"Ya creía que las cosas no podían empeorar, cuando vio el letrero. «Bienvenidos a Florida. El Estado del Sol».
lunes, 6 de octubre de 2025
Brujería para chicas descarriadas. Grady Hendrix
"Ya creía que las cosas no podían empeorar, cuando vio el letrero. «Bienvenidos a Florida. El Estado del Sol».
miércoles, 1 de octubre de 2025
El enigma de Anne Wallace. Alfonso del Río
Me llamó la atención de esta novela, sobre todo la ambientación más directa de la trama: el entorno. Hoy traigo a mi estantería virtual, El enigma de Anne Wallace.
Conocemos a Anne Wallace, pianista excéntrica, enferma peculiar y amenazada por un grupo terrorista que no teme a la muerte, sino que encara la vida con cierta indiferencia. Cuando se le otorga el Premio Príncipe de Asturias acude sin saber que se producirá un atentado en la misma sala en la que se encuentra el heredero al trono. Bieda, al que ya conocíamos de la primera novela del autor, es encargado de un caso en el que se reencontrará con viejas compañeras y dilemas ya conocidos bajo distinta piel.
Lo primero que tengo que decir es que la novela está bien escrita. El autor utiliza un lenguaje rico que es de agradable lectura. Y la trama es llamativa. Además mezcla lo que ya os he contado con hilos personales, aparece un famoso escultor conocido por todos y sabe unir a todos los premiados en subtramas que pasan de la ambición al sexo sin olvidarse del espionaje. Esto hace que se sienta como una lectura pensada para entretener al lector sin darle tiempo a respirar entre página y página ante un texto concebido para ser puro divertimento. Sin embargo algo hay que no termina de encajar. La exageración permanente en la que cae la trama provoca que el disfrute no sea sostenido. Desde la teatralización del comienzo hasta la investigación, que hubiera estado bien (incluso muy bien) en el caso de no caer precisamente en esta ceremonia, van fragmentando la credibilidad del lector y provocando que su disfrute se ponga en entredicho. Anne me ha generado rechazo con sus paseos, sus peculiaridades amontonadas en una única persona y con esa forma tan peculiar de relacionarse con el resto que no sabe reaccionar si no es de forma exagerada.
Lo mejor de la novela, sin duda, es la relación policial entre dos de sus personajes, y entre otras cosas lo es porque no pasa por la cama ni interés tienen, pero si deja constancia de esa línea difusa entre el bien y el mal cuando uno tiene razones más que suficientes que son, además, entendibles. Esa parte de conflicto generado y explotado es lo mejor de una novela que abre la puerta a continuar la historia de este peculiar policía capaz de ser llamado para una investigación que debería de haber sido llevada por un cuerpo específico de seguridad.
El enigma de Anne Wallace no me ha terminado de convencer, aunque la prosa del autor me sigue pareciendo muy cuidada. Lo mejor de la novela.
Y vosotros, ¿necesitáis creeros un libro para disfrutarlo?
Gracias.
lunes, 22 de septiembre de 2025
Catábasis. R. F. Kuang
"El catedrático Jacob Grimes había muerto en un accidente terrible y, desde cierto punto de vista, había sido culpa de Alice. Así que, tanto por obligación moral como por interés propio (ya que sin él la joven no contaba con ningún presidente del comité y sin presidente del comité no podía defender su tesis, graduarse ni solicitar con éxito un puesto de titular en Magia Analítica), consideró necesario suplicarle al rey Yama el Misericordioso, gobernante del inframundo, que le devolviera el alma de su tutor".
Tenía muchas ganas de leer esta novela. Kuang me gusta porque tiene mala leche y lo demostró en Babel a la que muchos pusieron nombre de universidad, o en Amarilla donde demostró tres o cuatro cosas del uno de los mundos más idealizados: el editorial. Así que, como decía, me moría de ganas. Hoy traigo a mi estantería virtual, Catábasis.
Conocemos a Alice, estudiante de postgrado en Cambridge que parece disfrutar de la dureza de sus estudios. De hecho admira a su tutor de tesis, Grimes, aunque tampoco es que le caiga demasiado bien. La cosa es que Grimes ha explotado, por así decirlo. Está muerto. Y Alice, que tal vez se sienta un poco responsable decide rescatarlo. Del infierno. Y allí que vamos y con esto ya tendríamos el argumento, pero también conocemos a Peter, rival de Alice que también necesita al odiado profesor, y que ha tenido la misma idea que ella. Y ahora sí, descendemos a los infiernos, y que nadie me hable ahora de Orfeo rescatando a su Eurídice, por favor.
