros durante mucho tiempo este libro. Es normal, un poco por su culpa me puse de nombre Mientrasleo, soy una persona bastante básica para estas cosas y me dije Mientras escribo dice un autor, Mientras leo, el lector. Además el libro es de un autor prolífico del que puedo decir haber leído casi todo y no sólo eso, sino que me gustó mucho.
Hay que decir que Stephen King siempre ha renegado de los libros que aconsejan sobre la forma de escribir y, aún así, sucumbió a la propuesta de elaborar uno él mismo. No está enfocado a un público concreto, sirve tanto a quien escribe como a quien lee pasando por aquel que, por ser fan de King, recoge todo fruto salido de su pluma. Y así, este título no demasiado publicitado, se ha ido convirtiendo en un libro conocido bajo la superficie de la publicidad, que va llegando a las librerías primero por petición expresa y luego, al ver que se repite esa petición, en pequeñas remesas que se van agotando incansablemente.
Es un libro que destila sinceridad, Stephen King nos invita y acompaña por su vida, fielmente ligada a la creación literaria, y, de paso, nos reflexiona sobre lo que a él le ha servido o no para madurar como autor. Divide para ello el libro en tres partes. La primera y la última son más autobiográficas; nos cuenta sus primeros recuerdos, su época en el periódico escolar y el lento ascenso en el mundo literario y su vida de pareja sin quitar ninguno de esos detalles que a uno le gustaría olvidar. Nos cuenta también sus comienzos, su caída en el alcoholismo, las drogas, su accidente casi mortal y su parón como escritor, algún momento duro de su vida familiar... y, en algunos casos, las experiencias que sacó de ello para sus siguientes libros. El segundo capítulo sería el cargado de dar consejos. En él propone una serie de ejercicios bastante divertidos de intentar. Orienta un poco al lector en la redacción, la importancia de las visiones que se muestran de una historia, y en la credibilidad de lo que se está contando. Lo cual, dicho por alguien que crea en sus obras terroríficas arañas-payaso, es muy de tener en cuenta.
No pretende adoctrinarnos ni nos parece un manual de aprendizaje, sino una lectura amena que nos acerca tanto al autor como al concepto de escribir a través de una historia interesante, que es la biografía de King. Cabe resaltar que su ascenso en el mundo editorial fue progresivo y que lo vemos pasando por muchas fases, con libros que hoy son reconocidos, y la facilidad con que nos lo va explicando que hace que, en muchas ocasiones, tengamos la sensación de estar escuchando la historia de boca de un amigo al que hemos encontrado en uno de esos días en que se siente elocuente.
Un libro recomendable para lectores y autores que a mí, personalmente, me pareció todo un descubrimiento. No sabía que podía encontrarme a este otro Stephen King, tan alejado de sustos y mónstruos como puedo estarlo yo en mi vida cotidiana. Y es que... a veces no viene mal verlos un poquito más de cerca.
Gracias
Qué mejor valoración de esta obra que la que hizo el propio King cuando dijo que sería recibido por la crítica "como si la puta del pueblo quisiera enseñar modales a las señoras decentes", aunque luego, entre sus páginas aludiría a la crítica sentenciando con un "no tiene mayor importancia".
domingo, 28 de agosto de 2011
El sótano. David Zurdo y Ángel Gutierrez
"La tecnología que se menciona en este libro es real. Las noticias que se recogen dentro del texto son auténticas. Eso es lo que debería darnos miedo".
Hace ya tiempo que Stephen King se adueñó de la literatura de terror contemporánea, nade parece alcanzarlo a la hora de ponernos los pelos de punta cuando decide sacar de sus cementerios vivientes a toda suerte de animales, plagas o vampiros y toca huir, aunque al hacerlo corremos el riesgo de ser secuestrados incluso por el mismo gobierno. Sin embargo, de un tiempo a esta parte van saliendo autores nuevos que, dejando de lado las modas de vampiros de gimnasio, van adentrándose en el difícil mundo de la literatura de terror porque, seamos sinceros, pasada la adolescencia las cosas empiezan a verse de otra manera.
Hoy voy a traer un libro escrito por dos autores españoles, David Zurdo y Ángel Gutierrez, que no necesita buscar entre criaturas sobrenaturales para que veamos auténticos mónstruos entre sus páginas.
Nos cuentan una historia cercana, unos jóvenes se meten en la Facultad de Física de la Universidad Complutense de Madrid, a la que miraré con recelo desde el día que leí el libro, y deciden ocupar un edificio con ventanas enrejadas y puertas aseguradas. Evidentemente suponen que están ahí para proteger la propiedad, y lo que hacen es atraparlos a ellos dentro.
Es un libro sencillo y de lectura rápida en el que los autores nunca pretenden hacernos dudar sobre lo que vamos a encontrar tras las puertas. Parten de una base bastante acertada, a nadie le gustan los sótanos oscuros y mohosos y, si alguno duda de esta afirmación, ya te describen ellos cómo es exactamente el lugar en que se desarrolla la historia. Lo hace de una forma tan gráfica que la sensación de húmeda claustrofobia no tarda en apoderarse del lector. No se centra no obstante en el terror, ni mucho menos, es más novela psicológica, nos permite acompañar a Eduardo, un periodista que investiga un extraño experimento, relajando así la tensión en muchos momentos de la trama.
Y, poco a poco, nos vamos centrando en ese experimento que se está investigando y lo vamos relacionando con los jóvenes encerrados y las posibilidades que se nos van abriendo son tantas que, unidas a la ignorancia de los protagonistas, van haciendo subir el ritmo de la novela.
Tal vez tenemos la sensación de que el libro se queda un poco corto para todo lo que puede dar de sí la historia. Sin embargo, es un libro que merece la pena descubrir.
Os dejo un book trailer sacado de la web de uno de los autores pero, esta vez sí, si pensáis leer el libro os recomiendo que no lo veáis. Orienta demasiado la dirección que va tomando la historia y eso, no a todo el mundo le gusta y menos si es suspense lo que tenemos entre manos. ¿O realmente preferiríais que os dijera el motivo por el que el edificio está así?
Si habéis decidido ver el trailer.. entenderéis lo que quería decir. No hay más que darle forma de documental para empezar a hacer funcionar nuestro cerebro.
Gracias
sábado, 27 de agosto de 2011
Gran Gincana literaria
Hoy me pasaba por el blog La voz de Astarielle y me he encontrado con una Gincana Literaria estupenda, así que no puedo menos que recomendaros que participéis. Lo organiza junto con Wendy y hay unas bases muy sencillas para sumar puntos que las podemos encontrar aquí y os garantizo que, además, promete ser divertido con crucigramas, citas.. no falta de nada!!
Ahora lo jugoso, los premios.. Nada menos que once lotes de libros, pero de alguno de los lotes hay para varios ganadores, así que es un concurso que no podemos dejar pasar de largo.
¡Suerte a todos!
Solar. Ian McEwan
"Pertenecía a esa clase de hombres vagamente anodinos, a menudo calvos, bajos, gordos, inteligentes, que inexplicablemente atraían a determinadas mujeres hermosas. O él pensaba que las atraía, y al pensarlo parecía que así era. Y le convenía que algunas mujeres creyeran que era un genio al que había que salvar. Pero el Michael Beard de esta época era un hombre de mentalidad estrecha, anhedónico, monotemático, afligido. Su quinto matrimonio se estaba desintegrando y debería haber sabido comportarse, tomar distancia, asumir la culpa."
Dicen que Ian McEwan se inspiró para esta obra en un viaje que hizo al Polo Norte, fueron un puñado de intelectuales a observar de primera mano los efectos del calentamiento global y allí le llego la inspiración. Bueno, tal vez fuera al descargar las fotos en el ordenador, esa parte no está demasiado clara.
Lo que sí es cierto es que Michael Beard nace allí y tal vez la concepción de lo que luego se convirtió en su premio nobel.
Michael Beard es el protagonista de Solar, un profesor "egoísta, bebedor, mujeriego compulsivo, mentiroso, infiel, cobarde y canalla" según las palabras de su creador. Es un hombre que vive de la fama, liga cuanto puede y ha reducido su trabajo a el simple papeleo en el departamento de energías renovables. Su vida personal es un desastre. Su mujer, la quinta, se entera de una infidelidad, la undécimo primera, y le abandona para irse con el constructor que les reformaba la casa. Curiosamente, esto provoca que Beard descubra que es la única mujer del mundo a la que desea. Y se encuentra conque ella se va, demasiado contenta, con un hombre veinte años más joven que él (dicho sea de paso, esos son los años que él tiene más que su mujer).
