lunes, 13 de junio de 2022

Las chicas de Chapel Croft. C. J. Tudor

 


     «¿Qué clase de hombre soy?». 
      Era una pregunta que últimamente se había planteado muchas veces. 
      «Soy un ministro de Dios. Soy su siervo. Hago su voluntad». 
      Pero ¿era suficiente? 
      Se quedó mirando la casita encalada. El tejado de tejas rojas, las clemátides de llamativo color púrpura trepando por las paredes, bañadas por el atenuado resplandor del sol del final del verano. Los pájaros piaban en los árboles. Las abejas emitían su perezoso zumbido entre los arbustos. 
      «Aquí habita el mal. Aquí, en el más inocuo de los escenarios»".

     Siguiendo con las lecturas veraniegas, y tras haber leído el año pasado El hombre de tiza, hoy traigo a mi estantería virtual, Las chicas de Chapel Croft.

     Conocemos a Jack Brooks, reverendo, y su hija Flo cuando son trasladados a la pequeña localidad de Chapel Croft de forma casi urgente tras protagonizar un escándalo en Nottingham. Llegan a una casa vieja y destartalada y una iglesia aún más destartalada en la que alguien ha dejado un equipo de exorcismo para Jack. Además, no tardan en ir descubriendo detalles del pueblo: allí nos son particularmente bien recibidos los forasteros, guardan leyendas locales basadas en macabros hechos reales y el anterior párroco... bueno, intentó quemar la iglesia y se suicidó.

     Con estos ingredientes y la primera sorpresa, que no me parece más que una nota graciosa pero no desvelaré, en las primeras páginas, Tudor busca con este título proporcionar un rato entretenido a sus lectores con una novela en la que, lo único destacable realmente, es su protagonista Jack. Hay, como es de esperar, un ambiente opresivo, una familia poderosa y muchas sospechas y secretos velados y desvelados esperando al lector a vuelta de página, lo que convierte la lectura en algo dinámico y a ratos divertido. El lector se mueve además con la historia de un hombre que sale de prisión y que se quiere incorporar a la vida de Jack sin saber muy bien de quién se trata o de qué forma estuvo implicado en la historia de los protagonistas de la novela, por lo que el interés, en caso de engancharse, es fácilmente sostenible. Al igual que en la novela anterior, hay un deje paranormal que impregna el libro desde las primeras páginas, aunque sigo sin ver parecido alguno con Stephen King (pese a que él mismo dijera que se parecía en su primera novela).
     La autora se dedica a cargar tintas progresivamente a golpe de sorpresas y voces, con tramas a medio desvelar y secretos totalmente desvelados, de tal forma que los giros se convierten en una constante en esta novela que se queda en un punto intermedio entre el misterio, el suspense y el terror más light.

     A título personal me ha parecido, posiblemente debido al carácter de Jack, que ya he dicho es lo mejor de la historia, que el vínculo Jack/Flo, su historia, su relación y la forma que tienen de protegerse y enfrentarse es de los puntos más interesantes de la novela. Una relación que ni siquiera la avalancha de temas logra opacar ya que ocupa el punto central en torno al que todo lo demás sucede. El resto tiene puntos fuertes y débiles en los que la credibilidad se tambalea por momentos, el cliché hace acto de presencia y el lector sonríe pasando página pensando que ahora sucederá otra cosa sin darle más importancia.

     Las chicas de Chapel Croft es una novela entretenida, bastante superior a El hombre de tiza, que busca hacer pasar un buen rato y en la que destaca el dúo protagonista. Producto de consumo.

     Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?

     Gracias.

4 comentarios:

Margari dijo... [Responder]

Pues pinta bastante entretenida. Tomo buena nota.
Besotes!!!

Lady Aliena dijo... [Responder]

Esta vez no me atrae. Estoy terminando "El oro del rey", de Pérez- Reverte.
Besos.

Yasmine dijo... [Responder]

thank you very much sis. the article is very interesting and informative..

buhoevanescente dijo... [Responder]

E s el que mas me gusta de la autora😊📚📚📚