El infierno de Kuang es como el de Dante o el de Woody Allen, está dividido en partes que tendrán que ir recorriendo y mostrando al lector, pero también es académico, y es que aquí la autora lo que hace es poner al descubierto el mundo universitario en el que las envidias, zancadillas y manipulaciones están a la orden del día y la rivalidad es un germen que te implantan cuando no miras y del que luego cuesta mucho deshacerse. Como si donde tendrían que abrir tu mente la cerraran dejando una única vía por la que ver la vida. Y es que el infierno en realidad es Cambridge, Oxford o cualquier campus que uno pueda imaginar, sufrir o haber sufrido y si alguien esperaba algo más complejo o sutil es que no ha leído demasiado sobre esta autora. Y luego están las relaciones personales. Alice es un personaje complejo tanto a nivel emocional como social. Parece disfrutar del ambiente académico y admirar a Grimes, pero tampoco lo soporta. Sufre determinadas actitudes por ser mujer, pero tampoco es que sea feminista y presenta, en definitiva, una personalidad llena de aristas. Y bueno, está la historia de amor, aunque yo hablaría de distintos tipos de amor en la novela. Está el amor del deslumbramiento y lo que queda de él una vez somos capaz de enfocar la vista y luego ya el amor que va apareciendo y que era de esperar en la novela, ese que muchos van a catalogar como enemies to lovers para con esas tres palabras dejar claras todas las pistas.
Sin embargo, y sin entrar más en la trama porque creo que lo disfrutable del libro pasa por dejar que sea la propia Kuang la que de pistas de lo que te vas a ir encontrando, si tuviera que destacar algo como característica más relevante de la novela, diría que son sus descripciones. Si alguien ha visto el libro y le ha parecido grueso, que tenga en cuenta que es debido a la capacidad de observación de Kuan y su necesidad de explicarlo todo, citar a todos y dar referencias más o menos veladas (como la relacionada con el nombre del profesor desaparecido) que convierten Catábasis en una novela a capas que disfrutarán de distintos modos los lectores en función de la cantidad de conocimientos previos con los que lleguen a sus páginas. Ninguno necesario realmente, pero sí un buen complemento para recoger todo lo que se dice pero allí no ha quedado escrito.
Catábasis es una novela que he disfrutado mucho y, si me permitís y sin que sirva de precedente, hay que destacar lo bonita que la hicieron.
Y vosotros, ¿con qué título comenzáis la semana?
Gracias.
miércoles, 10 de septiembre de 2025
Santos como nosotros. Niamh Ní Mhaoileoin
lunes, 8 de septiembre de 2025
La esposa joven. Alessandro Baricco
Adoro a este hombre. Cada libro es una experiencia y a la vez encuentras lo mismo. En cada libro de Baricco encuentro la frase más bonita del mundo, el momento más extraño, el romanticismo (no hablo de amor) más puro. Y por eso, hoy traigo a mi estantería virtual, La Esposa joven.
Conocemos a la esposa joven cuando, al cumplir 18, tiene que regresar de Argentina para presentarse ante la familia del hombre con el que prometió casarse. En algún lugar del sur de Italia. En algún momento del siglo pasado. La familia: padre, madre, hija e hijo, tiene dinero gracias a las telas. Son distantes, temerosos de la noche y, sobre todo, muy desapegados. Adoran la calma y los desayunos y ninguno de ellos tiene nombre. El hijo ahora no está, entra en mayordomo, Modesto. Este si que tiene nombre. No son infelices, no se permite. Y tampoco se permiten los libros, de hecho leer está prohibido. Esto a la novia no le termina de parecer bien. Se relaciona con la familia en la que también hay un tío. Empecemos de nuevo: Modesto es quien la explica, la madre es una presencia hermosa, al padre le sucede algo, eso está claro, la hermana está lisiada y el hermano, no está. Ahora quizás se ha comprendido mejor, o tal vez no y por eso el propio Baricco se asoma a la novela un momento. Hay mucho que explicar...
"La infelicidad roba tiempo a la alegría, y en la alegría se construye la prosperidad".