El problema empieza cuando un becario del departamento llamado Tom, lleva un día a casa a Beard y se encuentra con Patrice, la joven mujer, y también se enamora de ella. A partir de aquí empieza una novela nueva, una suerte de comedia de enredo con toques negros que a mí, personalmente, me hizo volar las horas.
En este caso el protagonista es el blanco perfecto para McEwan, se ceba con él sin llegar a producirnos lástima, es un personaje con el que no se siente empatía y al que vemos como una figura ruin a lo largo de toda la obra. Nada en él nos resulta simpático, ni tan siquiera sus avances en el campo de las energías renovables. Representa en su matrimonio el papel de infiel engañado y en la vida lo vemos mezquino, alejado del papel de antihéroe que es representado comúnmente por este tipo de personajes, llegando a participar en un accidente mortal que daría la clave al propio Beard para un proyecto de gran alcance.. en fin, todo virtudes nuestro buen amigo el físico.
Es una novela precisa y divertida, con descripciones académicas irónicas y un crítica muy pulida de la vida actual. Toca el tema del calentamiento global hasta casi hacerlo eje argumental y se le nota una gran documentación científica que otorga solidez a toda la trama que, no olvidemos, incluye cadáver. El libro comienza de forma magistral,y, pese a perder ritmo en sus últimas páginas tiene un último párrafo realmente digno de llegar a él. Tiene escenas verdaderamente memorables; Beard abandonado, se embarca en una expedición para ver los efectos el calentamiento y se descubre pensando en sexo incluso con ese frío, o somos testigos de una curiosa discusión, incluso el papel de fotosíntesis.. todo nos suena irónico, no se puede evitar.
Estamos, pues, ante un McEwan que merece ser leído, bastante alejado de Expiación, como la ocasión lo requería y descubriéndonos que es capaz de reinventarse a sí mismo en cada una de sus novelas sin perder ese toque característico que lo hacen salirse de lo común.
Gracias
viernes, 26 de agosto de 2011
¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (Blade Runner). Philipp K. Dick
"Una alegre y suave oleada eléctrica silbaba por el despertador automático del órgano de ánimos que tenía junto a la cama despertó a Rick Deckard. Sorprendido -siempre le sorprendía encontrarse despierto sin aviso previo- emergió de la cama, se puso en pie con su pijama multicolor, y se desperezó. En el echo, su esposa Irá abrió sus ojos grises nada alegres, parpadeó, gimió y volvió a cerrarlos.
- Has puesto tu Penfiel demasiado bajo -le dijo él- Lo ajustaré cuando te despiertes...
- No toques mis controles - su voz tenía amarga dureza- No quiero estar despierta.
El se sentó a su lado, se inclinó sobre ella y le explicó suavemente:
- Precisamente de eso se trata. Si le das bastante volumen te sentirás contenta de estar despierta. En C sobrepasa el umbral que apaga la conciencia"
Hoy acerco un libro complicado. Siempre se ha tenido mucho cuidado con las adaptaciones cinematográficas de los libros que nos gustan ya que nunca alcanzan las expectativas de sus fans. Si te gusta el libro no veas la película ha sido una máxima que pocos directores han podido romper, y, sin embargo yo traigo hoy un título que ha sido eclipsado por su propia versión cinematográfica. Hasta el punto de conocerse la novela con el título de su magistral adaptación llevada cabo por Ridley Scott. Y no fue por casualidad, Philip K. Dick ya era un autor de ficción de culto, que por causas naturales, falleció antes de poder ver su adaptación. Añadiré ahora que la novela poco tiene que ver con la película ya que, el guionista decidió reescribir un adaptación.Se conserva pues la trama principal y los nombres, pero , si leemos la novela observaremos mil y un diferencias.
La novela fue escrita en 1982 y digo esto porque sitúa el futuro en el año 1992. Y no es un futuro muy esperanzador. La población mundial está emigrando a Marte ya que la Tercera Guerra Mundial ha provocado unos índices de radiactividad demasiado altos en la Tierra así como un clima poco acogedor. Con semejante panorama aparecen los androides Nexus-6, fabricados para la colonización y con una vida de 4 años de la que su hiperdesarrollada inteligencia artificial es consciente, hasta llegar a plantearse su existencia como un abuso por parte de los humanos. Deciden entonces rebelarse y se convierten en los fugitivos de la historia. Nos presenta Dick a su protagonista, Rick Deckard, cazarrecompensas, que nos llevará de la mano por el camino de la caza de seis androides. Descubriremos el significado de la palabra empatía y del amor, haciendo al lector dudar sobre lo sentimientos tanto humanos como mecánicos, lo cual es un triunfo para el autor ya que en ningún momento podemos olvidar que una de las partes implicadas en la novela es mecánica.
Dick nos enseña un mundo a través de una pluma desbordante de ideas y de preguntas que nos traslada a nosotros, haciéndonos dudar tanto como a Deckar sobre quien tenemos delante. Avanzamos hasta el punto de conmovernos, dudando de quien es quien en ese mundo de locos en el que cada cual toma el papel que no le corresponde. Deckard está en una tierra que apenas hay humanos y en a cual los androides luchan mostrando sentimientos en un mundo mecánico, y todo esto sucede para hacer tambalearse las reglas el universo conocido por el lector. El mérito de Dick es hacerlo verosímil, huyendo de las largas exposiciones científicas a las que nos tiene acostumbrados el género, proporcionándonos una lectura ágil y cargada de preguntas que deberemos responder nosotros mismos teniendo en cuenta, eso sí, la fecha de su publicación.
Gracias
PD. Me consta que hubo publicaciones posteriores que situaban el futuro en 2.002 en un intento de... alargar la sensación de futuro o algo así, quiero suponer. Me indigna bastante que se pueda modificar el original de un libro, me gustaría saber vuestra opinión.
jueves, 25 de agosto de 2011
Un trabajo muy sucio. Christopher Moore
"Charlie había cogido en brazos a la pequeña Sophie unos segundos ese día y enseguida se la había pasado a la enfermera, alegando que alguien más ducho que él debía hacer el recuento de los dedos de sus manos y pies. Él ya lo había hecho dos veces y siempre contaba veintiuno.
- Se comportan como si eso fuera todo. Como si, porque la cría tenga los diez dedos de los pies y los diez de las manos, todo fuera a salir bien ¿Y si hay alguno de más? ¿Eh? ¿Y si hay dedos de regalo? ¿Y si el bebé tiene cola? (Charlie estaba seguro de haber visto una cola en la ecografía del sexto mes. ¡El cordón umbilical!¡Sí, ya! Había guardado una copia en papel)."
Conocí al autor de este libro por El ángel más tonto del mundo, libro que recuerdo haber leído en la cama soltando alguna carcajada cuando los muertos se comunicaban telepáticamente en el cementerio preguntándose qué era eso de Ikea que todo el mundo comentaba. Al poco tiempo, empezaron a aparecer mas títulos suyos y, un día que estaba aburrida me puse a ojear en una librería el que hoy traigo y, después de disimular un par de risas con carrasperas, me decidí a llevármelo.
Nos cuenta Moore la historia de Charlie Asher, al que conocemos como padre primerizo y tembloroso ante la nueva situación, que lleva al extremo el típico dicho de... "mientras venga bien, que sea lo que quiera". Nos lo presenta en el hospital, un poco nervioso preocupándose de si su hija tiene los diez dedos en las manos y los pies que corresponden ya que él no acierta a contar, le salen siempre 21. Tras irritar a todo el mundo lo convencen para irse a casa emocionado pero, en el último momento, regresa encontrando junto a su mujer a una especie de hombre verde que le dice que no debería de verlo. Y no sólo eso, sino que su mujer muere! De esta guisa nos le deja en el primer capítulo, viudo, pensando que está loco porque nadie más a visto a este hombre verde, con una hija, y una tienda que atender.
Poco a poco descubre que es un Mercader de la Muerte, así que le toca recoger almas que dejan el mundo mortal, evitar a las fuerzas de la oscuridad y descubrir que pasa con unas tal Ardillas que quieren quedarse con sus almas. Ah, también tiene que ser padre y cuidar de la tienda. Pobre Charlie, que siempre presumió de ser un "macho beta" y ahora se ve envuelto en una vida de locos; y encima con su hija, que algo le pasa. Se le mueren las mascotas, por no hablar de la palabra "gatito" o de los únicos perros que no se le mueren, que tampoco sabe de dónde han salido, pero le dan un miedo atroz, y no hay forma de separarlos de ella. Está claro, Charlie necesita ayuda.
