"Claudia caminaba con cuidado para no resbalar con las placas de hielo. A causa del temporal de nieve, casi no había camiones descargando en el muelle y el mercado estaba sumido en un silencio impropio de aquellas horas de la madrugada en las que solía palpitar con más fuerza que nunca. Cualquier otro día se habría sentido desanimada al pensar en lo larga que se haría la noche sin apenas trabajo, pero agradeció tener un poco de tranquilidad para poner en orden sus pensamientos."
Hace unas semanas presté un libro a un amigo. Ya he comentado alguna vez que prestar libros es algo que me cuesta, sólo lo hago con un puñado de gente. Esta persona cuida siempre mucho de sus libros, los procura dejar en casa salvo que la historia le guste especialmente y, precisamente por eso, me lo devolvió con una sonrisa de disculpa. Había protegido el libro con forro escolar para preservarlo de cualquier golpe que pudiera llevarse en el trabajo. Nada que disculpar, por supuesto, más bien al contrario este gesto anecdótico posiblemente diga mucho más del interés que le despertó esta historia que cualquier cosa que yo vaya a poneros a continuación. Pero un poco por ella, hoy traigo a mi estantería virtual, Jugando con fuego.
Os presento a David y a Claudia, dos adolescentes con vidas distintas, uno la ve truncada en un giro del destino y otra mantiene un curso más o menos errático. El azar hará que se encuentren quedando vinculados sin importar el tiempo que pase.
Hace unos años Cristina Caviedes viajó a Inglaterra, con poco equipaje, nada de libros puesto que pesan. vivía en un estudio en el que, sin pc ni máquina de escribir, empezó a forjar una idea con la que llenaría cuadernos. La semilla de una historia de la vida, la tuya, la mía, la de un vecino... una de esas historias que nos suenan y nos resultan extrañas a un mismo tiempo. Tal vez observando compañeros, pensando en qué harían o quienes serían, el caso es que volvió con este libro.
Nos cuenta una historia que mucha gente podría denominar marginal, pero no necesita para ello meterse en barrios malos y familias desarraigadas. No busca la justificación de sus personajes ni en su entorno ni en sus necesidades, más bien al contrario. Son adolescentes normales que prueban las drogas y se ven atraídos por el dinero fácil que pueden proporcionarles entrando en una espiral de la que muy pocos salen. Así es el grupo de nuestro David. Jóvenes de familias medias que "juegan" en mundos peligrosos sólo por conseguir lo que ellos consideran respeto y unos cuantos caprichos caros. Un mundo que pasa factura de forma implacable, del que nadie sale ileso porque todo el mundo se acaba convirtiendo en uno de "ellos".
A través del grupo de David encontramos a Claudia, la joven que enamorada ve el peligro que acecha tras el chico y que, lejos de la visión romántica hacia el chico malo, busca en una cordura no del todo madura una solución que la mantenga junto a él.
Consigue Cristina con un lenguaje sencillo que nos creamos la historia como cierta, una historia de dos personas que viven una difícil relación en la que la confianza juega un papel importantísimo. No hay héroes ni antihéroes, no se trata de buenos y malos, sino del paso por compañías e institutos que cualquiera ha podido ver u oir pero que, realmente, nos quedan lejos a muchos como para ver en profundidad a las personas que las protagonizan.
Nos cuenta la historia en dos tiempos, vemos por tanto el lugar en el que se van a encontrar ahora nuestros personajes. Y lo hace sin forzar, con saltos tímidos que no restan interés a lo que les ha traído hasta el presente. Más bien al contrario, queremos saber a dónde van hoy y, sobre todo, necesitamos saber el motivo de ese salto en el tiempo. Y no nos defrauda la autora, resolviendo todas las dudas que se no han podido plantear.
Un libro que se mueve en la clase social que suele ser olvidada por la literatura, que mantiene el interés y que nos lleva por caminos tortuosos de una forma y sin trucos efectistas para impactar al lector. Porque muchas veces, la vida de una persona puede verse afectada por un gesto muy simple y con ello desbaratarse. Y cuando se nos va de las manos el rumbo empezamos a jugar con fuego, y es muy difícil tropezarse con otro momento que nos haga darnos cuenta. En definitiva, una historia de la calle.
¿Os gustan este tipo de historias "de la calle"?
Gracias
46 comentarios:
Me hago una idea de lo que puedo esperar el libro y que merece la pena. Pero esta vez lo dejo pasar, porque no me apetece estos ambientes marginales, de cruzar la línea, en un ambieente de jóvenes. Si fuese profesora me interesaría muchísimo.