Lo primero que hay que decir es que si vas a leer a Baricco, tiene que gustarte Baricco. En caso contrario, lo odiarás. Por eso uno empieza con Seda y se empalaga con palabras rebuscadas y situaciones imposibles en las que eso que otros llaman verosimilitud saltan por los aires. Sus libros son poesía y a la vez un cuento para adultos, fantasía alfombrando las calles de ciudades conocidas cuyas gentes no reconocemos pero a las que no gustaría encontrar. Yo por ejemplo, llevo años soñando con encontrarme al maestro que hace bombillas a mano, personalizadas en color, intensidad y duración para la persona que la encargaba. Lo cierto es que ni siquiera recuerdo de qué iba esa novela. Creo que había una cama y unos amantes, quizás uno posaba para el otro, qué más da... a mi, quien me enamoró, fue el hombre que hacía bombillas. Eso es leer a Baricco, enamorarse de una letra colgante, de un personaje escondido, un supuesto npc que te roba el corazón al apoderarse de un trocito de tu alma.
"Un jugador profesional, que ganaba con cartas invisibles".
La esposa joven es más de lo mismo y a la vez muy diferente. Un cuento a ratos retorcido, se le ha criticado mucho la cantidad de sexo que tiene, supongo que por la falta de costumbre, pero yo he entendido que forma parte del proceso de cambio en la novia (y aquí me planto que no quiero dar detalles). La novela trata sobre la superioridad moral, la indiferencia, pero no para el lector quien no puede quedarse a un lado de lo que se relata. Los sueños son vitales, un personajes solo vive ahí y es, junto con el ausente, parte más que vital de esta extraña novela de la que lo peor que uno podría decir es que es original, ya que limitarse a eso será casi prejuzgarla. Ahora podría explicaros lo que pasa con el narrador, algo absolutamente desconcertante, mutante y dos o tres -antes más que ahora no se me ocurren, pero también os lo dejo, por si lo queréis descubrir.
"Heredó de su familia un nudo enredado en el que nadie parecía ser ya capaz de distinguir cuál era el hilo de la vida y cuál el hilo de la muerte, y dijo que él se planteó deshacerlo".
La esposa joven no es la mejor novela de Baricco, pero es una novela de Baricco. Se disfruta, como tantas otras suyas, si se lee dos veces; una para entender y otra para atesorar. Pero, sobre todo, se recuerda. Porque Baricco se mete bajo la piel. Por si no se ha notado: vivo enamorada de la forma en que se retuercen las letras de Baricco.
"No habría podido decir qué estaba viviendo. Era un sortilegio. Lo sentí cerniéndose sobre nosotros, y cuando en el mundo no hubo nada más, a excepción de mi voz, intuí que en realidad no estaba pasando nada de lo que estaba pasando, ni nunca iba a suceder".
Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
"No voy a morir de noche, lo haré a la luz del sol".
Gracias.
"Y luego oyó un crujido en su corazón de cristal, percibió un olor dulzón que reconoció y supo con certeza que en ese momento había empezado a morir".
lunes, 1 de septiembre de 2025
La desconocida. J. D. Barker & James Patterson
Las vacaciones son para el verano y el verano para las novelas de no pensar. Al menos la parte del verano que se pasa en la piscina. Hoy traigo a mi estantería virtual, La desconocida.
Viajamos a Hollows Bend. Todo empezó un día cualquiera, bastante antes de la grabación del primer capítulo en realidad. Empezó con la aparición de una chica desnuda y sucia en el bar local más popular. Además de aparecer ella, un montón de cuervos empezaron a chocar contra las ventanas. A partir de ahí todo fue de mal en peor en ese pequeño pueblo de New Hampshire, ya que sus habitantes entraron en una suerte de terrorífica espiral marcada por la sangre. El sheriff desaparece y la joven Riley quiere saber qué sucede en un pueblo en el que madres matan a sus hijos, se suicidan o automutilan. Mientras, la joven muda aparecida, tiene unas marcas en los brazos. Y recordemos, todo empezó con ella.