Como podéis ver, es una historia que parte de una persona normal, y la mete en mitad de un desarrollo absurdo, cosa en la que Moore nos va demostrando que es un especialista, para sacar la sonrisa, incluso la carcajada rápida del lector. No es un libro extenso, es consciente de que la historia no da para ello. Pero hay que reconocer que es muy difícil escribir un libro con el que los lectores rían y encima reconozcan haberlo leído. Porque, seamos sinceros, el libro bueno, lo que se dice bueno... no es; pero pronto nos queda claro que tampoco intenta su autor hacerlo pasar por ello. De lo que se trata es de disfrutar con una historia entretenida que es capaz de leer del tirón cualquiera, esté o no acostumbrado a este tipo de literatura.
Estuvo rápidamente posicionado en las listas de ventas y supongo que es de esos libros que pasan pronto al olvido pero que, mientras siguen sonando, hacen sonreír a mucha gente. Yo, por mi parte os lo dejo aquí, como comedia, o rareza, o experimento, o todo junto... o, simplemente, como una opción más.
Gracias
PD. No pude evitar al leerlo recordar una serie que ponían en televisión que trataba de gente que, al morir, les asignaban el trabajo de Mercaderes de la Muerte, os dejo la cabecera que, desde el primer día, me pareció divertidísima.
miércoles, 24 de agosto de 2011
Middlemarch. George Elliot
«No estoy segura de que el hombre más grande de su época —si es que alguna vez ha existido cumbre tan solitaria— pudiera escapar a los desfavorables reflejos de sí mismo en diferentes espejos de reducidas dimensiones; e incluso Milton, al contemplar su imagen en una cuchara, tendría que conformarse con el ángulo facial de un palurdo».
Parece que cuando se habla de literatura inglesa victoriana todos tenemos en mente los mismos nombres, cuando Middlemarch de George Elliot es una de sus mas representativas obras y, para muchos, desconocida. De hecho, encontramos en esta obra todas las características de lo que se ha convertido luego en novela moderna.
Nos cuenta la historia de tres parejas, haciendo protagonista a una de las partes que conforman cada pareja.
Por un lado esta Dorothea Brooke, que con diecinueve años y una educación no del todo adecuada para una joven que busca marido, ya que es idealista y sesuda, se enamora de un no tan joven erudito, con la ilusión de alcanzar el mismo conocimiento que él. Se encuentra con un amor correspondido y un matrimonio fracasado.
La segunda pareja nos parte de Tertius Lydgate, un médico emprendedor y lleno de ideas revolucionarias que acaba cayendo en las redes de la mujer mas hermosa de la comarca, quien sólo lo ve como una aspiración social. También fracasa en su unión.
La tercera está formada por Fred Vincy, un joven derrochador, cuto mayor plan de futuro consiste en esperar una insegura herencia, que se enamora de una joven Mary Garth, obrera y sensata. Ambos jóvenes, que se conocen desde niños, van tomando juntos el camino de una vida que les pone a prueba varias veces para ir formando los cimientos de un relación que, esta vez sí, promete hacerlos felices.
Y estas son las parejas, aunque poco a poco vamos conociendo una cuarta que se entremezcla con alguno de los protagonistas y que se irá adueñando de la historia.
Pero Middlemarch no es sólo eso; como buena novela, nos cuenta de amores posibles e imposibles, herencias inesperadas y desheredados, pasados oscuros y enredos de todo tipo que nos mantienen entretenidos a lo largo de este extenso volumen. Y luego está la parte especial del libro, la que va más allá de la historia que estas leyendo y te cuenta los momentos, las calles, los vestuarios.. hasta recrearte una época en el salón de tu casa cada vez que abres el libro. Te encuentras frente a frente con las ideas y los prejuicios de la primera mitad del siglo XIX, mostrándonos conflictos cercanos en personajes tangibles que se nos antojan tan reales como sus preocupaciones.
Está escrito con soltura, nos permite ir pasando de personaje en personaje sin atragantarnos en los convencionalismos que caben esperar en estos casos. Si que hay ejemplos de superación, de tesón, de independencia femenina.. pero Elliot los consigue plasmar con claridad incluso en las interacciones entre ellos, sujetas a las rígidas normas sociales de la época. Tiene sus toques de humor que nos hacen sonreír, extraídos de pequeños actos cotidianos que de otro modo podrían resultarnos tediosos y, bajo la pluma de esta autora son casi un respiro entre intrigas y enredos.
Es, y esto lo afirmo sin lugar a duda, un libro que merece la pena descubrir; como ejemplo de los comienzos de la novela moderna, como representante de novela victoriana o como distracción y, sobre todo, como lección de una forma de escribir a imitar porque, amigos, me he guardado lo mejor. Pese a todo lo que he dicho, en Middlemarch no sucede nada relevante, no es más que el fiel reflejo de la vida en una provincia, y el libro son más de mil páginas. Y aún así, mi opinión es la que acabáis de leer. Si eso no es un ejemplo de saber escribir, pocos mejores se me ocurren.
Gracias
PD. George Elliot es el pseudónimo de Mary Anne Evans. Una mujer inteligente, formada e idealista que usó un nombre masculino para huir de los convencionalismos a la hora de publicar y por evitar escándalos respecto a su vida personal. Posee más de un rasgo en común con Dorothea.
martes, 23 de agosto de 2011
Crimen y castigo. F. Dostoievski
"¿Donde he leído -pensó Raskólnikov prosiguiendo su camino-, dónde he leído lo que decía o pensaba un condenado a muerte una hora antes de que lo ejecutaran? Que si debiera vivir en algún sitio elevado, encima de una roca, en una superficie tan pequeña que sólo ofreciera espacio para colocar los pies, y en torno se abrieran el abismo, el océano, tinieblas eternas, eterna soledad y tormenta; si debiera permanecer en el espacio de una vara durante toda la vida, mil años, una eternidad, preferiría vivir así que morir. ¡Vivir, como quiera que fuese, pero vivir! "
Hay mucha gente para la cual un determinado tipo de libros se identifica con estudios y parece que eso les produce rechazo. De algún modo y, aunque a casi nadie les mandan leer como tarea a Dostoievski, Crimen y castigo se ha convertido en uno de esos libros que se consideran de culto pero que se rechaza por temerlo pesado o aburrido. En mi caso, tengo que decir que es un libro que me pareció magnífico. Cuando terminé de leerlo tenía la sensación de conocer no sólo a los personajes que allí aparecían sino también a su autor. Porque tiene algo de íntimo, de honesto, que nos dice que el autor ha ido dejando parte propia en las letras que allí aparecen.
Nos cuenta la historia de Raskólnikov, y esto es lo único que tengo que echar en cara a el libro, el nombre de sus protagonistas se me antoja complicadísimo tanto de pronunciar como de escribir, aunque al final del libro los tratemos de tú.
Nos describe Dostoievski un crimen y el largo camino del castigo, primero psicológico a través de las luchas internas del personaje y finalmente el real, mucho menos importante en la obra. Vamos asistiendo a una evolución de la conciencia de Raskólnikov, sin buscar justificarse ni ser víctima, ni tan siquiera verdugo. Aparecen también las hermanas de éste, que adoptan el difícil lugar de los que se mueven a caballo entre la duda y la desesperación. Y todos ellos viven en la más absoluta pobreza. Esto es crucial en la obra, ya que la víctima es una anciana avara cuya muerte, tal vez, alivie parcialmente la situación familiar.
El libro comienza metiéndonos de lleno en el crimen, sin preámbulos, y nos lo muestra apresurado y torpe forjándonos una fuerte primera impresión de su autor, que nos acompañará a lo largo de la obra.
Pero, si tuviera que decidirme por un protagonista, sería sin lugar a dudas la mente de Raskólnikov, ya que, si bien Dostoievski nos describe la acción como espectador, una y mil veces nos vemos inundados, invadidos incluso, por los pensamientos del joven protagonista, por su angustia y su odio, incluso su arrepentimiento nos desborda entre las páginas de este clásico universal. Las hermanas nos aportan las visiones periféricas de los hechos acosadas por su propia situación, convirtiendo la historia casi en un estudio psicológico, pero sin perder su identidad de novela.
Es un libro que nos plantea de lleno el acoso psicológico al que uno mismo se puede someter frente a la duda moral de la justificación del crimen. Todos los factores incluidos en la obra son decisivos. Además nos hace plenamente conscientes de la pobreza que nos describe, factor que se nos antoja decisivo, hasta tal punto, que no tenemos dudas de que la vida del autor ha sido así en algún momento. Cosa que es cierta, no olvidemos que Dostoievsky incluso pasó por Siberia, así que cuando habla de penurias, evidentemente sabe lo que está diciendo.
