jueves, 2 de agosto de 2018

La desaparición de Josef Mengele. Olivier Guez


     "El North King surca el agua cenagosa del río.Los pasajeros, que han subido a cubierta, escrutan el horizonte desde el amanecer, y ahora que las grúas de los astilleros y la línea roja de los tinglados perforan la bruma, unos alemanes entonan un canto militar, unos italianos se presignan y unos judíos rezan, pese a la llovizna, unas parejas se besan, el trasatlántico arriba a Buenos Aires tras una travesía de tres semanas. Solo en la borda, Helmut Gregor cavila".

     No sorprendo a nadie si digo a estas alturas que me interesa el tema de la Segunda Guerra Mundial. Por eso, hoy traigo a mi estantería virtual, La desaparición de Josef Mengele.

      Josef Mengele no necesita presentación. Es uno de los nombres asociados al terror en los campos de concentración, uno de los monstruos de nuestra historia moderna que segó miles de vidas sin pestañear. Y sin embargo, escapó. Su cuerpo fue hallado sin vida en una playa de Brasil en el año 1979. Se sabe que llegó a Argentina en el año 1949 y poco más de los treinta años que suceden entre ambas fechas. En este libro de ficción histórica, Olivier Guez reconstruye esos años de escondites, reuniones clandestinas, aliados y huidas.

     La Segunda Guerra Mundial es un tema recurrente en la literatura, tanto como que lo protagonicen las víctimas. Historias de supervivientes o de quienes no lo consiguieron, amores truncados o reencontrados, lo cierto es que los estantes de las librerías están llenos de estas voces. Olivier Guez opta en su novela por dar voz a el ángel de la muerte, Josef Mengele. Un nombre conocido por todos y una vida llena de muerte y terror sobre la que Guez ha realizado una amplia labor de investigación y ha llegado a cubrir las lagunas con una ficción que se entrelaza perfectamente con la historia haciendo dudar al lector del punto en el que realidad y ficción se separan.
La novela no se despega en ningún momento de esta figura, dándonos una visión parcial de lo que era para este hombre la sociedad lationamericana e incluso la vida en la época de Perón, haciéndonos partícipes de una sociedad escondida en la que se seguían moviendo impunemente estos monstruos que supieron encontrar un sitio en la sociedad en el que ascender en la sombra. De este modo lo acompañaremos a lo largo de sus mudanzas, y también en sus recuerdos, una parte que está magníficamente plasmada. Y es que, la Guerra, los campos de concentración y sus horrores, no fueron lo mismo para este hombre que para quienes los padecieron, dando lugar así a algún pasaje nostálgico en el que el protagonista recuerda buenos tiempos allí pasados con su esposa, capaz de poner los pelos de punta a cualquier lector.
Es también interesante ver que, en aquel momento, Mengele no era conocido ni apreciado por su terrible labor. Era un médico nazi y poco más, con una hoja de servicios que no brillaba frente a la de algún expatriado con el que coincidió en reuniones. Guez no deja nada por relatar, y hace un retrato interesantísimo del carácter del protagonista, y también de la sociedad del momento tanto en latinoamérica, necesitada de profesionales a los que no preguntaba demasiado, como a algunas personas de la propia Alemania. Y asistimos así a la gran tragedia de Mengele, que llega a sentirse estafado, engañado mientras que el lector tiene una perspectiva más amplia del cambio que se ha producido en la sociedad en los últimos cuarenta años respecto a este tema.

     La desaparición de Josef Mengele no solo es un gran libro, también es una historia necesaria. Porque las sociedades avanzan superando las heridas del pasado y si olvidamos estas heridas, tal vez no seamos capaz de avanzar. Además el autor evita deliberadamente un tono ensayístico, y casi también el histórico convirtiendo la novela, a grandes ratos, en una suerte de negra aventura que hace muy amena la lectura.

     Y vosotros, ¿sois "lectores de guerras"?

     Gracias.

12 comentarios:

Lady Aliena dijo... [Responder]

No soy para nada lectora de guerras, y mucho menos si tienen que ver con los campos de concentración. De todas formas, gracias por la reseña. Un beso.

Carla dijo... [Responder]

No tiene mala pinta, estos libros me parecen necesarios, no lo descarto
Besos

CHARO dijo... [Responder]

Siempre me ha interesado mucho la segunda guerra mundial y este libro me resulta muy interesante.Besicos

Mi Álter Ego dijo... [Responder]

No suelo leer nada relacionado con guerras pero tal vez me acerque a este libro. Besotes!!!

Margari dijo... [Responder]

Sí, también soy de las que me gustan leer libros de esta temática. Así que me la llevo bien apuntada, que no la conocía.
Besotes!!!

Anabel Samani dijo... [Responder]

Hola de nuevo, Mientras Leo :-)
La verdad es que en este caso creo que preferiría un libro de no ficción. Gracias por la reseña ;-)
Un beso.

J.P. Alexander dijo... [Responder]

No creo que lo lea y no es uno de mis géneros favoritos

Buscando mi equi..... visa dijo... [Responder]

Hala que buenísima pinta..... La temática me encanta pero si además, se habla de personajes reales, entonces ya me cautiva más. Se agradece de hecho que no lo haya en tono ensayístico, como dices, porque si no, seguramente, me resultaría del todo aburrido.
Besos.

Ariel dijo... [Responder]

Me parece muy interesante. También soy muy aficionado a esta temática, de hecho uno de mis libros preferidos es Las Benévolas de Jonathan Littell.

Besos

Marita AA dijo... [Responder]

¡Hola! Este libro se ve muy interesante y como bien dices, es necesario mantenernos informados, conocer más de la historia y así, no cometer los mismos errores. Sin duda, una lectura imprescindible que espero leer pronto. Ya te sigo y espero leernos siempre. Estupenda entrada. ¡Un abrazo!

Shorby dijo... [Responder]

Uy, este lo tenía fichado ya. Le tengo muchas muchas ganas =)

Besotes

Paseando entre páginas dijo... [Responder]

Pues esta vez sí que me tientas. El tema de la segunda guerra mundial me gusta mucho y ya he leído alguna otra historia en la que aparece este personaje, pero de refilón. No tenía ni idea de que había escapado, así que me parece muy interesante. Si a eso le sumamos el tono que comentas que tiene la historia, podría gustarme. Lo pensaré.