Bueno, vayamos por partes. En esta novela el dúo de actores han demostrando haber leído mucho terror en los años 70/80. Tanto, que la lectura nos traslada a esa época, lo cual no sería malo salvo porque las escenas de impacto ya las hemos visto muchas veces (la entrada es muy teatral en plan Carrie, seamos serios) y ahora nos sentimos ante una película de serie Z. Para paliar esto, no olvidemos que sus autores son pesos pesados, lo único que tienen que hacer es el tándem habitual de capítulos cortos y siempre-están-pasando-cosas como si de este modo el lector no fuera capaz de pensar en lo que está leyendo. Sin embargo logran el efecto contrario y uno se encuentra pensando eso de "ya solo falta que me digan que..." (¿lluevan pájaros muertos?) para adelantarse justo a lo que sucede en el siguiente capítulo. O dentro de dos. Y es que si la primera premisa es pueblo idílico en el que llega alguien y empieza a pasar todo malo (¿Salem's Lot, dices?) ya partimos de una base poco original. La comparación con King se veía venir de lejos en este batiburrillo con aspiraciones a terror leído en la postadolescencia y recordado con nostalgia que llega, cuanto menos, con década y media de retraso a las librerías. (Por cierto, el pueblo... La Cúpula...).
Supongo que lo fácil es decir que es una novela impredecible, pero es que hay cosas que son imposibles de adivinar y, seamos sinceros, no se puede ni se debe sacrificar una novela buscando esa palabra. El final acaba siendo más desconcertante que otra cosa. Como en este caso.
La desconocida es una novela perfectamente prescindible. Y mira que me gustan mucho ambos escritores pero todo el mundo puede echar un borrón.
Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
Gracias.
miércoles, 20 de agosto de 2025
Figuras ocultas. Jason Rekulak
Si a mi me preguntasen, diría que el verano es para el terror. Porque uno tiene más tiempo, porque leerlo por la noche, sabiendo que es demasiado tarde como para que haya personas normales despiertas le da un plus... los grillos... verano. Por eso hoy traigo a mi estantería virtual, Figuras ocultas.
Cuando conocemos a Mallorie lleva año y medio sin beber y acaba de conseguir un trabajo aparentemente fácil y que le puede venir al pelo: será la niñera del hijo de Ted y Caroline, Teddy, un niño con el que encaja desde el primer momento. Ahora Mallorie usa piscina, pasea por un barrio seguro y tiene a un niño artista que es feliz mostrándole sus dibujos: palotes de niño de 5 años. Todo parece perfecto hasta que el niño dibuja a un hombre arrastrando un cuerpo con unos detalles impropios de alguien de su edad. Dibujos turbios que llevan a Mallorie a descubrir un suceso muy cerca de ella. Y a otros a pensar que quizás su salud mental no es la que debiera para ese trabajo.
Tengo que decir en primer lugar que la novela, si bien es cierto que comienza como una historia de terror, poco a poco va derivando hacia un thriller en su última parte. El autor, que había realizado un buen trabajo de ambientación, comienza a perder pie a medida que sacrifica elementos importantes de la novela bajo una premisa que se va volviendo cada vez más habitual: sorprender al lector.
Me gustó mucho el patrón de la relación Mallorie y Teddy, la existencia de los dibujos, lo que la protagonista ve en ellos y la forma de presentarlo al lector, que se siente en todo momento parte de la historia, así que en ese sentido todo iba estupendo. Sin embargo los problemas comenzaron con las sorpresas, y es una faena ya que no puedo desvelar ninguna sin estropear el libro. Así que me limitaré a decir que hay puntos de Mallorie que son "demasiado adecuados" y otros que aparecen por cómodos para luego resultar olvidados. En cuanto a otros personajes, hay uno particularmente que me ha chirriado de forma salvaje desde que comenzó a desarrollarse la sorpresa. Ví las pistas, claro, pero aún así me ha parecido un cambio oportunista que poco o nada tenía que aportar a la historia principal.
Al final Figuras ocultas no me ha convencido. Vi que fue elegido como uno de los libros del años en 2022 en GR así que tal vez sea yo que soy más polilla o simplemente no me ha pillado en el momento adecuado para disfrutar de él.
Y vosotros, ¿seguís los premios GR de lectores?
Gracias.
lunes, 18 de agosto de 2025
Quién mató a mi padre. Édouard Louis
"Cuando se le pregunta qué significa para ella la palabra racismo, la intelectual estadounidense Ruth Gilmore responde que el racismo es la exposición de determinados colectivos a una muerte prematura".