No tiene demasiadas páginas, ni nos quedamos con la sensación de que falte nada, lo finaliza de una forma ejemplar, cerrando una acción perfecta desde su concepción que nos hace pensar y dudar incluso de la cordura de las reflexiones de quienes nos acompañan por el largo camino del castigo.
Gracias
lunes, 22 de agosto de 2011
Otro premio al blog?
Si esto sigue así creo que voy a jugar a la loto!
Me ha tocado un Bob esponja!!! me lo ha dado Marian de Marian lee más libros, parece que es una dinámica o juego el ir pasándoselos unos a otros y se ha acordado de mí.
Ahora tengo que contestar a unas preguntas..
¿Por qué creaste el blog? ¿Qué tipos de blogs sigues? ¿Marca favorita de ropa, maquillaje y perfume? ¿Canción que se te ha pegado?¿Cúal es tu colorfavorito? y por último ¿Qué paises te gustaría conocer?
Creo que lo bueno de estos premios es que nos ayudan a conocer un poco lo que hay detrás de la pantalla. En mi caso empecé con el blog para hablar de libros sin aburrir a nadie y sigo los de libros y cine. La ropa me gusta seria, no miro marcas, ni para bien ni para mal y no me maquillo. La colonia me gusta de Chanel y mi color favorito es el marrón. País? Grecia, las islas Jónicas.
Y yo le paso el testigo a otros blogs, que os sirvan para conocerlos, si no los conocéis aún:
1. Entre tanto polvo una flor
2. Las palabras vuelan lo escrito permanece
3. Diario de una bailarina
4. Ediciones de cartón
5. El hada lectora
Como siempre, un saludo a todos y gracias
Me ha tocado un Bob esponja!!! me lo ha dado Marian de Marian lee más libros, parece que es una dinámica o juego el ir pasándoselos unos a otros y se ha acordado de mí.
Ahora tengo que contestar a unas preguntas..
¿Por qué creaste el blog? ¿Qué tipos de blogs sigues? ¿Marca favorita de ropa, maquillaje y perfume? ¿Canción que se te ha pegado?¿Cúal es tu colorfavorito? y por último ¿Qué paises te gustaría conocer?
Creo que lo bueno de estos premios es que nos ayudan a conocer un poco lo que hay detrás de la pantalla. En mi caso empecé con el blog para hablar de libros sin aburrir a nadie y sigo los de libros y cine. La ropa me gusta seria, no miro marcas, ni para bien ni para mal y no me maquillo. La colonia me gusta de Chanel y mi color favorito es el marrón. País? Grecia, las islas Jónicas.
Y yo le paso el testigo a otros blogs, que os sirvan para conocerlos, si no los conocéis aún:
1. Entre tanto polvo una flor
2. Las palabras vuelan lo escrito permanece
3. Diario de una bailarina
4. Ediciones de cartón
5. El hada lectora
Como siempre, un saludo a todos y gracias
Obsesión. Antonio Lagares
"He desembocado a este estado irreversible porque morirse es una sensación que se engendra en nuestra mente y se asienta en las profundidades de uno mismo, se acomoda en un laberinto interno de calles interminables y salidas inexistentes, en una infinita locura de amor desesperado a la nada. Para saber morir hay que excavar en las miserias del subconsciente, en los excrementos del alma, y derribar sin trauma el puente de unión con lo terrenal, cómo hacen los dioses que se disfrazan para el carnaval de la vida".
Hoy traigo un libro de relatos, Obsesión. Lo primero que llama la atención de él es la oscuridad de la portada, con una mirada profunda y nítida dentro de la confusión de la negrura del fondo que parece convertirse en superficie como si estuvieran viéndonos desde el fondo de un sucio lago. Y, realmente algo así es lo que hace el autor a lo largo de sus quince historias. Bucea a través de las mentes de sus protagonistas para exponernos sus fobias y sus demonios llevados al extremo.
Llama la atención la fuerza que tienen los protagonistas pese a que en la mayor parte de los casos ni siquiera sabemos su nombre. Sin embargo, Antonio sabe perfilarlos con maestría a la hora de meternos en su piel. Y eso hace, acosándonos, generando una intranquilidad creciente a medida que vamos avanzando y descubriendo que nadie escapa a la aterradora posibilidad de la locura. Todos pasan por allí, las víctimas convertidas en verdugos, aquellos que pierden el apego a la vida porque sienten que ya no importa nada, los que intentan superar el duelo, los maltratadores.. los vamos viendo desfilar contándonos su vida, su visión particular tal vez, pero es la que ellos conocen.
Tenemos en este libro espejos para ver la vida, y también para ver la muerte. Médicos que persiguen la conciencia y locos reconocidos que ven la vida desde el otro lado, situado tras un muro que imaginamos blanco. Pero también hay momentos para la risa cuando Quijotes elogian a posaderas con bigotes y, evidentemente, sin atributos femeninos. Y para pensar, cuando nos ponen delante esa figura casi cómica del "loco local", al menos en donde yo vivo, y lo dan una vuelta más.
Hay, en definitiva, un mundo por descubrir de la mano de Obsesión, a través de frases cortas y concisas que, pese a llevarnos por un tortuoso camino, nos envuelven con una musicalidad poco común hoy en día. Para muestra un ejemplo.."Dicen los pregoneros de amistad de dos whiskys" cita un hombre cualquiera con un infierno particular. Porque si algo tienen los infiernos de Obsesión es eso, que todos son Propiedad particular.
Gracias
PD. Esta vez no vengo con un trailer sino con una noticia. "Obsesión" pertenece a una trilogía llamada Mentes paralelas y en unos días, en septiembre, sale el volumen "Viaje sin retorno" una novela que ya tengo ganas de tener entre manos para ver qué camino nos invita a recorrer Antonio Lagares. Su última parte, "La rastreadora", de momento no tiene fecha pero en cuanto sepa algo os lo diré.
domingo, 21 de agosto de 2011
Los desaparecidos
Hoy he decidido dedicar un rato a la memoria. Llevamos tiempo empeñados en negar lo evidente, la implantación, no sustitución, del formato digital en la lectura. No hablo ya de los e-readers, y menos esta semana que ya os contaré la odisea de mi lector, sino del formato digital en toda su extensión, es decir, el ordenador.
Esto viene a que el otro día estaba pensando en cosas que vamos dejando atrás con el tiempo, la cosa empezó gracias a vuestros comentarios sobre Los tres Mosqueteros y la serie infantil de los Mosqueperros, pasé por los bocadillos de chorizo o de onzas de chocolate y acabé en las casas a las que iba de niña.
Cuando iba al colegio, recuerdo los trabajos que nos mandaban y que nos obligaban a pasar horas copiando de forma más o menos creativa, las páginas de las enciclopedias. Y, para eso, nos llevaban bien a una biblioteca o, en algunos casos, a la casa de los abuelos o la Tia Pitanita, que tenía un montón de libros. Y allí estaba La Magnífica, la enciclopedia, con sus números interminables a lo largo de sus lomos, todos iguales, colocada en lo alto del mueble de la sala de estar. Se notaba que e esa casa eran inteligentes, e instruidos, tenían la Larousse o la Espasa, había muchas más pero esas eran el bmw del conocimiento para nosotros. Y si estaba en casa de algún compañero ya nos andábamos listos cuando habían los grupos de trabajo para que nos tocase con él, porque tenía de todo, fotos, ejes cronológicos, incluso mapas. Es más, creo recordar que en mi casa había una con ilustraciones en acetatos que cuando levantabas uno ibas viendo el dibujo por capas, y así veías el cuerpo humano por dentro, la tierra por dentro y todos los "por dentro" que se te podían ir ocurriendo.
Esta cultura que veía ya del colegio representada en forma de diccionario, normalmente VOX, que se compraba curso sí curso no. Es lo que hemos perdido sin querer y casi sin darnos cuenta. Y, no pongo en duda porque no lo sé, que los niños lleven los diccionarios al colegio pero se me hace un poco difícil de imaginar al niño con un diccionario pudiendo consultar la palabra necesaria en la web de la RAE o, los más arriesgados, directamente al buscador de turno. Hemos empezado una carrera en la que los niños no tienen enciclopedias en casa y nadie se molesta en intentar que compres "la herramienta imprescindible para llegar a selectividad" porque para eso está wikipedia en el peor de los casos.
