lunes, 31 de agosto de 2020

Liberación. Imogen Kealey

 



    "Había sido una mala idea. Muy mala. Maldita sea. 
     Nancy cerró los ojos unos instantes, agachada tras los restos de un muro derribado, y respiró hondo. El olor de los edificios en llamas se le estaba instalando en la garganta, los ojos le escocían por culpa del humo y empezaba a notar calambres en los músculos después de pasar demasiado tiempo acurrucada en su estrecho escondite. Oyó con claridad las voces de la patrulla alemana que se le acercaba. 
     —Auf der linken Seite —indicaron. «En el lado izquierdo.»"

     Ya se acabó el verano, al menos para mi, y estamos de vuelta para comentar las lecturas a las que nos vamos acercando. Hoy, por ejemplo, traigo a mi estantería virtual, Liberación.
    
     Conocemos a Nancy Wake, una mujer australiana que ahora vive su amor con el empresario Henri en Marsella donde coquetean con la alta sociedad. Solo que Nancy colabora de forma activa con la resistencia ayudando, entre otras cosas, a sacar fugitivos de Francia. Mientras en una cara se casa entre botellas del más exclusivo champagne en la otra es el famoso "Ratón blanco" perseguido por la Gestapo.

     Empecemos por el principio: el Ratón Blanco existió. Era Nancy Wake, casada efectivamente por Henri y buscada por la Gestapo. Cuando su marido es atrapado por los alemanes ella consigue huir a  Londres solo para regresar con renovadas fuerzas a una guerra que ahora se ha convertido en algo personal. Solo que Nancy es una mujer. Las mujeres no luchan en guerras ni realizan sabotajes, no son ni siquiera bien acogidas por la mayor parte de los miembros de la resistencia. Nancy no solo se gana su puesto, también el respeto por su valor y coraje en un momento en el que todo el mundo necesita tener valor y coraje. Su lucha por la libertad, su enfrentamiento con el alemán que detiene a su marido y la forma en que se hace hueco entre los que se han convertido los suyos me ha parecido un ejemplo para cualquiera demostrando que no importa el sexo ni la procedencia cuando se trata de luchar por lo que uno cree.
     
     Los autores, puesto que Imogen es un seudónimo que esconde a un hombre y una mujer, consiguen que el lector se meta en la trama mediante pequeñas descripciones muy visuales consiguiendo eso que ahora se llama "lenguaje cinematográfico". En cuanto a los personajes, no se limita al enfrentamiento entre el alemán Böhm y Nancy, ni siquiera añadiendo las escenas y recuerdos con Henri. Los autores incluyen a otros como Tardivant, un joven de la resistencia al que vemos cambiar en su opinión hacia Nancy y como muestra su lealtad y sus demonios, o a Denden quien, si Nancy había tenido que luchar contra el hecho de ser mujer en una situación y época de hombres, se enfrenta al hecho de ser homosexual y las consecuencias de que ello pueda ser descubierto. 

     Así las cosas y sumados todos estos elementos y un buen puñado de escenas de acción, estamos ante una novela francamente entretenida protagonizada por una mujer admirable de cuya existencia yo no había tenido noticia hasta hoy.

     Liberación es una novela de luchas por la libertad, no solo la liberación de un país o el fin de una guerra, también hay luchas personales a las que vamos asistiendo. Me ha parecido una novela francamente entretenida que tenía, como valor añadido, el estar basada en personas reales-

     Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?

     Gracias.