Abrazos
A mí me gustan casi todas las historias siempre que estén bien contadas y que me las crea, y parece por tu reseña que Cristina lo consigue. Yo también tengo manía con los libros pero no sé decir no y cuando me los piden los presto aun sabiendo que muchos no son especialmente cuidadosos, pero bueno, soy así, qué le voy a hacer.
MADRUGADORAAAAAA- BESOS AMORRRR
A ver si me estreno con esta autora, que tengo curiosidad.
Lo lei hace unos meses y me gustó mucho, la historia engancha desde el principio y refleja bien la realidad
besos
No especialmente. Pero no por la clase social ni mucho menos, sino porque el "yo actuaría así en vez de así" siempre lo tengo presente. Un gran defecto, también llamado "yoísmo" jejeje
Muchos besos
Lupa
Lo leí hace poco menos de un mes.
Es un libro totalmente realista, te muestra la conducta de las personas en determinadas situaciones: lealtad y traición en el mundo de las drogas, amor y dudas hacia amigos y familiares... Las conversaciones eran totalmente reales. Son detalles que me gustaron mucho.
Sin embargo, la falta de descripciones calaron muy ondo en mí, y provocó que el libro fuera entretenido y poco más...
Saludos ;)
¡Una reseña cautivadora e inspiradora! Me "empujas" a leer este libro, aunque antes no lo planteaba porque pensaba que estábamos ante una novela juvenil. ¿Es así? ¡Gracias!
Ya lo tenía apuntado por la reseña que hizo Tatty, pero tengo tantos pendientes que no sé cuando le llegará el turno. Estupenda reseña. Un beso
@Offuscatio
No soy yo muy de novela juvenil y está que puede empezar pareciéndolo se va desmarcando de los tópicos que cumplen este tipo de novelas. Es más reflexiva sobre la juventud de hoy y los caminos que toman que juvenil, presentándonos un grupo protagonista en el que podemos ver casi cada uno de los "tipos de adolescentes" de hoy.
Como te digo, más un retrato sin llegar al extremismo de barrios marginales que muchas veces en su lectura nos quedan desconectados por la lejanía.
Un beso
Si me gusta este tipo de historia de la calle,refleja todo cuanto nos rodea.
Beos y buen jueves!!!!
Parece una historia que va más allá de los tópicos del género, por lo que seguramente le daré una oportunidad. 1beso!
Le tengo muchísimas ganas a esta escritora.
Había pensado empezar por Historias de una Gaviota pero lo que has contado de este libro me llama mucho.
Sí que me gustan las “historias de la calle”, así que, aunque empiece con el de relatos, seguro que lo leo.
Besos
Muchísimas gracias por la reseña, me ha encantado, de verdad... y a todos gracias también por vuestros comentarios. Hace ya 13 años desde que escribí este libro y tal y como se narra en la reseña, lo hice en un cuaderno, sin plantearme siquiera que algún día lo publicaría, así que cada comentario, cada opinión, es fundamental para mí. Me hace darme cuenta de si he evolucionado, si ahora mismo lo enfocaría de otra manera, si por ejemplo sería buena idea, como han comentado por ahí, añadir más descripciones... Son ideas, fantásticas, que me ayudan un montón a mejorar.
¡Besos!
Me ha gustado mucho tu reseña Sílvia. me apunto el libro.
Un beso.
Como he podido estar tantos dias sin leer tus entradas, ya tenía mono. Encantada de volver a leerte, me apunto el libro. Un besazo.
Amiga Silvia; no existe esfera social que escape a este problema, si bien son distintos los motivos; pero como dice el refrán:aquel que juega con fuego se suele acabar quemando.
Besosd
Sí me gustan las historias 'de la calle'. Precisamente, disfruto más por ejemplo con novelas policíacas al estilo de las de Juan Madrid o Francisco González Ledesma porque son más de 'barrio', de la calle. A veces me harta que todos los novelistas se afanen en contextualizar todas sus novelas en ambientes selectos y refinados, o que si comienzan en mundos no muy agradables, al final todo protagonista acabe rodeado de fortuna por uno o varios golpes de suerte.
Un beso.
Oiii que monoso tu amigo!!! Me ha parecido muy tierno el detallito de forrar el libro jeje Pues a mi este tipo de historias si me suelen gustar así que lo ficho ^^ Un beso!
Pues la verdad es que las historias de calle no me llaman mucho. Por otro lado, hace nada terminé uno de Galdós y ahora mismo me sale el realismo por las orejas xDD Me ha gustado el comentario respecto a prestar libros. Es cierto que es algo que sólo se puede hacer con muy pocas personas. Un besito!
¡¡Hola!!
A mí no me llama mucho la verdad, no me gustan mucho este tipo de historias.