Ahora, en las partes altas de los muebles hay libros normales y corrientes, heredados o comprados, figuras, incluso plantas artificiales, y nadie echa de menos los voluminosos tomos de aquellas enciclopedias porque ni siquiera reparan en su ausencia. Ya no hay diccionarios en las habitaciones de los estudiantes y, si los hay, serán los de el idioma que corresponda, normalmente el inglés, por ahorrar el tiempo que se tarda en encender el ordenador.
Supongo que cuando se edita el diccionario cada año y salta la polémica a las calles por si han incluido la palabra coño o cocreta poca gente se plantea si luego alguien compra un diccionario en la librería de turno o son sólo las bibliotecas las que lo hacen.
Y así, entre discusiones sobre si el formato digital va a ganar terreno o no a la publicación en papel no nos vamos dando cuenta de los que se van quedando en el camino, los perdidos, los desaparecidos que nadie parece recordar y que, tal vez, sean los peones de una partida perdida.
Si eso es así, tengo que expresar mi pesar. Me sigue gustando el libro en papel y, a ratos, recuerdo que antes había un diccionario en cada habitación de estudiante que se preciara. Ahora hay un portátil. Juzgad vosotros mismos.
Gracias
sábado, 20 de agosto de 2011
El castillo ambulante. Diana Wynne Jones
"Llegó al rellano y se encontró con Howl en el umbral de su cuarto. Estaba apoyado indolentemente sobre una mano y le bloqueaba totalmente el paso.
—Ni se te ocurra —le dijo en tono agradable—. Me gusta sucio, gracias.
Sophie lo miró con la boca abierta.
—¿De dónde has salido? Te he visto marcharte.
—Eso ha sido para despistar —dijo Howl—. Ya has sido bastante mala con Calcifer y Michael. Era lógico que hoy me tocara el turno a mí. Y a pesar de lo que te haya dicho Calcifer, soy mago. ¿O es que creías que no podía hacer magia?
Aquello echaba por tierra todas las teorías de Sophie, pero se habría muerto antes que admitirlo.
—Todo el mundo sabe que eres mago, jovencito —declaró con severidad—. Pero eso no cambia el hecho de que tu castillo sea el lugar más mugriento que he visto en mi vida."
Sentáos todos y prestadme atención porque os voy a contar una historia, sucedió en el lejano país de Ingary, hace mucho tiempo o tal vez no tanto, olvidaron decirme esa parte, pero en Ingary hay botas de siete leguas y capas de invisibilidad y, por supuesto, magia... En ese país vive Sophie, hermana pequeña de tres que vive tranquila trabajando en una sombrerería y observando como las cosas buenas le pasan de largo. Un día, el destino le da la razón, y atrae la atención de la famosa Bruja del Páramo, quien la hechiza convirtiéndola en una anciana irreconocible para todos.
Y si la Bruja del Páramo existe.. tal vez exista la solución a su encantamiento, El Castillo Ambulante, así que Sophie se dirige a buscarlo por las colinas que recorre. Sólo hay un problema, el señor del castillo es un mago, Howl, según dicen malvado, que se alimenta de los corazones de las chicas. Sophie sale a buscarlo pero, al ser una anciana, cae vencida por el cansancio y es el propio mago quien la recoge metiéndola en el castillo a descansar y allí, un demonio que es el alma del castillo le propone un difícil trato para solucionar su problema.
Sí, he traído un cuento, de los de toda la vida, con una joven desafortunada, una mala malvadísima y un supuesto "príncipe". Entonces, ¿por qué lo he traído? pues porque es mucho más que eso, es un universo de personajes complejos que se van adueñando de la obra en la que nada es lo que parece, incluso el perro que apenas asoma o el espantapájaros ayudante, tienen un motivo y una misión en esta historia. Nada ocurre por azar y nadie pasa sin obligarnos a fijar nuestra atención por un motivo u otro. Y luego está el castillo, el gran personaje, lleno de trastos, cambiante a cada momento y con puertas a mundos apasionantes... y finalmente la guerra, que porfundiza en la ética de los personajes, incluso el arrogante Howl muestra una dimensión nueva de sus sentimientos ante ella.
El Castillo Ambulante no descubre realmente nada nuevo, ni tampoco lo pretende. Habla de destino, juventud y amor. Lo verdaderamente novedoso, lo que hace que aunque la leamos de adultos nos quedemos con los ojos muy abiertos delante del libro, es la historia, la imagen de ese castillo vagabundo que va recorriendo colinas y valles entre nieblas, con sus extraños ocupantes y sus puertas a ciudades dispares... tiene algo de romántico, pero no en ese sentido amoroso al que nos habitúa la palabra, sino al soñador que perdemos cuando vamos creciendo.
Os dejo el trailer de la película, la música es impresionante, disfrutad
Y bien, ¿os animáis a ser niños?
Gracias
viernes, 19 de agosto de 2011
El poder del perro. Don Winslow
"Los campesinos mexicanos corren delante de las llamas, aferrando las escasas posesiones que han podido reunir antes de que los soldados prendieran fuego al pueblo. Los campesinos empujan a sus hijos hacia delante, cargados con sacos de comida, fotografías de familiares compradas a buen precio, mantas y algo de ropa. Sus camisas blancas y sombreros de paja (manchados de amarillo a causa del sudor) les dan la apariencia de fantasmas entre la bruma de humo.
Salvo por la ropa, piensa Art, podría ser Vietnam.
Casi se sorprende, cuando mira la manga de su camisa, al ver algodón azul en lugar del verde del ejército."
Hoy traigo una novela magnífica que, además, me ha sorprendido incluso tiempo después de leerla. Cuando estaba buscando la foto he descubierto que la edición que tengo en casa ha quedado descatalogada y que se puede incluso vender. Vamos, ni loca la vendo, pero me he quedado un tanto perpleja con el descubrimiento.
Cuando ví la novela la primera vez, no pude evitar recordar los incidentes a media noche y ni siquiera me paré a mirarla dos veces. Luego escuché decir a James Ellroy sobre este libro: "Es aterradora y triste, de una intensidad magnificamente sostenida. Es una visión en miniatura del infierno, con toda la locura moral que la acompaña" y, ante semejante afirmación y añadiendo que la practica totalidad de los hechos que nos cuenta Winslow en su novela son verídicos... estaba claro, había que leerla.
Es una novela dura, te atrapa desde sus primeras páginas, no da tregua en presentaciones innecesarias, ya nos iremos conociendo todos por el camino. Y el camino es aterrador, nos va contando una historia en varias voces y ni una de ellas nos sirve de consuelo ante las vidas que se nos muestran.
Winslow nos sitúa en la década de los setenta, se cultiva amapola y Keller, perteneciente a la DEA se encarga de luchar contra el narcotráfico a cualquier precio; ya sea su familia, su conciencia o la vida de aquellos que van quedando por el camino. Entramos, además, en una guerra entre cárteles mexicanos por controlar un paso fronterizo con Estados Unidos que se presenta como una suerte de ruta del oro para quien lo posea. Así que Keller se encuentra con los Barrera, una familia que provocará que nuestro agente pierda la capacidad de valorar si sus actos están o no justificados por su misión. Los Barrera son narcotraficantes, luchan por controlar el tráfico de cocaina y van dejando cadáveres a su paso como firma en caso necesario. Y, entre los Barreras y Keller, aparecen los dos últimos protagonistas de la novela, Nora y Callan. Dos historias repletas de muerte y tragedia, una prostituta que se cruza donde no debe y un joven cuyo destino lo lleva a vivir matando.
Y todo esto, que no es poco, es lo que nos trae Don Winslow en un libro que crea tanta adicción durante su lectura como las sustancias alrededor de las que gira. Recrea un universo que no nos permite olvidar que existe fuera de las páginas del libro, que nos revuelve por dentro mientras continuamos leyendo escenas que bien podrían dejarnos las manos manchadas de sangre como reflejo de lo que tenemos entre éstas.
Tengo que añadir que no soy particularmente aficionada a leer novelas sangrientas o que destilen violencia gratuita pero, en este caso, y pese a que su comienzo da una idea bastante exacta de lo que uno se va a ir encontrando, me descubrí buscando ratos, quitándolos de otras actividades, para sumergirme en ese infierno de 700 páginas y, pese a todo lo que nos enseña y las sensaciones que produce saber que no es todo ficción, tengo que decir que estamos, posiblemente, ante una novela que será referente de la literatura durante mucho tiempo. Por méritos propios.