Con mis momentos mejores y peores creo que poco a poco me he ido leyendo toda la obra de este autor. Hoy traigo a mi estantería virtual, Quién mató a mi padre.
Supongo que esta vez es fácil y es que si el libro es de Édouard Louis, de un modo u otro, conocemos a Édouard Louis.
La novela comienza de frente, con una fuerte crítica social a los privilegios masculinos, la opresión social y el uso de la política como cuchillo, para inmediatamente después llevar al narrador a visitar a su padre tras mucho tiempo, al que encuentra muy deteriorado y en el que refleja una parte de los problemas sociales existentes. Descubrimos además que el padre no fue tal, nos presenta una historia de fracasos permanentes que provocan daños en el narrador, así que nada nuevo por este lado.
Louise es conocido por manejar la autoficción y llevar su activismo y su mirada crítica a la sociedad al terreno propio. En esta ocasión nos habla de su padre, al que disecciona como un hombre con sus defectos que es víctima de la época que le ha tocado vivir y al que incluso permite un punto de cambio. Sin embargo, y posiblemente este sea el punto que hace que la novela gane interés, esta vez hay una crítica más directa, una reflexión acusatoria que trasciende la no ficción y eso hace que el lector no se sienta tan preso de una historia personal que, por lo dramáticamente adecuada a los fines de Louise, muchas veces se ha puesto en duda. Era evidente que la masculinidad y la violencia iban a estar en el centro del foco de atención, pero en esta ocasión y acertadamente, el autor sabe hacerse un poco a un lado para permitir el protagonismo a su padre (algo que no supo hacer con la historia materna). Esto suaviza la sensación de leer algo ya contado, la enésima historia de la misma vida en un panorama literario que tiene todas las opciones para un hombre que triunfó ya con su primera novela.
Quién mató a mi padre me ha parecido una buena opción para quien ya haya leído al autor. Sin embargo deja el regusto agridulce de quien lee a alguien que no se arriesga.
Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
Gracias.
miércoles, 13 de agosto de 2025
La chica de Kyushu. Seisho Matsumoto
lunes, 11 de agosto de 2025
Suave es la furia. Sash Bischoff
"Cuando todo ha pasado, continúa allí de pie, atrapada tras un muro de cristal, sacudida por un horror mudo, sísmico.
miércoles, 30 de julio de 2025
La tienda de hechizos . Sarah Beth Durst
Tengo que reconocer que me compré el libro por su cubierta y es que sí, a veces somos un poco superficiales. Hoy traigo a mi estantería virtual, La tienda de hechizos.
Viajamos a Alyssium,. Allí vive Kiela donde es bibliotecaria cuando se produce una revolución que incluye destrucción de libros y decide salvar todos los que puede e ir a su lugar de origen, Caltrey, que parece diseñado basándose en las fantasías más dulces de cualquier lector. Kiela huye con Caz, que estoy segura imaginaréis en una versión un poco diferente de la mía, pero que os encantará, y los libros que se llevaron son de hechizos. Pronto ven que en su nuevo hogar no es todo perfección y maravillas, porque a ver, no hay mermelada. Así que deciden usar uno de los libros...y aparecen en el jardín un montón de plantas cuyo fruto es perfecto. La historia es que, como he dicho, ni Kiela ni Caz son hechiceras y eso supone que su magia puede parecer ilegal. Así que abren una tienda de mermeladas y comienzan a probar con los hechizos con la mejor intención de ir ayudando.
En un momento en el que los libros de romantasy están de moda y en el que los lectores preguntan por el picante, La tienda de hechizos es una fantasía romántica en el más amplio sentido de la palabra. Esto significa que incluso nos sobra el romance que hay, porque la historia no lo necesitaba. En las primeras páginas queda claro lo que hay: una trama de baja intensidad con un alto contenido cozy en el que todo va a terminar bien y que se usa como excusa para enseñar al lector un mundo absolutamente maravilloso. La autora incluso se permite incluir escenas cómicas en su afán de lograr un ambiente confortable que ponga de buen humor al lector. Tengo que reconocer que la protagonista a veces me ponía nerviosa y que el vecino.. bueno, yo lo hubiera echado lejos, pero eso no significa que no me haya quedado con la magia que destila la historia. La autora no invierte mucho tiempo en la creación del mundo y es más la interacción con los personajes y la atmósfera lo que van tirando de esta lectura amable.
