martes, 4 de octubre de 2011

Otra vuelta de tuerca. Henry James



     "La historia nos había mantenido alrededor del fuego casi sin respirar, y salvo el gratuito comentario de que era espantosa, como debe serlo toda narración contada en vísperas de Navidad en un viejo caserón, no recuerdo que se pronunciara una palabra hasta que alguien tuvo la ocurrencia de decir que era el único caso que él conocía en que la visión la hubiera tenido un niño. El caso, debo mencionarlo, consistía en una aparición en una casa tan antigua como la que nos acogía en aquellos momentos, una aparición terrorífica a un niño que dormía en el mismo cuarto que su madre, a quien despertó aterrorizado; pero despertarla no disipó su terror ni lo alivió para recuperar el sueño, sino que, antes de haber conseguido tranquilizarlo, también ella se halló ante la misma visión que había atemorizado al niño. La observación dio lugar a que Douglas replicara -no de inmediato, sino más avanzada la velada- algo sobre cuyas interesantes consecuencias quiero llamar la atención. Otra persona contó otra historia, no demasiado impresionante, y vi que Douglas no la seguía. Entendí que eso indicaba que Douglas tenía algo que contar, con tal de que esperásemos. En realidad, esperamos hasta dos noches después, pero en aquella misma velada, antes de separarnos, Douglas dejó entrever lo que estaba pensando."


     Hagamos como en el comienzo del libro, nos sentamos. Nos disponemos a oir una de esas historias que tanto gustan a adolescentes y que hizo clasificar a esta como literatura juvenil unas cuantas veces, historias de fantasmas. Pero nos nos confundamos, no es una historia de fantasmas simplemente, es una historia perturbadora con fantasmas interiores que nos intranquilizan y exteriores que son conscientes de su propia existencia y que intranquilizan a quienes los ven, o tal vez más a aquellos que no lo hacen. Leamos en definitiva, Otra vuelta de tuerca de Henry James.

     El libro nos cuenta la historia de una institutriz que acude al cuidado de dos niños.  Estamos en una magnífica mansión victoriana en la que, poco a poco la historia se vuelve mucho más inquietante. Los niños a los que cuida no son simples niños inocentes sino que han tenido que aistir a unos sucesos bastante perturbadores. Los que relacionan a su tío, su anterior institutriz y un criado.Vamos asistiendo a la marca que les deja la vida con ellos y su repentina muerte y como la nueva institutriz en su intento por ayudarlos acaba por implicarse demasiado en la historia.

     Es un libro truculento e intranquilizador, tanto para los personajes como, principalmente para el lector. Tengo que echarlo en cara lo primero, no haberlo descubierto antes. Supongo que siempre le pondría ese pero; pero es la verdad. Uno no tiene muy claro lo que va a encontrarse con un libro que tiene este título y lo que hay es una juego mental en el que James le da otra vuelta de tuerca al concepto de fantasma y a la capacidad comprensora del lector.
     Es una historia de fantasmas, y además hay niños, lo cual suele significar una carga extra en este tipo de historias. Pero además aquí se da la circunstancia de que lo importante del libro es quien ve esas apariciones y no las apariciones en sí.  La narración viene de la mano de la reciente institutriz que es la que descubre la existencia de fantasmas de los que nadie más habla, ve a los niños sufriendo reprimidos aunque.. bien pudiera ser que como lo niegan los fantasmas sólo los vea ella. Y ahí está la vuelta de tuerca de James, el momento maestro en que nada es lo que parece ni totalmente cierto y soltamos a los auténticos fantasmas de la historia que no son otros que los interiores. La tensión de este relato es el laberinto que plantea en el cual todo es lo que nos enseña y, al mismo tiempo, puede ser mucho más y esa sensación de espejo que refleja dentro de espejo es la que nos hace intranquilizarnos a cada página, la que angustia a sus protagonistas y la que construye este inolvidable libro.

     Este relato ha sido clasificado muchas veces como juvenil, erróneamente si me permitis opinar. Aunque no podía ser de otro modo en una historia con adultos inocentes, niños que nos son tan niños y fantasmas que actúan con conocimiento de causa. Porque la consciencia es muy importante en esta historia. De lo que unos ven y de lo que nosotros leemos y, os puedo asegurar que no es una novela "juvenil".