Gracias
jueves, 18 de agosto de 2011
El americano impasible. Graham Greene
“Ahora necesitaba el día punteado por esos estallidos repentinos que podían ser el escape de un coche o podían ser granadas; ahora necesitaba conservar la visión de esas siluetas con pantalones de seda que atravesaban con gracia el mediodía húmedo; ahora necesitaba a Fuong; y mi verdadero país se había desplazado unos trece mil kilómetros sobre la tierra"
El americano impasible es, posiblemente, la mejor obra de Graham Greene y tal vez la mayor curiosidad la encierra el contexto en que se escribe, frente al que se encuadra. No deja de sorprender que una novela escrita tras la Segunda Guerra Mundial tenga tintes anti-americanos tan marcados. Tal vez no políticamente hablando, pero si que representa a los americanos en dos vertientes, bien como seres arrogantes y egocéntricos, que nos deja claro que son los yankees, frente a lo que suponemos como nación joven, Pyle, que es el norteamericano idealista, voluntario pero sin saber muy bien su propia repercusión. Es, realmente, una crítica contínua llevada de una forma sencilla y fuída a través de la historia que desarrolla.
La historia, por cierto, es un triángulo amoroso entre una chica asiática, el corresponsal de guerra británico Fowler y el funcionario norteamericano Pyle. Todo esto lo encuadra en la Indochina Francesa de los años 50 representando las dudas de los americanos sobre el terreno.
Vemos en cada personaje una cultura representada y la incomprensión que genera a los otros dos ante muchas de sus acciones. Además, hay un reflejo del clima político y social de Indochina, su lucha por la independencia, la retirada de los franceses y el interés del gobierno americano en tomar posiciones. De hecho, podemos ver como los atentados en Hanoi o Saigón, los bombardeos y las emboscadas son relatados en la obra como si se tratase de una auténtica crónica. Bajo la atenta mirada de Greene todos se llevan su parte, también los franceses son representados ciegos ante su prepotencia y los Indochinos, pieza casi de cambio, se nos representan mercenarios de su propia supervivencia.
La novela se presenta con un ritmo que va en aumento a medida que avanza la acción, tiene escenas memorables en las que nos presenta los problemas para comunicarse con la chica y uno de los amigos ha de usar al otro como intérprete. Ha sido llevada al cine en dos ocasiones que yo recuerde y ninguna de ellas ha conseguido plasmar las complejas relaciones entre sus protagonistas igual que su autor ni tampoco los choques a los que luego se somete a los personajes. Concebida como novela de intriga nos da un fiel retrato de cada una de las tensiones reflejadas en ella.
Es, en definitiva, una novela para masticar mas que para leer, para captar sus matices entre las líneas y pararnos a pensar una vez la hemos terminado.
Gracias
Por si os interesa la versión cinematográfica.
Premios!
Soy nueva en estas lides así que me váis a predonar si meto la pata, algo bastante probable conociéndome. Me han dado un premio al bog más bonito y tengo un premio goloso..aunque con esos ojos da pena darle un mordisco, verdad?
El premio me lo ha dado Tabuyo, que es un encanto, desde su blog Al principio fue el verbo. Y el verbo se hizo libro
Muchísimas gracias Tabuyo, te debo un helado!!
Ahora me toca premiar a mí a blogs que me hayan gustado... Dios mío me siento como Pe a punto de gritar Pedroooo!!! además nos parecemos, las dos tenemos..... piernas.
1. El bosque del duende rojo
2. Más visitas para los blogs literarios
3. El rincón de las jovencitas literarias
4. La taberna de la lectura
5. Libros que voy leyendo
6. Papel en blanco
Las condiciones para dar los premios eran; citar a quien me lo ha concedido, poner la imagen del premio y que mis premiados no lo tuvieran ya, chicos, me avisáis y os cambio el sabor del helado.
Y por último, y si me permitís es lo más cotilla de todo, tengo que contar mi mayor sueño. Esto... la paz mundial no vale, no? Pues entonces dejar de madrugar me parece de lo más apropiado, sobre todo en invierno.
Un saludo a todos y gracias por pasar por aquí.
PD. Será por helados..
El premio me lo ha dado Tabuyo, que es un encanto, desde su blog Al principio fue el verbo. Y el verbo se hizo libro
Muchísimas gracias Tabuyo, te debo un helado!!
Ahora me toca premiar a mí a blogs que me hayan gustado... Dios mío me siento como Pe a punto de gritar Pedroooo!!! además nos parecemos, las dos tenemos..... piernas.
1. El bosque del duende rojo
2. Más visitas para los blogs literarios
3. El rincón de las jovencitas literarias
4. La taberna de la lectura
5. Libros que voy leyendo
6. Papel en blanco
Las condiciones para dar los premios eran; citar a quien me lo ha concedido, poner la imagen del premio y que mis premiados no lo tuvieran ya, chicos, me avisáis y os cambio el sabor del helado.
Y por último, y si me permitís es lo más cotilla de todo, tengo que contar mi mayor sueño. Esto... la paz mundial no vale, no? Pues entonces dejar de madrugar me parece de lo más apropiado, sobre todo en invierno.
Un saludo a todos y gracias por pasar por aquí.
PD. Será por helados..
miércoles, 17 de agosto de 2011
Firmín. Sam Savage
"Mi devoración, al principio, era tosca, orgiástica, descentrada, cochina – me daba igual emprenderla a mordiscos con Faulkner que con Flaubert -, pero pronto empecé a percibir sutiles diferencias."
Casi todos los aficionado a la lectura nos sentimos irremediablemente atraídos por libros que hablan de libros. No esos que nos dicen lo libros que hay que leer para ser culto sino esos otros que hablan de cementerios de libros olvidados, de cazadores de libros perdidos o de lectores que hacen salir a los protagonistas de los libros que están leyendo. Así es como nos tropezamos muchas veces con libros como el que traigo hoy, Firmín. Es la ópera prima de Savage, un carpintero, pescador, tipógrafo y mecánico de bicicletas que suele olvidar decir que tiene un doctorado en Yale, un autor que pasó de ser desconocido a situarse en los primeros puestos tanto de venta como de críticos, cosa que hoy en día empieza a parecer misión imposible.
Firmín es una "rata de biblioteca", no de esas con gafas que salen en las películas de preadolescentes o de los que luego se convierten en salvadores de cine para más creciditos, no, ni mucho menos. Firmín es una rata de verdad, hijo más pequeño de una familia de 13 que nace en una librería. Es una rata parlante, que nos va contando su historia en primera persona.
Y..¿qué tiene una rata que habla para atraparnos? Porque dicho así, parece más un cuento infantil que una lectura para adultos. Casi dan ganas de reírse cuando alguien nos habla de semejante libro para recomendárnoslo. Pues tiene una larga historia contada de una forma soberbia que hace que nos metamos en la piel de su protagonista. Es una historia triste, de soledad, de incomprensión hacia su propia naturaleza reflejada de forma impresionante cuando Firmín se pone delante de un espejo y descubre su aspecto físico. Pero no pretende Savage hacernos pasar a su rata por humano, también la acompañamos en sus descensos a su condición animal. No pierde nunca su naturaleza y, hasta en eso logra el autor encontrar un punto de reflexión.
Hay mil y un referencias literarias y aún más reflexiones traídas directamente de la boca de este enamorado de la lectura que es su protagonista. También hay personajes humanos. Está el librero, como no, y un autor que, cuando uno cierra el libro lamenta que sea ficticio.
A lo largo de éste libro, que bien puede leerse del tirón por su tamaño, acompañaremos a Firmin en su alimentación a base de literatura, tanto en su estómago como en su cabeza, y haremos juntos un repaso por sus variados menús entre Steinbeck, Disney, Anna Frank, Henry James y tantos otros, que lo llevarán a una madurez intelectual más propia de un humano que de una rata. Lo cual, no tiene porque significar que le vaya a hacer la vida más fácil. Ni mucho menos.
Gracias
martes, 16 de agosto de 2011
Los tres mosqueteros. Alejandro Dumas
"-Ahora sólo queda saber nuevas de Athos - dijo D'Artagnan al fogoso Aramis, una vez que lo hubo puesto al corriente de lo que había pasado en la capital después de su partida, y mientras una excelente comida hacía olvidar a uno su tesis y al otro su fatiga.
-¿Creéis, pues, que le habrá ocurrido alguna desgracia? –preguntó Aramis-. Athos es tan frío, tan valiente y maneja tan hábilmente su espada...
-Sí, sin duda, y nadie reconoce más que yo el valor y la habilidad de Athos; pero yo prefiero sobre mi espada el choque de las lanzas al de los bastones; temo que Athos haya sido zurrado por el hatajo de lacayos, los criados son gentes que golpean fuerte y que no terminan pronto. Por eso, os lo confieso, quisiera partir lo antes posible.
