Travesuras de la niña mala. Mario Vargas Llosa

"-¿Todavía estás enamorado de mí?

Su misma voz, el mismo tonito burlón y risueño de antaño, y, en el fondo, aquel deje del habla limeña que nunca había perdido del todo.

-Debo estarlo, niña mala- le repuse, despertando del todo-. Si no, no se explica que, desde que supe que estas en Tokio, toqué todas las puertas para conseguir un contrato que me lleve más allá aunque sea por un día. He conseguido uno por fín, para Seúl. Iré dentro de un par de semanas. De ahí me daré un salto a Tokio, a verte. Aunque me mate a balazos ese jefe de los Yakuza con el que andas, según me han dicho mis espías. ¿Son, ésos, síntomas de que estoy enamorado?

-Sí, creo que sí. Menos mal, niño bueno. Creía que, después de tanto tiempo, te habrías olvidado de mí."

      Hoy voy a hablar del, según su propio autor, la primera novela de amor de Mario Vargas Llosa. Y cierto es que el protagonista de la novela es el amor, durante cuatro décadas aparece una y otra vez entre nuestros protagonistas, ahora principales, ahora secundarios frente a lo que les sucede, que no son otros que Ricardo y su "chilenita", la niña mala.

      Ricardo, un joven de clase media de Lima, se enamora de una "chilenita" de clase humilde de tal forma que su vida queda marcada por este amor. Ella consiente el amor de Ricardo hasta que aparezca otro mejor, es una joven aprovechada que irá moviéndose por el mundo en pos de su propio bienestar. Pasaremos por Tokio, Londres, París.. de la mano de uno u otro, en momentos políticamente importantes, pero todo ello nunca es más que un mero escenario, apenas percibido frente a los sentimientos de la pareja.

    Si bien Ricardo es un personaje de poco carácter iremos siguiendo sus andanzas, enfrentadas a las de la "niña mala" que nunca hará nada por parecernos "buena", y avanzaremos por sus encuentros preguntándonos a veces si Ricardo se cansará alguna vez de seguir ese amor de juventud convertido en un amor de toda la vida. Él sufre por amor, se jura olvidarla una y otra vez para volver a caer mil veces más. Ella sufre por la vida, en ningún momento es una vida fácil, como pudiera pensarse por lo que os he apuntado, y los lectores... los vamos acompañando a través de las letras de Vargas Llosa para descubrirnos, al menos yo, emocionados al final porque nos han ido calando mucho más de lo que pensábamos. Como en la vida, ni él es tan "gris" ni ella tan "mala".

      Es un libro sencillo, a ratos casi de aventuras donde no hay tregua para pararse a pensar en si es un drama o una comedia, puesto que pasamos entre guiños cómicos para caer en un momento dramático.. y vuelta a empezar. Inconstante todo salvo el amor.

      Gracias