Como decía, llega en un momento de modas, en el que gente de todas las edades quiere unirse a ellas y en el que uno no siempre sabe cuánto sexo tiene una novela. Y a veces hay que regalar. Y por eso, más allá de por el rato de magia blanca que regala, es interesante La tienda de los hechizos, porque es perfecta para cualquier edad. Un libro que sirve para leer o regalar sin tener miedo a que cruce líneas que no debe. Uno de esos que uno puede situar cerca de, por ejemplo, Caraval. Pero en su versión más cozy.
Y vosotros, ¿os influyen las modas?
Gracias.
lunes, 28 de julio de 2025
Estás en mis ojos. Angélica Morales
"París, 27 de enero de 1985
miércoles, 16 de julio de 2025
La flor de sal. Tabea Bach
"Julia probó la salsa, cerró los ojos y, por un momento, la reluciente cocina de acero cromado y su equipo pasaron a un segundo plano. En la lengua de Julia estalló un verdadero ramillete de sabores: pimienta, frutas y un sutil toque amargo que solo percibían los que sabían distinguirlo. Luego, una pizca de canela, cilantro y (ahí estaba el secreto) vainilla. La pulpa de medio tomate ananás aportaba el mismo grado de acidez que de dulzura. Tenía que saber así, justo así. La cantidad de sal, de la mejor variedad procedente del Himalaya, por supuesto, también era de lo más adecuada. El término salsa, al fin y al cabo, provenía del latín salsus y significaba «salado». Aunque las que preparaba Julia eran mucho más que simplemente saladas, puesto que daban a sus platos un matiz inconfundible".
lunes, 14 de julio de 2025
Las abandonadas. J. D. Barker
"El frío de la noche se le clavaba en la piel ante el aullido del viento que pasaba en un quejido entre las ramas desnudas justo al otro lado de la ventana. Rachael tiró de las sábanas, se las ciñó alrededor del cuello y se deslizó hacia el lado de su marido en la cama en busca de su calor. No estaba allí, sin embargo. Descubrió que estaba sola.
jueves, 10 de julio de 2025
Carl el mazmorrero. Matt Dinniman
Conocemos a Carl. Se acaba de enterar de que su novia no era tan fiel como le hubiera gustado y ha puesto fin a la relación. O casi, porque el gato de su novia aún está con él. Gata en realidad, Dónut, con un carácter muy especial. Cuando lo conocemos está intentando convencerla de que vuelva a casa con él. Y justo ahí da comienzo el apocalipsis. Como en las pelis. En una primera ola muere un montón enorme de gente. Y después... hay un comunicado y las personas que han sobrevivido (y no os diré el motivo) pueden elegir entre quedarse en la tierra que no tiene absolutamente nada, o entrar por unas puertas que se abren a unas escaleras. Y sí, Carl bajó.
A partir de ahí Matt Dinnman construye una historia divertida y demencial sobre un apocalipsis televisado en una suerte de videojuego del que Carl, acompañado de su inseparable (y a ratos insoportable gata) es protagonista frente al resto de supervivientes. Y es que sí, al grito de solo puede llegar uno (al final del juego) la novela se convierte en un tributo a los videojuegos y a los jugadores (no olvidemos que haber jugado otorga puntos de experiencia) y veremos "jefes", enemigos de distintos niveles, logros, cofres, pociones y casi cualquier otra cosa que imaginemos. Con la única diferencia de que todo se ha vuelto muy real.
Dinniman nos da juego, nos da lucha, nos da humor y nos da seres creados especialmente para la novela. Y nosotros nos quedamos. La narración está bien llevada, es muy divertida y, donde otros se empeñan en seguir el formato clásico del antihéroe, Dinniman opta por hacer que sude mientras el lector se debate entre comprender cómo piensa Carl/ sentirse identificado con él en algunos momentos. Porque el gran mérito del libro es que logra que el lector sienta la pasión por el juego. Sobre todo si en algún momento de su vida ha sido, o ahora lo es, jugador.
Carl el mazmorrero es una lectura divertida que se vive de forma inmersiva a poco enfermo que estés.
Y a vosotros, ¿os apetece jugar?