-Yo trataré de acompañaros - dijo Aramis-, aunque aún no me siento en condiciones de montar a caballo. Ayer ensayé la disciplina que veis sobre ese muro, y el dolor me impidió continuar ese piadoso ejercicio.
-Es que, amigo mío, nunca se ha visto intentar curar un escopetazo a golpes de disciplina; pero estabais enfermo, y la enfermedad debilita la cabeza, lo que hace que os excuse.
-¿Y cuándo partís?
-Mañana, al despuntar el alba; reposad lo mejor que podáis esta noche y mañana, si podéis, partiremos juntos.
-Hasta mañana, pues - dijo Aramis ; porque por muy de hierro que seáis, debéis tener necesidad de reposo."
Ayer estuve en el cine viendo una película que, como siempre, empezó tarde. Me ponen bastante nerviosa los anuncios que colocan antes de las películas, y eso que, al menos en las salas que yo frecuento, parecen haberlos reducido. La cosa es que entre monos inteligentes y robots de peleas, cual fue mi sorpresa cuando asomaron ellos de sopetón. Ni siquiera sabía que hubiera una versión más y allí estaban con sus melenas, luciendo sus casacas y demostrando una vez más, no sólo la eterna broma de que para ser los Tres Mosqueteros lo primero que se necesita es ser cuatro, sino que el cine tenía, nuevamente, muchas papeletas para dejar mal esta obra maestra de Alejandro Dumas. Así que decidí traerlo a mi "estantería privada".
Todos sabemos lo que nos vamos a encontrar en esta obra. A D'Artagnan, un joven de 18 años hijo de un noble, además antiguo mosquetero, que disfruta de una pobre situación económica. Estamos, por supuesto, en Francia, durante el reiado de Luis XIII.
D'Artagnan se dirige a París con una carta de su padre para el jefe de los Mosqueteros y conocerá a los tres que dan título al libro, Athos, Porthos y Aramis. Viviremos sus aventuras y luchas contra los guardias del Cardenal Richelieu, la búsqueda de los diamantes de la reina, el rapto de Constanza, conoceremos a Milady...
Es un libro salpicado de acción que no por eso pierde su hilo principal, que sigue siendo el sueño del joven en convertirse en Mosquetero.
Es una alegoría a la amistad, la camaradería entre esos cuatro hombres que son capaces de darse por ayudar al compañero sin importar las pequeñas divergencias, nos lleva a ver una unión para asumir riesgos y disfrutar aventuras llevada por Dumas como nunca se había conseguido, y dudo que alguien lo vuelva a conseguir. A esto hay que unirle que, si bien otras veces he hablado de la animadversión que crean algunos personajes, en este libro Dumas consigue crear una suerte de vínculo con el lector que provoca la simpatía de sus protagonistas. Y, posiblemente sea ese vínculo el que ha conseguido más adeptos a la novela y más detractores a sus adaptaciones cinematográficas. Pocas veces se puede captar en una imagen la simpatía que destila un personaje, porque para cada lector hay un motivo concreto y eso hace imposible plasmarlo en una persona real.
Pero no penséis que todos los personajes son tan "blancos" como a primera vista pudieran parecer. Tenemos a D'Artagnan, claro, que nos lleva a su lado animándolo a conseguir, no sólo su sueño, sino el amor de Constance quien por cierto está casada, aunque claro, con un hombre cruel. Está el duque de Buckingham y su amor por la reina, capaz de arruinar su reino por ella. Aramis, mosquetero a la espera de ordenarse, que aún así mantiene relaciones amorosas secretas, mientras que Porthos sería un vulgar casanova de habernos sido presentado por cualquier otro autor. Y Athos, tan sensible que sigue sufriendo por la traición de su esposa a la cual, por cierto, mando ahorcar. Todos ellos son nuestros protagonistas que se divierten emborrachándose y desterraron el perdón de su vocabularios si no es para uno de su reducido grupo. Casi pareciera que hablo de un libro diferente, ¿verdad?
Y todo ello nos lo presenta su creador con total naturalidad, dando por sentado que entenderemos que son cosas de aquella época y aquel momento, generando una atmósfera de realidad que nos lleva a las calles de París direcamente. Realmente no hay necesidad de justificar nada porque, no sólo nos ponemos en su lugar para comprenderlos, sino que muchas veces los animamos en silencio mientras vamos pasando las páginas de la extensa novela. Escrita con tal brío y maestría que se nos acortan las horas hasta llegar a concluirla. Se nos mezclan personajes reales con imaginarios, Richelieu, Ana de Austria, el propio Luis XII, los mosqueteros, incluso D'Artagnan existieron realmente y la pluma de Dumas nos los perfila poco a poco hasta dejarnos asomar todos matices de cada uno de sus personajes sin pretender, en ningún momento, hacernos pensar que estamos ante un documento histórico.
Es, en definitiva, un libro apasionante que incluye amor, tragedia, intriga, aventura y unas buenas dosis de humor que ha pasado por delante de todos. Si pertenecéis a ese grupo que piensa que ya es como si lo hubiera leído solo puedo deciros que es una lástima, es un libro imprescindible.
Gracias
Por cierto...
"Todos para uno y uno para todos"
lunes, 15 de agosto de 2011
El jardín olvidado. Kate Morton
"- ¡Ajá!- exclamó una voz junto a su oído-. ¡Te encontré!
-El barril fue apartado y la pequeña parpadeó bajo la luz del sol.
Parpadeó hasta que el dueño de la voz se movió y bloqueó la luz. Era un muchacho grande, de ocho o nueve años, supuso-. Tú no eres Sally- dijo.
La pequeña negó con la cabeza.
- ¿Quién eres?
Se suponía que no debía decir a nadie su nombre. Era un juego que estaban jugando ella y la dama.
- ¿Y bien?
- Es un secreto."
Este es uno de esos libros que no me llaman la atención por su portada, pero empieza a resonar en la boca de la gente y a parecer en las listas de las librerías y, claro, te vas fijando.. Un día cojo un volumen y leo la contraportada y pienso: "pues no veo que aporte nada nuevo, es una historia bastante típica". Pero, al final, la curiosidad me vence y acabo llevándomelo para casa. Resulta sorprendente la cantidad de libros que acaban entre mis estanterías por ese motivo.
El libro empieza presentándonos a una niña en un muelle, está jugando con una misteriosa mujer que la abandona en un barco con destino a Australia, en vísperas de la Primera Guerra Mundial. Nos sitúa después en la vida de esa niña, Nell, el día de la fiesta de su mayoría de edad, que se entera de que es adoptada. Tiempo después de esa noche, se embarca en la búsqueda de sus antepasados para, en un último salto temporal colocarnos en la fecha de la muerte de esa niña y presentarnos a su nieta, Casandra, que recibe una herencia. Casandra recibe una cabaña y su jardín en Cornualles, que no esconde otra cosa que el secreto de aquella niña que conocimos en el muelle.
Es un libro que se va desarrollando en tres hilos definidos, cual puzle de fechas y acontecimientos vamos recorriendo momentos y ambientes que irán encajando para descubrirnos esos secretos. Tenemos tres épocas que van desde el Londres más pobre de principios de siglo, pasando por las mansiones de Cornualles y llegando a la ciudad de Brisbane, cada uno en un contexto temporal, no olvidemos que el libro termina en la actualidad. Tenemos, asimismo, tres protagonistas que tienen un rasgo común, son almas solitarias que buscan una respuesta a su pasado y, por lo tanto, pareciera que se buscan entre ellas para dar respuesta a ese misterio.
No cabe duda que es una historia clásica y con un corte previsible, sin embargo, su autora ha sabido darle el toque justo para hacerla lo suficientemente entretenida como para convertirla en firme candidata para casi cualquier lector que aspire a pasar un buen rato con una prosa de calidad. Procura mantener la atención en ese secreto que va usando como "pegamento" entre las historias muy bien entretejidas que, a ratos, nos dejan ese regusto a cuento de hadas que hace tiempo dejamos de lado a la hora de escoger nuestras lecturas.
Ya me contaréis vuestra opinión.
Gracias
domingo, 14 de agosto de 2011
El nombre de la rosa. Umberto Eco
"El día anterior, Bencio había dicho que con tal de conseguir un libro raro estaba dispuesto a cometer actos pecaminosos. No mentía ni bromeaba. Sin duda, un monje debería amar humildemente sus libros, por el bien de estos últimos y no para complacer su curiosidad personal, pero lo que para los legos es la tentación del adulterio, y para el clero secular la avidez de riquezas, es para los monjes la seducción del conocimiento."
Hoy estaba dudando entre la novela policiaca, la narrativa, la novela histórica, la gótica.. al final me dije, mejor todas ellas a la vez. y por eso traigo El nombre de la rosa.