Gracias por la reseña.
Un beso!
Pues bueno, sobre el temita de prestar libros, mejor no hablamos, sobre todo si no son tuyos. Se puede liar y gorda...
Las historias de la calle, verás, están ahí y sólo hace falta echar un vistazo a los noticiarios, periódicos e incluso comentarios en la cola sel súper: es un tema sórdido, dramático y, por desgracia, demasiado actual. Pero no, no me gusta leer sobre ello.
Un beso
Interesante. aunque para ser sincero, tal vez este no sea el tipo de libro que me interesa en este momento.
Gracias Mientrasleo.
Si, me suelen gustar este tipo de historias y a este libro lo tengo en el punto de mira desde hace tiempo.
Un beso!!
Me gustan todo tipo de historias, siempre que esteén bien escritas y tengan interés. Y estas por supuesto también.
Lo que no puedo es dejar libros. Lo siento, a mí ya no me vuelve a pasar lo de que me los pierdan o me los devuelvan en peor estado que se fueron. Es superior a mis fuerzas.
me gusta cuando tiene ritmo y no decae la llamada de atención a mi interés.....Escribir bien es un don...Un abrazo
No sabía bien de qué trataba el libro y creo que me gustará.
Buenos días.
Lo leí muchas gracias y me gustó la historia, me pareció que tenía mucha fuerza y mucho más que contar.
Buen día.
No es un estilo que lea a menudo, pero si la historia es buena si que me gusta. No me importaría darle una oportunidad.
Yo también tengo mucho ojo de a quien le prestó los libros, pero por otra parte me encanta prestarlos y que luego me digan que lo han disfrutado.
¡Un beso! :)
Jo, y con una reseña así, prácticamente que me obligas a leerlo! La verdad es que me ha parecido bastante interesante, así que veré si lo leo a la brevedad.
En cuanto a tu pregunta, sí, me gustan ese tipo de historias. He leído unas cuantas, y creo que son muy reales y me llegan bastante.
Tu blog es precioso, así que te sigo. Espero verte por el mío algún día!
Un abrazo.
¡Gracias por la aclaración! Si es así creo que podré pensar en leérmela algún día. Lo cierto es que nunca me he apuntado a los sorteos organizados por Cristina, porque temía que no me gustara; pero ahora no lo tengo tan claro :)
La verdad es que si, me gustan ese tipo de historias. Ya lo tengo en PDF gracias a la amabilidad de la autora, pero lamentablemente aún no he tenido la oportunidad de leerlo. Me parece que si lo leo en la computadora no lo disfrutaré como es necesario puesto que no me gusta leer en la pc, por eso es que quiero un lector electrónico.
Ya veremos.
Saludos.
No conozco a la autora y la buscaré, pues si me gustan este tipo de libros, que retratan la realidad de la calle de las ciudades... quién dice que la realidad es una burbujita perfumada y color de rosa. Bueno, si hay muchos superficiales.
Veo que te ha comentado Cristina, así que dos besos grandes entonces, uno para cada quien.
Una gran reseña. Lo leí hace un tiempo y me gustó mucho. Cristina ha descrito una realidad sobre las drogas y los jóvenes de una manera fantástica.
Besos
Ya lo leí en el blog de Tatty pero...mmmm...no sé, no sé, no acaba de convencerme. Para otra ocasión. bss
La verdad es que este tipo de historias no me llaman mucho.
Besos.
Me leí Historias de una gaviota, de esta misma autora, pero este todavía no ha habido ocasión...
Besos,
Muy buena reseña de un buen libro. Me gustó mucho la manera en que Cristina nos cuenta esta historia. Una historia muy cercana, muy sencilla, muy real.
Besotes!!!
Gracias por pasarte, y por tus palabras!
Obvio que te sigo, y te leo.
Como siempre, disfruto con tus reseñas. Estupenda, pero necesito tiempo!!! Un beso.
Según me parece que vale la pena leerla ya me haré un tiempito. Un beso y te deseo un buen fin de semana
A mi me encantan estas historias. Lo que pasa es que yo aunque seguramente no me sienta en la piel con muy cercanas, y pienso que a día de hoy la juventud se sentirá mucho más identificada con esta historia.
Besos
A mí sí suelen gustarme, y leyendo tu reseña me venía a la cabeza el "Rebeldes" de Hinton. Lo leí también muy joven y fue una novela que me marcó bastante.
¡Besines!
Pues ya tocará leerme algo por ahí...uno más a la lista T_T no acabaré jamás, jaja, pero lo disfruto, besos
No tengo perdón, pero todavía lo tengo pendiente... ¬¬
Besotes
Dentro de poco caerá, lo tengo pendiente :)
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