Gracias.
lunes, 7 de julio de 2025
Noventa y nueve cuentos divinos. Joy Williams
"Una mujer que sentía devoción por su madre y había llorado su muerte todos los días durante años encontró unas postales en una tienda de antigüedades y trastos viejos. Las postales mostraban panorámicas sin mayor interés, pero aún así le llamaron la atención y compró unas cuantas con playas vírgenes y caminos de bosque. Al llegar a casa, sintió la irrefrenable necesidad de enviarle una postal a su madre.
miércoles, 2 de julio de 2025
La biblioteca de la niebla. Kai Meyer
"Sentía a Mara en toda la casa, aunque se había marchado hacía tiempo. Sentía su presencia en los pasillos de techos altos igual que notaría una corriente de aire, veía su silueta en los pliegues de las cortinas de brocado, oía sus pasos en las salas barrocas y en la escalinata de mármol.
lunes, 30 de junio de 2025
Donde está enterrada el hacha. Ray Nayler
miércoles, 25 de junio de 2025
Lluvia pequeña. Garth Greenwell
"Me pidieron que describiera el dolor pero el dolor era indescriptible, en una escala del uno al diez requería otra escala".
Greenwell es un escritor que descubrí hace relativamente poco pero cuya pluma me ganó en Lo que te pertenece. Por eso, hoy traigo a mi estantería virtual, La lluvia pequeña.
El protagonista de esta novela es también su narrador. Un escritor, poeta, que está enseñando cuando el dolor le sobreviene arrasándolo todo. Y donde dicen que el dolor es indescriptible y que incluso somos incapaces de recordar cómo fue exactamente un dolor pasado más allá de la intensidad con la que lo padecimos, Greenwell pone a su narrador a cuatro patas, lo dobla y le hace sentir que lo agarran las tripas. Su dolor es visceral y su pareja le pide que acuda a un hospital. Pero corre el año 2020 y los hospitales eran lugares aterradores en los que la gente moría por una pandemia. Finalmente acude, qué remedio, y es diagnosticado de una disección de aorta, algo terrible y potencialmente mortal.
Ahora el narrador se convierte en paciente, su caso atrae la atención, le miran y hacen pruebas. Su piel pasa por muchas manos y su mente divaga entre presente, pasado y poesía. Y aquí el libro se despega de lo habitual. No se trata de una novela de hospitales, ni de qué sucedió exactamente en ese difícil momento. Tampoco una novela sobre el enfermo y quien lo acompaña (su pareja no podrá hacerlo durante semanas). Es una novela sobre el redescubrimiento de la propia conciencia en una situación extrema y el dolor vuelve en oleadas que el autor gira una y otra vez buscando su descripción. El protagonista se redescubre por dentro y por fuera, salen a flote viejos complejos a partir de nuevas situaciones y, exactamente igual, esta nueva situación desempolva viejos sentimientos. L, su pareja, el añorado, el que cuida, el que tal vez ha sido descuidado por él y, frente a tanta soledad, el narrador parece redescubrir quién es su punto de anclaje con el mundo.
Greenwell en sus novelas lleva al protagonista, presumiblemente el mismo, a situaciones difíciles de describir, viscerales. Y quizás, de todas ellas, la más incapacitante para ser plasmada es el dolor. Por eso, y no solo por el sentimiento, vuelve a ella una y otra vez en un intento de desesperarnos tanto como lo está el propio protagonista al que sentimos desnudo frente al mundo, vulnerable. Y en pandemia.
Lluvia pequeña es una gran novela. Y poco más hay que añadir. Salvo que quizás no sea para todos.
Contadme, ¿os gusta leer temas torturados como a mi?
Gracias.
lunes, 23 de junio de 2025
La muy catastrófica visita al zoo. Joël Dicker
Tras La verdad sobre el caso Harry Quebert, poca gente hay que no conozca el nombre de Joël Dicker. Te gustará más o menos, pero conocerlo, lo conoces. Hoy traigo a mi estantería virtual su última novela, La muy catastrófica visita al zoo.
Conocemos a Josephine mientras recuerda lo sucedido en un zoo local un viernes. Allí estaban también sus amigas: una hija de divorciados, una hipocondríaca, una que practica karate, otra que va con camisa y la que no habla. Y también hay en el libro un atasco por culpa de plastilina. Y, por supuesto, el misterio. Me váis a permitir que no entre mucho más en detalle porque es un libro de doscientas páginas y si desvelo incluso alguno de los dos misterios... pues os podría fastidiar la lectura. Así que vamos con la novela.