Nos presenta Umberto Eco a Guillermo de Baskerville y su ayudante Adso, que tendrán que hacer de detectives para resolver crímenes en una abadía benedictina. Tal vez os parezca poco pero, si condensamos el argumento de toda la novela en una frase, sería ese. Por supuesto que El nombre de la rosa es muchísimo más, o no estaríamos ante una de las joyas de la literatura contemporánea. Ya se encargó de ello Umberto Eco al reconstruirnos entre sus páginas la forma de pensar y de sentir del siglo XIV. Nos da pinceladas de intriga, veremos a la Santa Inquisición y el miedo, unido sutilmente con una sentimiento aún más complicado que es la ausencia del miedo. Hay que decir, además, que en este libro tiene mucha importancia la figura de la biblioteca, ya que hay un libro en ella que es capaz de matar durante el transcurso de su lectura. Va cobrando poco a poco interés, ¿verdad? Es a partir de ese libro que el autor se permite jugar con conceptos complejos y es lo que hace su planteamiento realmente diferente y único.
No estamos ante una novela al uso, puesto que Eco alterna registros entre sus capítulos. Mientras va discurriendo la acción en la abadía, el autor nos intercala una suerte de pausas didácticas en las que nos va dando muestras de la cultura y la evolución de la iglesia y de los pensamientos. Os digo esto porque, si no se enfrenta uno a la lectura conocedor de este dato, puede que, debido a la fama del libro y las expectativas que se crean a su alrededor, le resulte lento e incluso tedioso a ratos. Por ese mismo motivo os recomiendo compraros un edición en la que hayan tenido a bien traducir los párrafos en latín que parecen estar puestos en los momentos más propicios para tener la tentación de saltárselos.
El nombre de la rosa es un título imprescindible para muchas bibliotecas y de obligada lectura para casi todos los aficionados a la misma. Con todo, y con todos, la majestuosidad del libro radica, no ya en la trama o en la forma de expresarse, sino en los ambientes que su autor recrea y que parece que nos van a engullir y colocarnos junto a Guillermo y Adso a cada página. Si lo habéis leído comprenderéis perfectamente a lo que me refiero, en caso contrario.. os recomiendo que vayáis probando.
Y, sin que sirva de spoiler, terminaré de hablar de este libro con su última frase
"Stat Rosa pristina nomine, nomina nuda tenemus"
De la rosa nos queda únicamente el nombre
Gracias
PD. Dice UmbertoEco que ha llegado el momento de reescribir esta obra. No para mejorarla o para complementarla, ni siquiera para hacer una segunda parte que, aunque no acierto a adivinar como podría existir una segunda parte, para eso está la mente del autor que va por delante siempre de la del lector. Pues no, esta vez, no. Lo que pretende hacer es convertirlo, y ahora entenderéis mi resumen de apenas poco más de una línea, en una novela de intriga en la que Guillermo y Adso queden reducidos a investigar unos crímenes. Y nada más.
Alguien debería de explicarle al señor Eco que un libro que lleva 30 años en el mercado y más de 30 millones de ventas y traducciones a casi 50 idiomas no necesita ningún retoque como si fuera una vedette que ha superado una edad. El público que ha consumido su libro no necesita que se lo simplifique y acerque, más bien al contrario, se sentirá insultado por el autor cuando le lea que lo hace comprensible.
Entiendo con esta afirmación que se va a dedicar a tachar todos los párrafos a los que hice alusión antes en los que nos va explicando y creando el ambiente en el que discurre la acción. Esos mismos que muchos aconsejamos a la gente que no se salte sino que busque sus significados. Tal vez la última frase del libro que os he mostrado antes, es la que da nombre al volumen. Y, precisamente por eso, no debería de tacharla de su manuscrito el autor.
Seguramente tendrá unas buenas cifras de venta y quedaré mal por expresar mi opinión tan abiertamente. En caso de confundirme, me retractaré. Pero hoy por hoy pienso que Eco no debería de retocar una obra como esta para acercársela a nadie. Tiene que haber libros de todos los temas y para todos los gustos y no me gustaría empezar una reseña de El nombre de la rosa diciendo.. "Hoy os traigo una novela de intriga..". Pero, en fin, no está en mi mano.
sábado, 13 de agosto de 2011
Relatos de sal. Francisco José Palacios Gómez
"La tierra le contó al extraño la historia de un pobre hombre, viudo, padre de dos hijas. La mayor de dieciséis años. La menor de cuatro. Un ente terrorífico había violado a la primera hasta la muerte, sin que el desafortunado pudiera hacer nada por ayudarla. Eso había hecho perder la cabeza al padre desesperado. Para evitar que a su hija menor le ocurriera lo mismo, desorientado, hundido en la locura, sumido en la depresión, la había enterrado viva en aquel parterre, "para que el ente no la encontrara", había mascullado. El extraño derramó varias lágrimas sobre el puñado de tierra. Luego, con gran esfuerzo, tiró la tierra sobre el parterre. "
El otro día me comentaba una persona que lo que tiene el verano no es sólo tiempo para leer como nos empeñamos en decir los aficionados a la lectura. En realidad se tienen tiempo para muchas cosas y todos esos libros sobrepasados de peso resultan un engorro para llevar de un lado a otro. Y no sólo eso, sino las historias largas y elaboradas que no terminan nunca y empiezas en vacaciones y se alargan durante todo el verano entre ratos de playa, se llegan a hacer tediosas . El verano, concluía esta persona, es el tiempo perfecto para los relatos. Que puedes leerte uno y acabar con buen sabor de boca sin tener cargo de conciencia por dejar al protagonista al borde de un precipicio cogido con tres dedos, como si fuera el final de un episodio de cualquier serie de acción.
Bien, supongo que también tiene razón, y por eso hoy traigo un libro de relatos. Se da además la casualidad de que estos mundos de internet siempre te sorprenden y tenía el libro en casa cuando ví asomar a su autor, al que miré con disimulo hasta comenzarlo pensando ¿ y si me gusta? o ¿y si no me gusta? En fín, que ya salí de dudas.
Normalmente, cuando compro un libro de relatos me entretengo un rato viendo los títulos y decido comenzar por aquel que más me atraiga o por el que da título al libro. En este caso, y cualquiera que me conozca mínimamente lo sabe, no podía hacer otra cosa que comenzar con Víctor, los pasos de la mosca. Ya sólo con verlo y recordar La Metamorfosis me pudo la curiosidad. Tengo que decir que no se parece en nada, si bien, como si el autor supiera que mi motivación para leerlo era esa, me hablaba de malformaciones físicas. Me encantó, empezaba justo donde muchos otros terminan sus historias y nos daba unas pinceladas rápidas antes de meternos en una lucha entre el bien y el mal que bien podía haber constituido por si sóla, el argumento principal de una historia más larga. Así que cerré el libro y me dije.. "venga, por el principio".
De la mano de Francisco José me dejé llevar por El destino del Dorio entre mitos para llegar otra vez a Victor, que confieso releí un párrafo sobre un parterre. Tras ver una lucha entre el bien y el mal me relajé un poco entre Hojas de plata tan etéreo como su título para embarcarme en el plato fuerte del libro, El último liberado. Este relato es el más extenso ya que consta de cuatro partes, en las que el autor se adentra en la ciencia ficción a través de una cuidada atmósfera. Otra vez estamos ante un relato lleno de fuerza que, por si solo, constituye una obra completa y al terminarlo, otra vez el autor da un giro al pasar a La herencia de los Condes de Villaperdida, colocándonos en un marco más realista de sopetón, presentándonos a un sacerdote y sus intrigas de poder.
Para finalizar, las dos últimas historias que componen el libro son El ángel del hielo y La gitana paya para concer a reyes y reinas y guerras incomprendidas.´Y todo eso, que no es poco, es lo que contiene este libro. Una historia nueva con cada título, un mundo diferente y sentimientos diferentes y, sin embargo, no provoca la sensación de caos al leerse en su conjunto que pudiera esperarse sino todo lo contrario. Mantiene una armonía en las formas, incluso en los fondos incluyendo en sus historias elementos que hace difícil sintetizarlas en pocas palabras. Es un libro, en definitiva, para leerlo. Pero, si os pasa como a mí, no podréis dar la razón a quien dice que los relatos son para el verano porque así no se tiene prisa por continuar con la siguiente historia, no me duró apenas nada porque pasado un punto me podía la curiosidad por saber dónde conducía el siguiente "viaje". Como véis, no siempre hace falta tener un protagonista colgando de un barranco para no poder cerrar un libro.
Gracias