     Ahora que lo pienso, tal vez le ponga otro pero al libro, y es que finalizara al pasar la última página.

     Gracias

15 comentarios:

Espe dijo... [Responder]

No lo conocía, pero entre el ambiente, los niños, los fantasmas y todo lo demás, me ha recordado a Los otros. Tiene una pinta estupenda, así que creo que lo leeré aunque me dé pena también que acabe al pasar la última página...

Tatty dijo... [Responder]

No conocía ni libro ni autor y aunque las historias de fantasmas no me van mucho me ha llamado la atención tu reseña
un beso!

Edu dijo... [Responder]

La verdad es que el título no transmite lo que debería, y si lo viera en una librería probablemente no me hubiera acercado a él. El conjunto portada-título, viendo las maravillas que hay hoy en las estanterías de las tiendas, no llama mucho la atención.

En cuanto al tema que trata ya sabes que es de los míos, el problema es que tengo tantos por leer que me he dicho a mí mismo que debo ser más selectivo y éste lo voy a poner en una especie de "lista quizás", porque la lista de futuras lecturas está que echa humo! jajaja

Me alegra que te gustase tanto.

Saludos!
Edu

May dijo... [Responder]

No sabes la de veces que he leído este libro! En mi instituto fue lectura obligatoria en 3º de la ESO. Reconozco que de los libros propuestos, fue uno de los que más me gustaron (el otro, Las lágrimas de Shiva).

Al terminarlo, *SPOILER* Te queda la duda de sila institutriz realmente ayuda al pequeño (muy siniestro diciendo siempre lo de 'querida'. A mí me daba grimilla xD), o bien se lo carga porque está majara *FIN DEL SPOILER* Ni siquiera el profesor nos lo supo resolver... nos dejó a nuestro aire xD

¡Besos!

Winnie dijo... [Responder]

Te reconozco que lo truculento no me va a ahorita mismo...Besotes

Shorby dijo... [Responder]

Lo he tenido un montón de veces en la mano y nunca me decidía... tampoco sabía exactamente de qué iba.
Gracias por la reseña =)

Besotes

Jesús Martínez dijo... [Responder]

¡Magnífica reseña! Tengo un par de amigos que me han recomendado muchas veces tanto a Henry James como esta novela en concreto, pero nunca me he animado. Ni siquiera me había parado a leer alguna opinión sobre el título (hasta este momento, claro). Y lo que he leído me ha gustado mucho, así que tomo nota.

¡Un saludo!

ShaO dijo... [Responder]

Cuéntamelo a mí que la leí por eso, porque estaba descaradamente expuesta en las estanterías de la biblioteca y tenía la edad "juvenil" recomendada ... pero volvería, rectifico tiempo verbal, volveré a leerla ; )
Abrazote

Lana Drown dijo... [Responder]

Lo leí hace tiempo, ¡y no me acuerdo de nada! Solo de que me gustó...Será cuestión de volver a leerlo ;)

Bubbles dijo... [Responder]

No lo he leído pero no pinta nada mal, me lo apunto ^^ un saludo

Margari dijo... [Responder]

Que me gusta este libro. Y le has hecho una reseña buenísima. Lo he leído ya un par de veces y siempre me quedo pensando en ese final, que da para tantas interpretaciones. Genial esa vuelta de tuerca que le da el escritor. ¿Has visto la peli??? Es muy buena también, con una maravillosa Deborah Kerr. La película se llama Suspense, si mal no me acuerdo.
Besotes!!!

Francisco Palacios dijo... [Responder]

¿Será que todos los libros que nos traes son buenos, o que tienes la capacidad de que todos lo parezcan? Gran reseña, amiga.
Un abrazo.
Francisco

Sin ton ni san dijo... [Responder]

Es que no me queda otra que agendarlo e intentar conseguirlo :)

Saludo

G dijo... [Responder]

Buenas tardes.
Buenísima obra y mejor comparación la que hiciste de espejo contra espejo. Al final.. es una historia de fantamas o sólo de locos?
Buen día

Galtzagorri dijo... [Responder]

Lo tengo en casa, pero todavía no lo he leído. Imperdonable, lo se.
Besos!