lunes, 19 de febrero de 2024

Bajo tierra seca. César Pérez Gellida

 


    "Lo intenta, pero no logra que desaparezcan esos chillidos que se reproducen dentro de su cabeza. Tan agudos, tan estridentes, tan desesperados. 
     Le atormentan. 
     El hombre de la cicatriz en el rostro hace todo lo posible para no escucharlos, pero los oye como si fueran parte de su banda sonora vital. Tiene asumido que esos gritos le van a perseguir hasta el fin de sus días y, a pesar de ello, lo que le empuja a pensar que le convendría arrojarse a las vías del tren no es eso. Es tener la certeza de que si ella se lo pidiera de nuevo, volvería a hacerlo sin dudarlo. 
     Volvería a matar a sangre fría. 
     Volvería a desmembrar un cuerpo".

    Este años nos llevamos la sorpresa de que el Premio Nadal se lo llevaba la última novela negra de César Pérez Gellida. Hoy traigo a mi estantería virtual, Bajo tierra seca.

     La hacienda Monterroso ha ardido y su dueña, Antonio Monterroso, ha desaparecido. El caso llega alas manos de Gallardo y Pacheco unos investigadores dispuestos a no dar nada por sentado. 

     En esta ocasión el autor, conocido por distintas sagas de novela negra, ha viajado en el tiempo hasta situar la acción a principios de sigo, lo que unido a una ambientación polvorienta y ruda, hace que en muchos momentos la novela recoja ecos del western americano. Esto ya de por si es un punto a favor, ya que salimos de las ambientaciones típicas para adentrarnos en una historia que me ha hecho recordar la de aquellas mujeres que, convertidas en buscavidas, se trasladaban a Alaska detrás del dinero del oro. Con estas dos bases y teniendo claro que para encontrar a una mujer desaparecida hay que saber a quién se busca, Gellida construye un personaje inolvidable del que voy a tener mucho cuidado no decir una palabra de más ya que, lo mismo que si lo hiciera con la trama, os podría estropear la diversión de leer una historia que se va complicando a medida que la sangre salpica para terminar en una última parte llena de giros y sorpresas. Al personaje de Antonia lo acompañan su capataz, Padilla, y la pareja encargada de la investigación: Gallardo y Pacheco, cada uno con sus peculiaridades, de tal forma que el lector convertido en Pacheco intenta ir conociendo y comprendido a su particular superior. Todos ellos se ven rodeados por personas de altos y bajo status, carros, bares y una trama en la que el autor se ha encargado de que nunca dejen de pasar cosas para que el lector sienta una curiosidad que se va tornando avidez a medida que restan páginas para llegar a la conclusión.

    Es evidente que no voy a hablar de la conclusión. Solo decir que fiel a lo que el autor tiene acostumbrados a sus lectores, se trata de un final rápido y es que Gellida no sacrifica el ritmo en sus novelas suceda lo que suceda, lo que ha provocado que su número de lectores siga aumentando mientras le reclaman que escriba a la misma velocidad a la que ellos lo leen.

     Bajo tierra seca es una novela entretenida, con todo lo bueno que eso tiene, en la que sumergirse durante unas horas sabiendo que es fácil que se llegue tarde a más de un sitio por el placer que arañarle al tiempo un capítulo más.

     Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?

     Gracias.

3 comentarios:

Marita AA dijo... [Responder]

¡Hola! Lo que más me llama la atención de esta novela es la ambientación. No he leído nada del autor, por lo que esta novela, sería un buen comienzo. Gracias por la reseña. ¡Besos!

Margari dijo... [Responder]

Pinta bien pero tengo varias novelas del autor pendientes, que leí su primera trilogía, que me gustó mucho pero luego no he vuelto a hacerle hueco, pese a que tengo libros suyos en la estantería pendiente. A ver si me animo.
Besotes!!!

Paseando entre páginas dijo... [Responder]

1. "El caso llega alas manos"
2. "hasta situar la acción a principios de sigo"

No estabas muy fina ese día, ¿no?

Por lo demás, la reseña está bien, aunque el libro no me llama lo suficiente la atención.