Dicker ha escrito una novela para todas las edades porque oye, ya que enganchó a la lectura a un montón de adultos, pues por qué no va a poder hacerlo también con los más jóvenes. Así que nos deja este cuento con misterio, que si eres adulto no debes olvidar está pensado también para el público infantil o se te podría quedar realmente muy corto. Y es que tiene de recuerdo permanente sobre lo especial que es tal o cual personaje, el misterio simple y ese tono levemente condescendiente que nos encontramos en algunos libros con personajes jóvenes que, vistos desde el prisma de un adulto, se basan en el clásico cliché de los niños son más listos de lo que parecen y además no tienen filtro alguno para decir las cosas. Por supuesto, la narradora y el colegio especial son de importancia vital para la narración en sí. El caso es que el libro que comienza con un desastre va enlazando uno tras otro sin abandonar la costumbre de giros y sorpresas mientras yo iba pensando que lo que le iba fallando al libro es la originalidad. Y claro, me topé con la moralina en la que se reflexiona sobre el mundo digital y el real, las personas especiales y tantas otras cosas que parece tener que haber metido con calzador para que la novela encajase con la idea que tuvo de lo que iba a escribir. Porque esa es la sensación que no logré despegarme durante la lectura: la de estar ante un producto prefabricado. Es como si el autor hubiera creado las normas de lo que quería lograr y se hubiera dedicado después a ir rellenando espacios hasta meter todos los ingredientes para poder llegar al epílogo.
Es cierto que la novela es entretenida y que mantiene ese nosequé que engancha y que posee la pluma del autor, pero si vamos a ponernos serios, la época de pandillas como Los Cinco, ya pasó hace tiempo y ahora si se escriben se hace de una forma más cercana a la vida que llevan los niños hoy. En este caso tengo que decir que la novela tiene a su favor la novedad, la reinvención, que no haya un muerto y que el autor haya decidido salir, como ya hiciera en El tigre, de su zona de confort asegurado. La parte negativa es que, si bien admiro la seguridad en uno mismo, en este caso como en otras lecturas suyas (capitaneadas por una cuyo protagonista es El Escritor), uno tiene la sensación de estar recibiendo un mira que bien lo hago que trasciende al argumento de la propia novela.
La muy catastrófica visita al zoo es, efectivamente, una novela que puede leer un público muy amplio y que seguramente sea mejor aprovechada por los lectores más jóvenes. Y, si eres un adulto y vas a leerla, descubrirás que te gusta más desde la nostalgia que desde el momento lector.
Y vosotros, ¿con qué libro comenzáis la semana?
Gracias.
lunes, 16 de junio de 2025
El caso de la víctima silenciada. Pierre Martin
"En el periodo napoleónico, a un asesino le podían condonar la pena de muerte si, en el momento de cometer el crimen, había perdido la cabeza por culpa del mistral. Y si se engendraba un niño en una noche estrellada mientras el fuerte viento provenzal sacudía los postigos, la gente temía que pudiese nacer con retraso mental".
miércoles, 4 de junio de 2025
La espada fulgurante. Lev Grossman
"Con la espada bien asida en el guantelete, Collum golpeó con el pomo en el rostro del otro caballero, tan fuerte que dejó marcados los nudillos en el metal oscuro labrado. Aun así, su oponente no dio la menor muestra de tambalearse ni de rendirse ante él. Susurró un juramento e insistió con una patada hacia el tobillo, pero falló, estuvo a punto de caerse, y el otro caballero giró con elegancia y le arreó tal mamporro en la cabeza que le zumbaron los oídos. Habría dado un millar de libras por poder enjugarse el sudor de los ojos, pero tampoco es que las tuviese. Sus posesiones sumaban tres chelines y dos peniques de plata, exactamente".
lunes, 2 de junio de 2025
El subastador. Joan Samson
"El fuego se elevaba en un cono perfecto, como suspendido de la voluta de humo que ascendía en línea recta hacia el despejado cielo primaveral. Mim y John sacaban a rastras arbolillos secos de entre la maleza amontonada junto al muro de piedra y los arrojaban a las llamas, y daban un rápido paso atrás cada vez que las hojas secas empezaban a chisporrotear".