miércoles, 24 de junio de 2020

Cartas a un joven novelista. Mario Vargas Llosa


     "Éste no es un manual para aprender a escribir, algo que los verdaderos escritores aprenden por sí mismos. Es un ensayo sobre la manera como nacen y se escriben las novelas, según mi experiencia personal, que no tiene por qué ser idéntica ni siquiera parecida a la de otros novelistas".
     Los libros sobre literatura forman un género en sí mismos. Parece una tentación irresistible para cualquier escritor que se precie contarnos lo que lee, como escribe y también quiénes fueron sus maestros. Y la tentación es recogida por los lectores e incluso por otros escritores. Hoy traigo a mi estantería virtual, Cartas a un joven novelista. 

     Si En la verdad de las mentiras, Mario Vargas Llosa hacía un repaso sobre su propio canon literario del siglo, aquí se dirige a una suerte de corresponsal o receptor imaginario para hablarle de literatura, escribir, crear y sentimientos. A caballo entre un sencillo ensayo y una novela epistolar, Mario Vargas Llosa da teoría literaria a la vez que establece una serie de referentes que son imposibles de obviar para un lector que se sentirá irremediablemente atraído por la idea de seguir la lista de lecturas propuestas por el autor. Para él, el novelista no solo es feliz escribiendo, sino que su labor va mucho más allá cuando le deja a un mundo incompleto las fantasías que, de haberlo completado, le hubieran otorgado un status superior. Nos habla también de la importancia de las palabras y yo recordaba al leerlo eso que se dice sobre la existencia de las cosas en la medida en la que se les pone nombre. Vargas Llosa va un punto más allá otorgando al conjunto lingüistico la importancia de un mundo completo, y se entiende cuando el autor se dedica precisamente a completar mundos mediante el uso de las palabras. Mundos que, aunque para nosotros ya existan cuando se refieren a personajes que se han entrelazado con la realidad hasta tal punto que ya nos tenemos asumidos, son una ficción. A quién no le sucede que no concibe el mundo sin el Quijote cuando en realidad el mundo se concibió precisamente, sin él. Por lo tanto, yo concluía esta parte preguntándome cómo se concibe el mundo sin escritores.

      Decía antes que los lectores nos sentimos atraídos por este tipo de preguntas que nos cuentan cuáles fueron las inquietudes de nuestros escritores favoritos, sus comienzos y sus márgenes, pero lo mismo les puede suceder a otros escritores. Y es que, como dice el propio Vargas Llosa, a él mismo le hubiera gustado poder escribir a alguno de los escritores que admiraba cuando estaba comenzando para haberle preguntado sus dudas, haber seguido su camino en un intento de encontrar el propio. Y así avanzamos con ideas que, compartidas o no, otorgan una visión más ámplia del mundo literario, por capítulos dedicados a responder distintas preguntas tan importantes como genéricas. Él se reconoce como un rebelde del mundo y quizás por eso reconoce cada pedazo propio vertido en sus libros y es que no hay libro que no beba de la vida de su autor y quizás por eso sea vital vivir en ese mundo imperfecto ante el que se imponen mediante la ficción. La importancia de la coherencia, del estilo, el espacio, las lecturas que lleve a sus espaldas el propio escritor... nada escapa a las preguntas imaginadas y tampoco a las respuestas vertidas en este librito corto más que necesario, interesante.

     Cartas a un joven novelista es un libro más que recomendable sobre el oficio de escribir, pero también sobre el interior de quien lo hace.

     Y vosotros, ¿sois lectores de libros intraliterarios?

     Gracias.

9 comentarios:

CHARO dijo... [Responder]

No es novela para mí....Ahora estoy metida en el lío de la rima Jotabé para aprenderla y estoy leyendo poemas con esta rima.Besicos

Margari dijo... [Responder]

Interesante. No conocía este título que nos traes hoy, así que tomo buena nota.
Besotes!!!

David Rubio dijo... [Responder]

Un libro al que le tengo echado el ojo desde hace tiempo. Siempre me gusta leer obras de "cocina narrativa" y este es uno de esos clásicos. A ver si cae este verano. Saludos!

Lonely Books Club dijo... [Responder]

¡Hola! Vargas Llosa es un escritor al que siempre he querido leer, pero por el momento todavía no he tenido oportunidad. Aunque seguramente empiece por alguna de sus novelas más conocidas, la verdad es que este libro tiene una pinta increíble para aquellos a los que además de leer disfrutamos de la escritura como hobbie, así que me lo llevo conmigo.

¡Nos leemos!

Neftis dijo... [Responder]

Me alegro que te haya gustado pero lo voy a dejar pasar que no me termina de convencer.

Saludos

Shorby dijo... [Responder]

Me da un perezón este hombre... pero tremendo... igualmente me gustaría leer algo suyo en algún momento.

Besotes

Rachelín The Cure dijo... [Responder]

¡Hola!
He leído muy poquito de Vargas Llosa, básicamente en la uni, y sí que recuerdo que flipé con La casa verde, pero esto de que sin querer mezclas escritor y obra..., es que no puedo con este señor; aunque me llama muchísimo el libro. No te digo que no lo vaya a leer, seguramente si se me pone a tiro lo haga.
Y sí, me gustan los intraliterarios, ya ves. Tengo unos cuantos en casa XD
¡Un saludo!

Paseando entre páginas dijo... [Responder]

Hum, pues me dejas indecisa, me gusta este género, pero tengo varias recomendaciones tuyas pendientes y este no me termina de convencer. Lo pensaré.

Pablo Martín Carbajal dijo... [Responder]

Lo leí en su día, cuando empezaba a escribir, un ensayo que me aportó bastantes cosas en el oficio de escritor. De hecho, en mi primera novela, un recurso explicado en ese libro me ayudó a enriquecer la misma. Así que siempre estará agradecido por ello.